Ascensión Invernal al Moncayo (2315 m.) por el Corredor de los Gendarmes

Sábado 8 y Domingo 9 de marzo de 2014

Con esta es la tercera vez que subo al Moncayo, ¿y no te aburre subir tantas veces la misma montaña?, diréis, pues no, no me aburre subir la montaña que sea las veces que sea, y en el caso del Moncayo la verdad es que cada ascensión que he hecho a esta montaña ha tenido unas circunstancias especiales que la han diferenciado de la anterior, la primera vez la recuerdo con mucho cariño puesto que fue mi primera experiencia en montañismo invernal y subimos por la pala normal del Cucharón, la segunda, el año pasado, también fue muy especial para mi ya que fue mi primera gran montaña con Eva y su primera invernal también en la que subimos por una variante del Cucharón y bajo una espesa niebla, y esta tercera pues no ha sido menos especial, con mi compañero de fatigas Jesús y por el Corredor de los Gendarmes, siendo esta última la de mayor dificultad técnica y que os paso a resumir a continuación.

Ya puestos a variar, en esta ocasión también variamos el hospedaje y la hora de llegada el sábado, si en 2011 y 2013 nos alojábamos ya llegando caída la noche en el albergue de Alcalá de Moncayo, esta vez lo hicimos en un hotel de Añón de Moncayo, al cual llegamos a eso de mitad tarde y con el sol brillando en todo lo alto y con bastante tiempo de esparcimiento (léase ir de birras) antes de la cena, aunque las opciones de ocio de la zona no es que sean muy variadas que digamos y como las cervezas eran muuuy caras nos fuimos a hacer fotos del Moncayo desde diversos puntos, ya en el hotel, la cena carnavalera invitaba a alargar la velada, pero había que madrugar, así que nada más cenar nos fuimos a nuestros aposentos.

Domingo, tocaba diana a las seis de la mañana, nos esperaba el Moncayo, que aparte del  deportivo y montañero tiene un gran interés botánico que hace de la aproximación en coche hasta el Santuario de la Virgen del Moncayo toda una gozada ya que a medida que vamos subiendo atravesamos distintos tipos de bosques, primero de carrascas, que dan paso a otro de abedules (donde vimos una decena de corzos) y más arriba los pinos y un espectacular hayedo, es cuando llegas al santuario donde mejor se aprecia el fantástico cambio cromático de los distintos bosques.

Llegamos al santuario (¡¡¡los primeros!!!), no hace excesivamente frío, pero sopla un viento bastante fuerte que no estaba pronosticado para hoy, del que nos protege de inmediato el pinar en el que nos introducimos, pero mal asunto si sigue soplando así, y además la senda está totalmente congelada y hay que ir con cuidado con los constantes resbalones, obligándonos a calzarnos los crampones y el piolet antes de hora cuando llegamos a la cota de nieve, puesto que esta estaba como una piedra.

Por suerte el viento ha parado cuando salimos a la Hoya de San Miguel o Circo del Cucharón, donde se nos abren diversas variantes de subida, al principio pensábamos hacerlo por la pala normal, pero viendo las perfectas condiciones de la nieve decidimos hacerlo por el Corredor de los Gendarmes por su variante izquierda del espectacular gendarme central.
Este corredor pone las pilas de inmediato y sostiene una pendiente de 45º/50º durante sus primeros metros, como digo la nieve está perfecta y nos hace progresar con rapidez por el corredor, que no ofrece excesivas dificultades siempre que se sepa progresar con crampones y piolet, pero cabe poner los cinco sentidos en él, de hecho hice tres fotos contadas durante este tramo de más inclinación.
Salimos a una zona más abierta donde enlazamos con la pala noreste del Moncayo que va manteniendo una inclinación de 40º/35º y que va menguando a medida que vamos ascendiendo hasta prácticamente llanear hasta la cima.

Estamos en la cima del Moncayo, techo de Zaragoza, Soria , el Sistema Ibérico y una isla en las llanuras sorianas y zaragozanas y la tenemos prácticamente para nosotros solos (solo tres montañeros de Zaragoza, con los que compartimos la última parte de ascensión, llegaron antes que nosotros), hoy ni hace frío ni sopla el cierzo como en 2011, ni hay niebla como el año pasado, las vistas son fantásticas y tres macizos nevados destacan entre ellas, la Sierra de Guadarrama, los Picos de Urbión y sobre todo toda la cordillera pirenaica entre la que distinguimos cimas como el Bisaurín, Collarada, Midi d'Ossau o las Tres Sorores de Ordesa.

Justo cuando empezaban a llegar las primeras oleadas de montañeros iniciamos el descenso, lo hacemos por la pala más concurrida del Cucharón (40º), donde el buen estado de la nieve invita a bajarla a buen ritmo, parando de vez en cuando para contemplar la blanca belleza de este Circo el Cucharón y dibujando de nuevo la ruta empleada para subir, que desde la distancia parece incluso más inclinada.

Nuestro siguiente objetivo se centraba en llegar cuanto antes al santuario para tomarnos la obligatoria cerveza a precio de oro (¡¡¡3 euros por un tercio es un abuso!!!), de nuevo en el resbaladizo bosque nos topamos con las hordas de domingueros que subían venga el patinazo hasta el Cucharón, "como te pasas con ellos" diréis, pero es que lo de ese día fue de traca, os cuento, durante la subida hasta el santuario hay X aparcamientos con X plazas cada uno, pues bien, señores domingueros, a las 12 y media de la mañana no pretendáis subir con el coche hasta el último, joder, dejadlo un poco más abajo y andad un poco, que no cuesta nada, teníais que haber visto el embotellamiento que se formó allí arriba con la consiguiente nube de polvo...pero en fin quedémonos con lo positivo que fue una nueva y diferente ascensión a esta mágica montaña llamada Moncayo, ¡¡¡hasta la cuarta!!!.

Un saludo a tod@s.

Sábado, vistas de lujo desde el balcón de nuestro hotel en Añón, las Peñas de Herrera

Como las ofertas de ocio de la zona no eran muy atractivas nos fuimos a fotografiar el Moncayo desde distintos puntos, aquí desde una loma en Alcalá de Moncayo

Aquí desde el mismo punto pero de forma panorámica y con las Peñas de Herrera, pinchar sobre la imagen para visualizar en grande y en movimiento

Ya casi de noche con este árbol de figurante

El Moncayo y Alcalá de Moncayo, iluminado ya por las farolas

Y de nuevo en el hotel, fotografía nocturna del Moncayo bajo un manto de estrellas, aquí por suerte no saben de la contaminación lumínica

Domingo, amanece un día perfecto en el Moncayo, partimos desde el Santuario de la Virgen del Moncayo, el cual dejamos rápidamente atrás

La senda convertida en una pista de patinaje

Ante nosotros el Circo del Cucharón u Hoya de San Miguel

Nos dirigimos a él, visualizando ya los diferentes corredores

Delante de mi los tres zaragozanos con los que compartiremos parte de la ascensión

Primera y suaves rampas

Al final nos decantamos por el Corredor de los Gendarmes por la izquierda de los mismos

Mientras que los de Zaragoza se inclinan por el de más a la derecha

Ya en pleno corredor, con el gendarme pequeño, os presento también a mi guante, que se empeñó en aparecer en varias de las fotos

El gendarme pequeño...

...y su hermano mayor, en la zona de más inclinación

Entrando en una zona más abierta

Un vistazo a nuestra huella y a los gendarmes

Jesús, progresando hacia la pala noreste

De nuevo los imponentes gendarmes

Ya con menos inclinación salimos a la pala noreste del Moncayo...

...que nos regala estas fantásticas vistas del Circo del Cucharón

Juego de contrastes, el Moncayo, una blanca isla en las llanuras zaragozanas

Más contrastes, el blanco de la nieve y las diferentes tonalidades de los bosques de las faldas del Moncayo

Este año ha sido el que menos nieve hemos encontrado, pero en el que en mejores condiciones se encontraba

Nuestros compañeros aragoneses nos alcanzan

Nosotros paramos a hacernos unas fotos, el día y el entorno lo merecen

La foto de portada...

...y el "making of"

Los amigos de Zaragoza alcanzan la cima

Inmediatamente después lo hacemos nosotros, Moncayo o Pico de San Miguel 2315 m.

Una inoportuna lesión hizo que Luis, el tercer miembro del equipo, no pudiese venir, al menos algo de Euskadi estuvo en la cima, ¡¡¡esta va por ti, Luis, un abrazo!!!

La nieve congelada en el vértice del Moncayo, las cumbres nevadas que se ven en la distancia son los Picos de Urbión

La blanca silueta de los Pirineos

Empieza el festival de "selfies"

Nos vamos...

...aunque es imposible no resistirse a hacer una parada para contemplar las vistas

Cornisas en la zona del Cerro de San Juan

Amplísimo el Collado del Alto de las Piedras, como un desierto de nieve

La cornisa con más detalle

Aquí me tenéis iniciando el descenso, lo haremos por la pala normal de subida

Jesús me sigue, jo, dicho así parece un eslogan católico jajajaja

Un detalle de la inclinación del descenso, la cual incrementé al no coger recta la cámara...gato con guantes...al fondo los Pirineos

Yo veo a sí de pequeño a Jesús...

...y él me ve así de pequeño a mi

Ahora es él quien toma la delantera...

...y nos capturamos mutuamente

Espectacular imagen de las palas nevadas del Circo del Cucharón, los montañeros que bajan son dos de los zaragozanos con los que coincidimos en la cima

La inclinación del descenso va menguando poco a poco

Tiempo para hacernos una nueva "selfie", ¡¡¡disfrutando!!!

Los gendarmes y sus corredores, sí, por ahí hemos subido

Dos montañeros se aventuran por el de la derecha

Trazado del itinerario de ascenso

Panorámica con luces y sombras en el Cucharón, ¡¡¡hasta la próxima!!!

Y ya de camino al coche, una muestra de la riqueza botánica del Macizo del Moncayo, en la foto se pueden apreciar las distintas tonalidades de los diferentes tipos de bosque y el contraste que forman

Y ya cervezeados, cambiados y de regreso a casa, nueva sesión fotográfica al Moncayo, aquí con el inmenso bosque de abedules de sus faldas

Entre campos...

...flores...

...y almendros