Lunes 10 de agosto de 2014
Como muchos de vosotros bien sabréis a principios de agosto nos embarcamos en la aventura de realizar la travesía Monte Perdido Extrem, en su modalidad de Tour Ordesa, la cual fue nuestro estreno a lo grande en las travesías circulares pirenaicas, en esta, y durante cuatro días recorrimos los principales valles y circos que rodean al gigante de Ordesa, en las próximas cuatro entradas, incluyendo esta, os iré desgranando, etapa a etapa, lo que dio de sí esta fantástica experiencia cargada de impresionantes paisajes y momentos irrepetibles.
En esta primera entrega os voy a narrar la primera jornada, posiblemente la más dura, la que nos condujo desde el Refugio de Pineta hasta el Refuge des Espuguettes, uniendo el Valle de Pineta con los franceses Vallée d'Estaubé y Cirque de Gavarnie.
Como os he dicho esta iba a ser nuestra primera travesía circular por los Pirineos, y no habíamos elegido la más "light" precisamente, así que era normal que el domingo a mediodía, cuando partimos hacia Piris hubiese ciertos nervios, aunque la ilusión por enfrentarnos a este reto los sepultaban con creces.
Sobre las siete y media de la tarde llegábamos a Bielsa, y antes de dirigirnos al Refugio de Pineta no pasamos por la sede/tienda de Monte Perdido Extrem, donde Tomás y Borja nos dieron algunos consejos y nos mostraron sobre el mapa algunas alternativas con las que poder moldear a nuestro gusto el recorrido de la travesía.
Sobre la bocina para la cena llegábamos al Refugio de Pineta, llenazo y por lo tanto ambientazo durante la cena, lo que exigía una sobremesa, cortita, claro, que el día siguiente nos esperaba madrugón y una dura etapa.
Eran poco más de las siete de la mañana y ya estábamos desayunados y con las mochilas cargadas en la espalda y dispuestos a dar comienzo a esta aventura, por delante cuatro días de paisajes alucinantes, entre ellos el fantástico Circo de Pineta, el cual, atrayente como un imán se mostraba ya ante nuestros ojos.
Empezamos a caminar en dirección norte, siempre junto al Río Cinca, el cual cruzaremos al llegar al parador de turismo, enseguida nos introducimos en un precioso hayedo, por el que circularemos durante un buen rato, y que nos ocultará momentáneamente las vistas del circo, las cuales volveremos a recuperar al salir de este bosque de hayas.
Frente a nosotros quedaba ya la subida al Balcón de Pineta con sus numerosas y estruendosas cascadas y puntas rocosas, sí, al Balcón de Pineta, por que en un principio la idea era cruzar la frontera por el Puerto de la Lera o Puerto Nuevo de Pineta, pero al final decidimos darle unos metros extra de desnivel a la etapa y hacerlo por la Brecha de Tucarroya, y creo que valió la pena ya que el extra de dureza vino acompañado de otro de belleza y espectacularidad.
Esta espectacular subida no ofrece tregua alguna, y se ganan metros muy rápidamente, y a la que nos quisimos dar cuenta ya habíamos llegado al Balcón de Pineta, y se dice pronto, cascándonos casi 1400 metros de desnivel, aunque no tuvimos el premio de las vistas que se deben de disfrutar desde allí, puesto que la niebla lo cubría todo.
Sin embargo, un poco más arriba si que fuimos agraciados con la visión, tenebrosa, entre las nubes, del glaciar de la cara norte de Monte Perdido, y más claramente del circo glaciar de Marmorés, aunque la recompensa máxima fue poder estar ante el Ibón de Marmorés, el más grande de los tres ibones de Ordesa, aún con nieve y hielo flotando en sus aguas, las cuales tuvimos que semi-rodear para plantarnos ante la pedregosa canal de subida -durilla- a la Brecha, y por lo tanto al Refugio de Tucarroya, lo más duro de esta primera etapa ya nos lo habíamos ventilado.
A 2700 metros es todo un lujazo encontrar el Refugio de Tucarroya, a parte del lugar donde está enclavado, en plena brecha, una pasada, allí hay sitio para pernoctar una quincena de personas, un par de mesas o una chimenea, ¡¡¡con leña!!!, me parece una buena iniciativa por parte del CAF lo de pedir 6 euros por pernoctar allí, ya que ese dinero se destina para poder mantener este refugio y encontrarlo en las condiciones en las que lo encontramos nosotros.
A nosotros nos vino de perlas para comernos a cubierto los bocatas y descansar un poco antes de proseguir con la ruta, no sin antes dejar constancia de nuestro paso en el libro de firmas.
Ya en territorio francés nos esperaba ahora la canal de bajada de la brecha, allí encontramos la única dificultad digamos un poco seria del día, ya que nos topamos con un nevero bastante inclinado, y no llevábamos ni crampones ni piolet para bajar por él, por lo que siguiendo los consejos de Borja el día de antes lo salvamos destrepando con cuidado por las rocas de la izquierda, luego la canal se iba abriendo poco a poco, y la dificultad se redujo a descender, intentando no tirar muchas piedras, por una incómoda pedrera.
Con una corta subida ganábamos el collado que hay bajo la imponente Borne de Tuque Rouya, y nos dejaba ya con unas fantásticas vistas del Vallée d'Estaubé, a partir de este punto el terreno se volvía más cómodo de patear, y la abruptez rocosa de Ordesa daba paso a los Pirineos franceses más pastorales, las vacas y las ovejas iban a ser testigo de nuestro paso.
Teníamos que subir ahora a la Hourquette d'Alans, lo que suponía 250 metros más de desnivel, pero con lo que llevábamos ya en las piernas iban a ser una futesa, además descartamos seguir el track de la MPE, que subía de forma más directa, y hacerlo siguiendo las cómodas lazadas de la HRP, sobre todo pensando en los días venideros.
Alcanzamos la Hourquette d'Alans, y lo que veríamos desde este collado nos iba a tirar de espaldas, el Cirque y el Vallée de Gavarnie flotando en un mar de nubes, y unas magníficas panorámicas de cimas tan emblemáticas como el Taillón y los Gabietos, el Pimené y sobre todo el enorme Pique Longe, techo de los Pirineos franceses.
Pero no sé que nos alegró más, o ver las mencionadas vistas, o divisar, 400 metros más abajo el Refuge des Espuguettes, ahora ya podíamos decir que lo más duro de la etapa ya había pasado.
Por buen sendero y a buen ritmo nos encaminamos al refugio, al cual íbamos a bautizar como el "refugio fantasma", ya que aparecía y desaparecía constantemente de entre la niebla, y a medida que descendíamos iban apareciendo otras cumbres como el Casco, la Torre, los Picos de la Cascada y por supuesto la Brèche de Roland.
Tras 16 kilómetros, 1900 metros de desnivel positivo y casi 10 horas después de haber salido de Pineta llegábamos al bonito Refuge des Espuguettes, enclavado en un paraje idílico y con unas vistas superiores (en mi opinión el mejor refugio de toda la travesía), allí iniciaríamos la pauta que seguiríamos todos los días al llegar a los refus, es decir, quitarnos las botas, calzarnos las chanclas y birra(s) al canto y cháchara con los demás montañeros (fue todo un puntazo encontrar allí otro grupo de la Plana Baixa y que harían el mismo recorrido que nosotros).
Hasta hora de cenar, a las 7!!!, estábamos en Francia, estuvimos matando el tiempo haciendo estiramientos al solecito, o interactuando con los burros del refugio.
Tras la sabrosa cena, ligera sobremesa con infusiones y nos fuimos a dormir, a pierna suelta, el día siguiente nos esperaba la etapa más larga de la travesía.
Un saludo a tod@s.
Como muchos de vosotros bien sabréis a principios de agosto nos embarcamos en la aventura de realizar la travesía Monte Perdido Extrem, en su modalidad de Tour Ordesa, la cual fue nuestro estreno a lo grande en las travesías circulares pirenaicas, en esta, y durante cuatro días recorrimos los principales valles y circos que rodean al gigante de Ordesa, en las próximas cuatro entradas, incluyendo esta, os iré desgranando, etapa a etapa, lo que dio de sí esta fantástica experiencia cargada de impresionantes paisajes y momentos irrepetibles.
En esta primera entrega os voy a narrar la primera jornada, posiblemente la más dura, la que nos condujo desde el Refugio de Pineta hasta el Refuge des Espuguettes, uniendo el Valle de Pineta con los franceses Vallée d'Estaubé y Cirque de Gavarnie.
Como os he dicho esta iba a ser nuestra primera travesía circular por los Pirineos, y no habíamos elegido la más "light" precisamente, así que era normal que el domingo a mediodía, cuando partimos hacia Piris hubiese ciertos nervios, aunque la ilusión por enfrentarnos a este reto los sepultaban con creces.
Sobre las siete y media de la tarde llegábamos a Bielsa, y antes de dirigirnos al Refugio de Pineta no pasamos por la sede/tienda de Monte Perdido Extrem, donde Tomás y Borja nos dieron algunos consejos y nos mostraron sobre el mapa algunas alternativas con las que poder moldear a nuestro gusto el recorrido de la travesía.
Sobre la bocina para la cena llegábamos al Refugio de Pineta, llenazo y por lo tanto ambientazo durante la cena, lo que exigía una sobremesa, cortita, claro, que el día siguiente nos esperaba madrugón y una dura etapa.
"Selfie" en nuestra camareta del Refugio de Pineta, ¡¡¡ostia!!! si rima y todo jajaja |
Eran poco más de las siete de la mañana y ya estábamos desayunados y con las mochilas cargadas en la espalda y dispuestos a dar comienzo a esta aventura, por delante cuatro días de paisajes alucinantes, entre ellos el fantástico Circo de Pineta, el cual, atrayente como un imán se mostraba ya ante nuestros ojos.
Empezamos a caminar en dirección norte, siempre junto al Río Cinca, el cual cruzaremos al llegar al parador de turismo, enseguida nos introducimos en un precioso hayedo, por el que circularemos durante un buen rato, y que nos ocultará momentáneamente las vistas del circo, las cuales volveremos a recuperar al salir de este bosque de hayas.
Empezamos a caminar junto al Río Cinca, al cual abastecen las cascadas que se ven a lo lejos, en el impresionante Circo de Pineta, con las imponentes cimas del Pico de Pineta y el Garién |
El menda lerenda feliz cómo una perdiz cruzando uno de los puentes que cruzan el Río Cinca, tras de mi se aprecia uno de los abundantes hayedos previos a la ascensión al Balcón de Pineta |
Por este hayedo circularemos durante un buen instante, rodeados de buenos ejemplares de hayas |
En el hayedo encontramos también algunas rampas duras, que unidas a la humedad reinante en él nos hizo sudar de lo lindo |
Salimos del hayedo, vuelven a quedar al descubierto las cascadas |
Frente a nosotros quedaba ya la subida al Balcón de Pineta con sus numerosas y estruendosas cascadas y puntas rocosas, sí, al Balcón de Pineta, por que en un principio la idea era cruzar la frontera por el Puerto de la Lera o Puerto Nuevo de Pineta, pero al final decidimos darle unos metros extra de desnivel a la etapa y hacerlo por la Brecha de Tucarroya, y creo que valió la pena ya que el extra de dureza vino acompañado de otro de belleza y espectacularidad.
Esta espectacular subida no ofrece tregua alguna, y se ganan metros muy rápidamente, y a la que nos quisimos dar cuenta ya habíamos llegado al Balcón de Pineta, y se dice pronto, cascándonos casi 1400 metros de desnivel, aunque no tuvimos el premio de las vistas que se deben de disfrutar desde allí, puesto que la niebla lo cubría todo.
Las vistas del Circo de Pineta empiezan a ser impresionantes, prueba de agudeza visual, ¿cuantas cascadas de ven en la imagen? |
La triple Cascada del Cinca, sencillamente preciosa, la niebla se empieza a adueñar de las cotas más altas |
Un poco de todo, puntiagudos espolones, rocas, pastos, neveros... |
...otro salto de agua |
Mis tres compis en pleno esfuerzo, el valle y los hayedos ya han quedado muy abajo |
Sencillamente espectacular, un paisaje para disfrutar, imponente y atractiva la silueta del Pico de Pineta |
Oscuros e inaccesibles paredones nos flanquean por nuestra izquierda, con algún nevero que se resiste a desaparecer |
Hemos ganado ya mucha altura, la niebla empieza a privarnos de gozar de cualquier vista del Valle de Pineta |
Llegando al Balcón de Pineta, para ello solo tenemos que flanquear horizontalmente esta pared, por una repisa que existe un poco más arriba |
En busca de dicha repisa, cada vez la niebla se iba tornando más espesa |
Balcón de Pineta, obviamente la parada allí no fue muy larga, eso sí, no faltó la foto de rigor |
Sin embargo, un poco más arriba si que fuimos agraciados con la visión, tenebrosa, entre las nubes, del glaciar de la cara norte de Monte Perdido, y más claramente del circo glaciar de Marmorés, aunque la recompensa máxima fue poder estar ante el Ibón de Marmorés, el más grande de los tres ibones de Ordesa, aún con nieve y hielo flotando en sus aguas, las cuales tuvimos que semi-rodear para plantarnos ante la pedregosa canal de subida -durilla- a la Brecha, y por lo tanto al Refugio de Tucarroya, lo más duro de esta primera etapa ya nos lo habíamos ventilado.
Desde el Balcón de Pineta empezamos a caminar por el altiplano que forma el circo glaciar de Marmorés, donde tuvimos que ir sorteando grandes bloques que delatan la actividad glaciar de antaño |
Nuestro paso por este circo glaciar fue sin duda uno de los mejores momentos de la jornada, la Brecha de Tucarroya ya se intuye en la distancia |
El glaciar de la cara norte de Monte Perdido hace amagos de mostrarse entre la niebla enganchada en la montaña |
Una lástima que la niebla no nos dejase ver con más claridad el glaciar y la cima de Monte Perdido |
Bailando con Sarrios |
Imposible no detenerse a deleitarse con semejante paisaje, panorámica del circo glaciar de Marmorés |
Menudo premio, llegar a las inmediaciones del Ibón de Marmorés y encontrarlo semi-congelado, y sin niebla, pudiendo ver con claridad la Brecha de Tucarroya |
Para finalizar el rodeo había que cruzar horizontalmente este nevero, las chicas no lo veían muy claro, me subí a ver si existía una rimaya por donde pasar, y tomé esta bonita captura |
No existía rimaya alguna y al final hubo que pasar por el nevero, donde existía muy buena huella, eso sí, con cuidado, si no, al agua patos, y muy calentita no debía de estar |
Panorámica del Ibón de Marmorés |
Las chicas en la empinada cuesta que conduce a la canal de subida a la Brecha de Tucarroya |
Los primos en la canal de Tucarroya, de lejos subirla parecía empresa complicada, pero luego fue pan comido |
¡¡¡Fotazo!!!, no en vano la elegí para encabezar esta entrada |
A 2700 metros es todo un lujazo encontrar el Refugio de Tucarroya, a parte del lugar donde está enclavado, en plena brecha, una pasada, allí hay sitio para pernoctar una quincena de personas, un par de mesas o una chimenea, ¡¡¡con leña!!!, me parece una buena iniciativa por parte del CAF lo de pedir 6 euros por pernoctar allí, ya que ese dinero se destina para poder mantener este refugio y encontrarlo en las condiciones en las que lo encontramos nosotros.
A nosotros nos vino de perlas para comernos a cubierto los bocatas y descansar un poco antes de proseguir con la ruta, no sin antes dejar constancia de nuestro paso en el libro de firmas.
Refugio de Tucarroya, que gusto da encontrarse un refugio libre en esas condiciones, además llegamos allí cerca de la una del mediodía, nos vino ni que pintado para hacer la parada a comer |
Las chicas (las cuatro, Esther, muy beata ella jajajaja, insistió en que saliese la virgen) posando con el refugio, enclavado en un rincón espectacular |
Ya en territorio francés nos esperaba ahora la canal de bajada de la brecha, allí encontramos la única dificultad digamos un poco seria del día, ya que nos topamos con un nevero bastante inclinado, y no llevábamos ni crampones ni piolet para bajar por él, por lo que siguiendo los consejos de Borja el día de antes lo salvamos destrepando con cuidado por las rocas de la izquierda, luego la canal se iba abriendo poco a poco, y la dificultad se redujo a descender, intentando no tirar muchas piedras, por una incómoda pedrera.
Canal de acceso al refugio por la parte francesa, a nosotros ahora nos tocaba descenderla |
Como veis la canal es mucho más larga que la que sube desde el ibón, y las vistas tampoco desmerecen, el Borne de Tuque Rouya y el Vallée d'Estaubé con un mar de nubes |
Momento de acción de la ruta, destrepando con cuidado para evitar el nevero, iba con tres campeonas, no hubo problema alguno |
Una vez superado ese paso, a descender por la pedrera, intentando desprender el menor número posible de piedras, y sin perder la sonrisa |
El Borne de Tuque Rouya, incisivo, tras él, el Vallée d'Estaubé, un chico con quien coincidimos en distintos puntos de la ruta, alcanza el collado, tras el collado el puntiagudo Pimené |
Cruzando un nevero previo a la corta subida al mencionado collado |
Con una corta subida ganábamos el collado que hay bajo la imponente Borne de Tuque Rouya, y nos dejaba ya con unas fantásticas vistas del Vallée d'Estaubé, a partir de este punto el terreno se volvía más cómodo de patear, y la abruptez rocosa de Ordesa daba paso a los Pirineos franceses más pastorales, las vacas y las ovejas iban a ser testigo de nuestro paso.
Teníamos que subir ahora a la Hourquette d'Alans, lo que suponía 250 metros más de desnivel, pero con lo que llevábamos ya en las piernas iban a ser una futesa, además descartamos seguir el track de la MPE, que subía de forma más directa, y hacerlo siguiendo las cómodas lazadas de la HRP, sobre todo pensando en los días venideros.
Caminamos ahora por pleno Cirque d'Estaubé, tras nosotros el Puerto Nuevo de Pineta, por donde teníamos previsto cruzar la frontera en un principio |
Entramos de lleno en los Pirineos franceses más pastorales, vacas y ovejas campaban por allí a sus anchas |
De nuevo el mar de nubes que adornaba el Vallée d'Estaubé |
Nuestro siguiente objetivo alcanzar la Hourquette d'Alans, tras ella, el Cirque de Gavarnie |
Alcanzamos la Hourquette d'Alans, y lo que veríamos desde este collado nos iba a tirar de espaldas, el Cirque y el Vallée de Gavarnie flotando en un mar de nubes, y unas magníficas panorámicas de cimas tan emblemáticas como el Taillón y los Gabietos, el Pimené y sobre todo el enorme Pique Longe, techo de los Pirineos franceses.
Pero no sé que nos alegró más, o ver las mencionadas vistas, o divisar, 400 metros más abajo el Refuge des Espuguettes, ahora ya podíamos decir que lo más duro de la etapa ya había pasado.
Hourquette d'Alans, ahí lo tenemos, el Cirque de Gavarnie, que no quería ser menos que el Vallée d'Estaubé y también tenía su mar de nubes |
Y lo más importante, el Refuge des Espuguettes al alcance de la mano |
El Pique Longe, con permiso del Midi d'Ossau, amo y señor de los Pirineos franceses |
Panorámica con el Cirque de Gavarnie y su colchón de nubes, el Pique Longe y el Pimené |
Muy contentos de haber alcanzado este collado, a partir de ahora todo era cómodo descenso hasta nuestro objetivo |
Por buen sendero y a buen ritmo nos encaminamos al refugio, al cual íbamos a bautizar como el "refugio fantasma", ya que aparecía y desaparecía constantemente de entre la niebla, y a medida que descendíamos iban apareciendo otras cumbres como el Casco, la Torre, los Picos de la Cascada y por supuesto la Brèche de Roland.
Iniciamos el descenso hacia Espuguettes, con la imponente mirada del Pimené |
Mirad que ilustres se unen a las vistas... |
...Casco, Brecha, Punta Bazillac, Falsa Brecha, Dedo, Taillón, Gabietos... |
Solo por poder ver esto ya mereció la pena el palizón |
Realmente idílico |
Tras 16 kilómetros, 1900 metros de desnivel positivo y casi 10 horas después de haber salido de Pineta llegábamos al bonito Refuge des Espuguettes, enclavado en un paraje idílico y con unas vistas superiores (en mi opinión el mejor refugio de toda la travesía), allí iniciaríamos la pauta que seguiríamos todos los días al llegar a los refus, es decir, quitarnos las botas, calzarnos las chanclas y birra(s) al canto y cháchara con los demás montañeros (fue todo un puntazo encontrar allí otro grupo de la Plana Baixa y que harían el mismo recorrido que nosotros).
Hasta hora de cenar, a las 7!!!, estábamos en Francia, estuvimos matando el tiempo haciendo estiramientos al solecito, o interactuando con los burros del refugio.
Tras la sabrosa cena, ligera sobremesa con infusiones y nos fuimos a dormir, a pierna suelta, el día siguiente nos esperaba la etapa más larga de la travesía.
Un saludo a tod@s.
Por fin llegamos al Refuge des Espuguettes, cuando lo hicimos estaba cubierto por la niebla... |
...aunque de vez en cuando despejaba y gozábamos de estampas como esta desde la terraza del refugio... |
...o como esta cuando estábamos sentados relajándonos en la hierba |
Haciendo tiempo hasta la temprana hora de cenar, dando frutos secos a uno de los burros del refu |
Refuge des Espuguettes, bonito refugio y construido en un lugar privilegiado, quitando de que no tenía duchas, sin duda, y sin desmerecer a los demás, el mejor de toda la travesía |
El trato y el buen rollito de los guardas fue una de las cosas que más me gustó, sin olvidar la comida, que estaba deliciosa, como este arroz con pisto casero y longanizas... |
¿Y qué me decís del postre?, toda una delicatessen |
Preciosa excursión!!! Me la apunto para el año que viene, que buenísima la descripción y las fotos espectaculares, enhotabuena!!
ResponderEliminarGracias por el comentario Santi, la verdad es que iniciamos la travesía a lo grande.
EliminarUn saludo.
Espectacular Dani y equipo !!!!
ResponderEliminarEsperando próximas entregas de vuestra travesía pirenaica.
Nosotros nos quedamos a las puertas de esa zona. Esperaremos al año próximo para seguir nuestra HRP.
Un fuerte abrazo.
Gracias ti también Paco, buff, aún tengo que ver algunas entradas tuyas de la HRP, que solo he visto la última que publicaste.
EliminarYa verás como quedareis encantados con el Refuge des Epuguettes.
Un abrazo.
Hola Dani
ResponderEliminarCampeonesssssss!!!!!!! Vaya inicio de travesía, una ruta de las potentes, no se con cual de todas las fotos me quedaría, aún estoy por ver una ruta de los Pirineos que no me guste, pero esta, "jo macho", que pasada!!!
De momento para esta primera ruta de la travesía, enhorabuena a todo ese equipazo.
Un abrazo
Jose
TROTASENDES BENICALAP
Hola Jose!!!
EliminarYa ves, mira que esta primera etapa teníamos la opción de suavizarla ligeramente pasando por el Puerto Nuevo de Pineta, pero al final nos fuimos a la tralla, pero valió la pena, luego las demás etapas parecieron más "suaves" jajajaja.
Un abrazo.
Hola Dani.
ResponderEliminarQue voy a decirte! impresionante, todas las fotos son increíbles. Además esta el aliciente que fue la ruta que deberíamos haber hecho Maru y yo y esa mañana reculamos y no la hicimos. Viendo tus fotos me entran unas ganas terribles de volver al año que viene y hacer esta parte que no hicimos. El de los Espuguettes precioso.
Lo que me da a mi la sensación que la ruta nuestra era algo más dura y/o peor planificada. No entiendo por que en Alta Ruta de los Perdidos, después de dos días cañeros (Bujaruelo-Goriz y Goriz-Pineta) te meten una tercera que va por donde habéis ido vosotros pero solo pasa por los Espuguettes de pasada, ya que el final de esta tercera ruta estaba en el refugio de Les Granges de Holles, cerca de Gavarnie, estimando que la ruta se alargaría un mínimo de tres horas más. En fin, asín son las cosas.
Esperando ya las siguiente crónicas.
Un abrazo.
Hola Toni!!!
EliminarNo sé Toni, no he consultado la web de la Alta Ruta de los Perdidos, pero si que parece ser que es muy "heavy", ya ves, después de dos etapones, con el terrorífico descenso a Pineta, cascarte la subida al Balcón+Tucarroya+Hourquette d'Alans, y no acabar en Espuguettes, si no 500 metros más abajo.
Pero mira, yo creo, y tras leer los privados que me enviaste en FB, que hicisteis lo correcto en no seguir, por que al fin y al cabo, cuando se va a hacer una cosas de estas es para disfrutar, y lógicamente, por dureza con un toque de sufrimiento, pero cuando el sufrimiento supera al disfrute, sinceramente creo que no merece la pena, además que todo eso no se va a mover de allí, y seguro que volvéis, si no a completar la travesía, a hacer esta etapa, que vale mucho la pena.
Un abrazo.
Uauuuuuu!!!! Brutal, Dani, qué machada os pegásteis ... sólo pensar en la subida al balcón de Pineta me tiemblan las piernas. Desde luego anotada queda y esperando los próximos repors.
ResponderEliminar¡Bravo!
Me están temblando aún a mi jajaja, conociéndoos esta travesía os la ventiláis vosotros en dos días jajaja.
EliminarUn saludo.
Que voy a decir....Alta montaña de verdad, mítica, con poso, espectacular, tu crónica muy buena, muy detallada, y a mi me pasa igual, no sé que foto me gusta más.....bueno, en especial....el Ibón de Marmorés, un cañón!!. El Circo de Gavarnie, uffff, que momentazo!!. Enhorabuena chicas....os habeís marcado una de las mas duras....un trabajo de edición buenísimo....por cierto, el Pimené en invierno, es muy, pero que muy bonito....nevado.....lo tengo en mente, hace mucho tiempo. La he disfrutado muchísimo, Dani!!. Ansia viva, de ver y leer el resto de jornadas.
ResponderEliminarSalud!!
Hola Ana!!!
EliminarAl final de cada etapa les preguntaba a mis compis cual había sido el momento de la misma que más les había gustado, y en esta coincidimos casi al unisono en que habían sido el paso por el Ibón de Marmorés y ver el Circo de Gavarnie en un mar de nubes, que realmente fue un premio por haber realizado esta dura etapa.
El Pimené...yo también le eché el ojito hace tiempo...incluso antes de irnos a iniciar esta travesía y minetras la planificaba se me pasaba por la cabeza que si llegábamos pronto a Espuguettes quizás...pero ya tenía bastante de por sí la etapa, no le íbamos a añadir más jajaja.
Un saludo.
Hola Dani. Todo un puntazo. Menudas imágenes. Son todas fantásticas. Seguiremos leyendo la odisea.
ResponderEliminarPor cierto, muy, pero que muy tentador estaba el tomar el atajo por encima del hielo en el Ibón de Marmorés, jeje. Pero mejor asegurar. Una pasada. Ale, a escribir.
Un saludo,
Pablo
Hola Pablo.
EliminarGracias Pablo, con unos paisajes tan increíbles, y unas compañeras tan guapas, normal que las fotos hayan quedado tan bien, incluso en las que salgo yo!!! jajajaja.
Calla, calla, que últimamente están saliendo noticias de rescates en montaña, digamos, "peculiares", no fuera a ser que yo aumentara esa lista jajaja.
Un saludo.
Hola Dani!
ResponderEliminarImpresionante!
Vaya pedazo travesía que os habéis currado y vaya pedazo de etapa, tan dura como preciosa, llegáis a pillar un día sin niebla y si ya son increíbles así las vistas sin niebla han de ser impresionantes.
Yo no conicia la Monte Perdido Extrem y después de leer tu entrada ya la tengo apuntada para realizarla en algún momento.
Saludos!!!
Hola David!!!
EliminarLa verdad es esa, si algo le faltó a esta primera etapa, fue eso, que debido a la niebla no pudimos ver ni las vistas desde el Balcón de Pineta, ni la cara norte del Perdido con su glaciar, pero la niebla forma parte de esto, y también le da su toque, ¿no?, por lo demás esta etapa fue una apertura de travesía realmente espectacular.
Viendo la que os marcasteis Javi y tu, ¿qué tal una Montanejos Extrem?, no sería del todo descabellado jajajaj.
Un saludo.
Aupa Dani:
ResponderEliminarLas nieblas y nubes dan miedo cuando andas por ahí, pero las fotos siempre quedan mejor así.
A ver más.....
Un abrazo
Nubes y niebla, esa fue la tónica durante toda la travesía, menos un día, al menos nos aguantó sin llover (mientras caminábamos) los cuatro días.
EliminarEstoy en ello, estoy, la próxima ya la tengo casi acabada.
Un abrazo.
Hola Dani...¡¡Madre mía que primera etapa...magnifica!!...Las ''panos'' de Gavarnie,impresionantes..Bueno en realidad todas las fotos de la etapa,fantasticas...las de Marmorés,me traen gratos recuerdos.Un saludo y a esperar esa segunda etapa pirenaica...
ResponderEliminarHola Juane!!!
EliminarMadre mía!!!, eso mismo dijimos nosotros cuando sentados en el refu de Espuguettes, vimos y trazamos en el mapa el recorrido que habíamos hecho jejeje, sin duda, uno de lo mejores recorridos pirenaicos que he hecho hasta la fecha.
Este finde, la segunda entrega...
Un saludo.
Vaya Dani! La verdad es que es fantástica la Ruta que os pegasteis, y dura de cojones....Me encantan las imágenes publicadas....a la espera de más reportajes.
ResponderEliminarUn saludo y un fuerte abrazo.
Hola Jose!!!
EliminarSi que fue dura, pero como íbamos todo el rato caminando rodeados de parajes espectaculares no apreciamos en demasía la dureza, realmente nos dimos cuenta del tute que nos dimos cuando llegamos al refu y trazamos la ruta en el mapa.
Un abrazo.
Que envidiaaaaaaa dani jejeje. Menuda ruta y eso que solo es el principio de una larga travesía.
ResponderEliminarLastima que la niebla no os dejará ver en algunos momentos.
Felicidades por la entrada muy currada y por la aventura.
Hola Jose!!!
EliminarGracias, como le he comentado a algún compañero, una de las mejores rutas que he realizado en el Pirineo, si llega a estar despejado del todo, ya "pa cagarse" jajaja, pero la niebla forma parte de esto, hay que aceptarlo.
Un saludo.
¡Hola Dani! No sé que decirte ya. Está todo dicho. Las imágenes hablan por sí solas. Excelentes y espectaculares fotos de un mundo diferente y mágico donde el hombre queda en segundo plano. Etapa que por sí sola ya merece la enhorabuena. Imagina si únicamente es la primera etapa de una travesía. Una pasada. ¡Qué envidia!.
ResponderEliminarEnhorabuena, equipo.
Gracias Emilio!!!
EliminarY tanto que el hombre empequeñece ante tanta grandeza, si ya me parecía soberbio Ordesa, descubrir el Valle de Pineta y el circo glaciar de Marmorés, elevó al cubo esa sensación.
Ya te había comentado en alguna ocasión, creo que a raíz de cuando hicisteis Eth Setau Sageth, que tenía aún pendiente de realizar una travesía circular por Pirineos, y elegir esta de Monte Perdido fue todo un acierto, repetiremos, ya estamos pensando en la del próximo verano jejeje.
Un abrazo.
Hola Dani, Impresionante reportaje, como de costumbre. Es una zona del Pirineo especialmente brutal!!! A nosotros, esta travesía nos echó para atrás este verano, la canal Tucarroya estaba helada y era casi un suicidio bajar por allí, con tu reportaje y estas increíbles fotos me han recordado aquellos momentos que sin duda fueron positivos a pesar de darnos la vuelta.
ResponderEliminarSaludos
Hola Alex!!!
EliminarGracias, ya vi en face las fotos y el vídeo de conforme encontrasteis el ibón y la canal aquel día, ¡¡¡menuda experiencia!!!, y fue lo que en un principio nos hizo pensar como primera opción en el Puerto Nuevo de Pineta, aunque ya ves, que al final optamos, y por consejo de Tomás y Borja, hacerlo por Tucarroya, y ciertamente nos hubiésemos arrepentido en cierta manera, por que como tu dices el paisaje es brutal.
También he visto que no habéis parado quietos este verano, eso es bueno jejeje.
Un saludo.
La hemos hecho el año pasado, con menos nubes pero con mucho más nieve.
ResponderEliminarPueden mirarlo en http://porfragasepragas.blogspot.pt/2013/07/mpe1.html
Hola José Carlos!!!
EliminarPrimero que nada bienvenido al blog y gracias por dejar tu comentario en él, un placer para mi ver que mi blog se lee también en Portugal.
También me hecho seguidor del tuyo, espero descubrir en él las montañas de vuestro país.
Un saludo.
Hola Dani, ya que me dejaste el enlace de la entrada del tercer día, aprovecho para verlo completo. La verdad que para ser la primera etapa, es espectacular, solo la subida hasta el balcón de Pineta, ya merece la pena, la paliza, aunque sea una lastima no disfrutar de las vistas por culpa de la niebla. He disfrutado mucho de la crónica, y las fotografías, y me he alegrado del buen estado del refugio de Tucarroya, ojala todos estuviesen igual, ya que algunos da pena el estado en que se encuentran. Poco a poco ire viendo el resto de entregas, un saludo
ResponderEliminarHola Eduardo!!!
EliminarBienvenido al blog y gracias por comentar, mejor inicio no se le podía pedir a esta travesía, ¿verdad?, el refu de Tucarroya, además de estar en un enclave espectacular y de ser un campo base perfecto para afrontar algunas ascensiones, te puede sacar de un apuro en caso de mal tiempo, es un gustazo encontrarlo así, si alguna vez pernocto allí, no dudaré en dejar los seis euros que pedían para su mantenimiento, aún así dejamos algo de comida que además de quitarnos peso de la mochila jeje, seguro que le vino bien a alguien.
Un saludo.
Hola,
ResponderEliminarquería preguntarte que tal a nivel de señalización / orientación la ruta. Tiene dificultad?
saludos,
Hola César. La principal dificultad de esta ruta es física, ya que acumula bastante desnivel. Técnicamente solo reseñaría la bajada a la vertiente francesa de Tucarroya, canal descompuesta en la que suelen aguantar neveros hasta bien entrado el verano. Respecto a orientación es una ruta bastante evidente, sobre todo a la hora de llegar a los dos puntos claves, la Brecha de Tucarroya y la Hourquette d'Alans, y transcurre por senderos bastante transitados, especialmente el que sube al Balcón de Pineta, aunque ahora no sabría decirte si están balizados o no, no lo recuerdo. Te adjunto el track:
EliminarMPE Etapa 1
Un saludo.