l'Aixortà: Arc dels Xorquets - Penya Alta (1219 m.) - Arcs d'Atanços

 Sábado 22 de mayo de 2021

Nueva cita con mis queridas montañas alicantinas, a las cuales solo bajamos una vez en el pasado 2020. Con el verano a la vuelta de la esquina lo más normal es que me hubiese esperado hasta bien entrado el otoño para volver a ellas, pero tenía de demasiado mono de ellas como para esperar tanto tiempo, así que antes de que viniesen los calores más fuertes pusimos rumbo a la Marina Alta. Elegimos una vieja conocida; l'Aixortà/Xortà. Ya estuvimos por allí en 2017, cuando coronamos su cima culminante, la Penya Alta, en un gran recorrido por su vertiente oriental. Hoy conoceríamos su cara norte, y además de volver a subir a la Penya Alta también descubríamos las dos joyas geológicas de esta sierra, los arcos de els Xorquets y d'Atanços.

Las once de la mañana no es una hora muy ortodoxa de iniciar una ruta, y más si hablamos de las sierras alicantinas, en las que a poco que salga el sol con fuerza este siempre suele picar de lo lindo, y más si vamos allí en esa avanzadilla que el verano suele hacer a finales de mayo, pero es que a uno de los dos miembros de la expedición se le pegaron las sábanas...

Por si no hubiésemos tenido suficiente ración de carreteras estrechas y curvas para llegar a Castell de Castells aún nos aguardaba la sinuosa y mareante subida hasta els Plans d'Aialt, a escaso kilómetro del Coll de Bijauca, donde íbamos a comenzar a andar.

Empezamos a remontar unos caminos rurales, y enseguida se nos muestra, y ya no la dejaremos de ver durante toda la ruta de subida, la fachada norte de la Xortà, con la Penya Alta a la cabeza, y el bonito contraste que forma su impoluto blanco calizo con los campos cultivados, principalmente de almendros. El primer sendero del día nos encauza hacia el Barranc del Sacanyar o del Xorquet. Enseguida se deja ver una cresta caliza en la que de repente se abre un ojo, se trata de l'Arc dels Xorquets. Para llegar hasta él utilizamos la tan manida táctica del trochemoche, aunque luego vimos que si hubiésemos continuado unos metros más por el sendero principal hubiésemos encontrado una trocha que nos hubiese acercado de forma más cómoda al arco. Pero ya se sabe, todos los caminos, incluso, aunque no estén muy bien definidos, llevan a Roma, y en este caso, a l'Arc dels Xorquets. Por suerte hemos visto ya muchas formaciones de este tipo, y cada una tiene su propia personalidad. Esta, además de no ser la excepción, le pone un bonito marco a la Penya Alta.

Agradable toque rural en los primeros compases de la ruta, en todo momento con la north face de la Xortà a la vista, capitaneada por la Penya Alta.

Primer sendero del día, que va colgado a media ladera del Barranc del Xorquet/Sacanyar.

En la vertiente contraria del barranco aparece este crestón...

...que al verlo desde diferente perspectiva nos muestra el secreto que esconde...

...que no es otro que l'Arc dels Xorquets. Llegar a él exigirá abandonar el sendero, cruzar el barranco y hacer un monte a través.

Ya puestos en faena obtenemos esta bonita estampa de la Penya Alta, que supervisará nuestro avance.

Con más facilidad de la esperada nos plantamos ante el arco. Bajar hasta él si que requerirá descender por un inclinado sendero con bastante piedrecilla suelta.

Despacito y con buena letra nos plantamos ante esta maravilla, una ventana kárstica hacia la Penya Alta.

Movemos el plano un poco a la derecha para ver mejor la verticalidad, otra pequeña ventana, la trepadora que crece sobre la caliza y el gendarme que custodia al arco.

Con una sencilla trepada se puede pasar bajo el arco y verlo desde la otra vertiente.

Mother Nature, una finísima escultora.

Visitado el arco y recuperado el sendero principal no tardamos mucho en serle infieles para irnos de la mano con el que sube hasta el Pla del Sacanyar, que presenta indicios de allí antaño hubo actividad agrícola. Hoy sigue siendo un lugar fértil, pero al libre albedrio y de forma mucho más natural. Allí enganchamos un potente sendero, que marcándose un "to tieso" nos plantará en la pista forestal que sube hasta el bonito paraje de umbría en el que están la Font dels Teixos y su refugio. El lugar invita a hacer una parada y el refugio una pernocta... a ver si se tercia en nuestra tercera visita a la Xortà.

Retomado el sendero principal este sale a una zona herbosa, tras el collado, cabecera del Barranc de la Serra, aparecen el Castellet de Garx, la Serra del Ferrer y Bèrnia. De haber seguido el sendero los hubiésemos visto mejor...

...pero tomamos un ramal que nos sube hasta el Sacanyar, allí encontramos esta construcción, vestigio de pasadas actividades rurales en el lugar.

Flores silvestres se encargan de engalanar estas antiguas eras. El efecto Foehn hace lo mismo con la sierra del Carrascar de Parcent.

Tras una exigente subida nos plantamos casi en la base de la Penya Alta, este caminete enlaza un poco más adelante con la pista que sube a la Font dels Teixos.

Desde algunos puntos de esta pista tenemos una mejor perspectiva de la Penya Alta, y ya vemos la variada vegetación que alberga este rincón de la Xortà.

Font dels Teixos, de la que manaba un fino chorro, el suficiente para poder llenar la botella y beber.

En el paraje hay unas mesas y unos bancos, y un refugio libre muy bien cuidado.

A ver si la próxima vez que venimos por aquí es para pasar una noche en este refu.

De la fuente y el refugio a la cima hay un paso, pero vaya paso, una sección atractiva de verdad: sendero dibujado en pedrera, vegetación de umbría y morros calizos, un ambiente muy montañero, vamos. La cosa se remata con la llegada a una "Hourquette" en toda regla, paso previo a la rocosa pala final que nos separa de la cima de la Penya Alta. Una vez arriba misma sensación que hace cuatro años, que de todas las grandes sierras alicantinas quizás esta sea la más infravalorada, pues dejadme que os diga una cosa, nada tiene que envidiar a sus primas Puig Campana, Bèrnia, Aitana o Serrella, todas bien visibles desde allí arriba. Buen sabor de boca se nos quedaba, por la cima por supuesto, y por el toque oriental del falafel que llevaba para comer.

Toca afrontar la subida final a la Penya Alta. Habrá que remontar esta vaguada. A la derecha llama poderosamente la atención...

...esta fantástica fisura vertical en la roca.

Face to face. No llegó la sangre al río 😂. El perro iba con una pareja. Me dijeron que no era suyo, pero que les acompañó desde el embalse de Guadalest, donde ellos habían empezado la ruta. Luego en la cima otros montañeros me contaron que el perro es de alguien que vive en las inmediaciones del embalse, y que suele acompañar a los excursionistas que suben a l'Aixortà. Le debe gustar esta sierra al animalito, lo comprendo perfectamente.

La subida nos regala esta vista de la ceja caliza bajo la que está la Font dels Teixos...

...y de la mejor silueta de la Serra de Bèrnia.

No faltan esculturas calizas durante la subida. La cima, a tocar.

La subida por la vaguada se remata cruzando este portillo, un bello paso montañero.

De nuevo la ceja rocosa, ya durante la subida final a la Penya Alta.

En la cima de la Penya Alta, 1219 metros, y con los mismos protagonistas que hace cuatro años, Bèrnia incluida.

Vistas. En primer término la Foia Plana, en un pequeño valle colgado al sur de la cima, y al fondo destaca...

...el amo y señor de las montañas alicantinas, el Puig Campana.

Nos asomamos a las canales que caen hacia el Morro del Serrellar y la Font dels Teixos.

Más nubes hacia el norte, que sigue engullendo a las sierras del Cocoll y el Carrascar de Parcent.

Miramos ahora hacia poniente, a la cresta por la que también se puede acceder a la cima (el grupo con el que coincidimos en la cima llegaron por la cresta), me dijeron que no tiene excesiva dificultad, pero que tiene algunos pasos bastante expuestos. Me la apunto.

Seguimos mirando en la misma dirección, hacia la vecina Serrella, la fantástica Serrella, con sus tres cumbres principales, la Mallada del Llop, el Pla de la Casa y el Recingle Alt.

Incapaz de encontrar el sendero que discurre bajo la cuerda cimera por su vertiente sur (lo busqué para no tener que volver a pasar por la Font dels Teixos) opté por desandar camino hasta un poco más abajo de la fuente  y recorrer la vertiente contraria por una ancha pista forestal. Gran acierto, pues las grandes verticalidades y desplomes de esta sierra se encuentran en su cara norte. A veces queremos rizar el rizo haciendo que una ruta sea completamente circular y simplemente por no repetir un cacho de camino nos podemos perder cosas muy interesantes...

Tras la infructuosa búsqueda del sendero de la vertiente sur regresamos al portillo...

...y volvemos a bajar a la pista forestal. La Penya Alta se sigue mostrando altanera.

Y continuaremos un buen tramo por la pista. Hubiese sido una pena perderse lo que venía a continuación...

...todo el espectáculo calizo de la norte de la Penya Alta y su cresta. Embelesados andábamo.

Bèrnia, quizá un poco celosa, asomaba de vez en cuando para que no nos olvidáramos de que ella también estaba allí.

El blanco calizo resaltado por el sol formó un bonito contraste con el verde primaveral.

Son tramos de pista que no importa recorrer por muy largos que sean, al fondo aparece...

...la Penya Menorca, un bonito topónimo, muy adecuado en una zona en la que todavía se habla mallorquín en algunos pueblos.

Mira por donde, además de los dos Arcs también nos llevamos un pequeño forat de propina.

Pronto tomaremos un camino descendente, así que toca despedirse de la Penya Alta...

...y también, para que no siga teniendo celos, de Bèrnia.

De haber encontrado ese sendero de la cara sur hubiésemos llegado a un collado bajo el Penyó Gelat. Por la pista de la norte no fue necesario llegar hasta allí. Bastante antes tomamos otro pistón por el que empezamos a perder cota de forma bastante rápida. Tan rápido íbamos que casi nos saltamos el desvío a los Arcs d'Atanços. Hubiese sido un crimen perderse eso, pues después de haberlos visto infinidad de veces en fotos, allí in-situ son muchísimo más grandes e impresionantes, nada tienen que envidiarle por ejemplo al pirenaico Arco de Piedrafita, tan de moda últimamente y marco del postureo más exagerado. Aquí hoy ni gente ni por supuesto poses, solo silencio y belleza envolvente, que, parafraseando a Herzog, es como más intensamente siento.

Tras un buen rato triscando a pleno solondro agradecimos el tránsito por este bosquecillo de pinos.

Vamos ya por el sendero que da acceso a els Arcs d'Atanços, antes de bajar a ellos encontraremos un mirador natural donde tendremos el primer contacto visual con ellos.

A primera vista no parece que sean muy grandes...

...pero una vez te pones bajo ellos resulta que son descomunales.

Espectacular.

El mejor sitio para admirar la grandeza de esta obra natural es su vertiente occidental, donde también se forma como una bóveda.

Con la cámara no logramos abarcar todo el conjunto...

...con el móvil, y cambiando de formato de captura logramos abarcar un poco más.

Con el subidón de habernos fundido durante unos minutos con esta maravillosa obra de la madre Gaia retomamos la ruta, que entraba en su recta final y recuperaba, con el toque rural de sus primeros compases, con el cual finalizaba. Qué gran ruta nos habíamos marcado, aunque tratándose de Alacant no esperábamos otra cosa. Las curvas de regreso a Castell de Castells no se me hicieron tan pesadas ahora, allí en en la terraza del Hotel Serrella me esperaban dos frías cañas. La primera, con lo calurosa que había sido la jornada fue vista y no vista, la segunda, calmada ya la sed voraz, fue degustada de forma más tranquila. Para la vuelta a casa buscamos otra alternativa, pero que resultó ser más curvosa incluso que la ida. Y no, no lo achaquéis a las cervezas, aunque si que es cierto que regresamos a Betxí en cierto estado de embriaguez, esa agradable borrachera montañera que siempre nos provoca las montañas alicantinas.

Sendero de regreso de los arcos, bien dibujado entre el verde.

Frondosa vegetación la del Barranc de les Foies. Al fondo el Castellet y la Mallada del Llop, en la vecina Serrella.

Y con este impoluto campo de almendros, y la Penya Alta, finaliza esta crónica, espero que os haya gustado.

Un saludo!!

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