23 de abril de 2023

Pico de Paderna (2627 m.)

 Jueves, 22 de septiembre de 2022

Tras pasar unos días en la Val d'Aran y subir al Tuc de Molières me moví a Benasque con la idea de hacer un par o tres actividades por allí. Podría haberme engorilado de nuevo y haber subido alguno de los numerosos 3000's del valle, pero no iba a ser el caso. Allí hay otras montañas más modestas, a las que le faltan un porrón de metros para alcanzar ese número mágico, tan obsesivo para algunos, y que además de resultar muy atractivas tienen una ascensión más asequible, y que se ajustan a la perfección para el paupérrimo y lamentable estado de forma con el que llegué a Benasque. Una de ellas es el Pico de Paderna, una montaña eclipsada por las Maladetas, y que siempre se me había quedado pendiente en todas mis visitas anteriores al Valle de Benasque. La ocasión la pintaban calva pues...



La verdad es que el día de descanso me vino muy bien, y aunque las molestias en el tobillo, y sobre todo en la rodilla, persistían, afronté la ascensión con mejores sensaciones, tanto físicas como mentales, y con más confianza, a ello influyeron varios factores, como el asequible desnivel de la ascensión (800 metros sin dificultades técnicas); el subir más ligero de equipaje; y también la filosofía con que la que me tomé la subida, la de ir disfrutando del paisaje, sin preocuparme tanto del tobillo y la rodilla, y llegar hasta donde llegase, fuese o no la cima.

La ascensión es preciosa, y es que todo ese entorno del Plan del Hospital, Plan de Están, Besurta, Aigualluts, Renclusa, Maladetas y la cabecera del Ésera es precioso, no voy a estas alturas a ponerme a cantar sus encantos, pues ya son de sobra conocidos por todo aquel con una mínima cultura pirenaica. Si que me gustaría destacar tres puntos concretos de la ascensión, y que me gustaron sobremanera. El primero fueron las pequeñas aguas tuertas que forma el Barranco del Alba un poco más abajo del Ibón de la Renclusa, y que son vigiladas por la imponente presencia del Pico de Paderna. Un poco más arriba también me impactó la lengua rocosa de la morrena del Glaciar de la Maladeta, y me estremecí al ver hasta donde bajaba siglos atrás este hoy agonizante glaciar. Y luego, casi llegando arriba fue un bombazo visual la súbita aparición de la Tuca Blanca de Paderna y la Tuqueta Blanca de Paderna (las hermanas mayores del Pico de Paderna, aunque la Tuca Blanca no forma parte de la popular leyenda de las Tres Hermanas), y su brutal geología. Las vistas desde la cima son espectaculares, y de Renclusa para arriba, y luego, de arriba a Renclusa, no me crucé con ni un alma (humana). Sin más dilación vamos con las fotos, en las que os describo un poco mejor el recorrido y os cuento alguna anécdota también.

La ruta se inicia en el parking de la Besurta, a donde llega un camino asfaltado que digamos, he conocido en mejores condiciones. No tardan, al ganar un poco de altitud, en aparecer algunos de los habituales figurantes pétreos de la zona...

...como la Tuca de Salvaguardia, con el Portillón de Benasque a su derecha...

...o el atrayente Mall Pintrat...

...con la cresta que desde del Puerto Viejo se extiende hacia el norte, en la que destacan los tres picos de Estauas...

...y que culmina hasta el Pico de Sacroux, al cual subimos en 2016.

No me olvido del gemelo del Salvaguardia, el Pico de la Mina, sobre el que vemos el helicóptero que estuvo toda la mañana subiendo suministros, de cara a la temporada invernal, al Refugio de la Renclusa.

Dejo el camino al Forau dels Aigualluts, uno de los más concurridos del Pirineo, para tomar otro que no le va a la zaga, el que sube a la Renclusa. Hoy al ser septiembre, entre semana, primeras horas de la mañana y lo desaconsejable que es subir en estas fechas al Aneto, casi cero tránsito en ambos. Potente presencia la del Pico de la Renclusa. Allá arriba del todo destaca el Pico de la Maladeta.

Llego a la Renclusa y veo que unos compañeros tienen algo de trasiego en el peirón del refugio, me acercaré a ver a que se debe tal trasiego...

...al final se debía a la presencia de este precioso ser de siete vidas, al que yo también le hice una buena sesión de fotos. No fue el único contacto felino de la mañana.

Pico y Refugio de la Renclusa, ya son unas cuantas veces las que he subido aquí, incluso una vez a dormir en el refugio, cuando subimos a la Maladeta.

Y sobre las Maladetas sobrevuela el helicóptero, con el que luego tuve una anécdota indirecta.

Tras una breve parada sigo con la ruta. No puedo evitar fijarme en la ermita de la Virgen de las Nieves, en cuyo interior nos tocó guarecernos de la lluvia y pernoctar en un primer intento frustrado intento a la Maladeta. Toda una experiencia religiosa dormir ahí dentro.

Dejo atrás la Renclusa y el ramal que sube al Aneto y tomo el que sube al Pico del Alba. A partir de ahora terreno inédito para mi.

El sendero sube paralelo al Barranco del Alba. Mi objetivo, el Pico de Paderna, me muestra sus credenciales.

De esas perspectivas en las que te preguntas: "¿En serio se puede subir ahí arriba andando?"...

...pues si, se puede y no es nada complicado, pero de momento recreémonos con el paisaje, que se mostraba bello como si solo.

Impresionante paisaje de picos, pedreras, cejas rocosas y pastos.

Sigo junto al barranco. Por cierto, el afilado picacho que se ve al fondo, y que nos os habrá pasado desapercibido en las anteriores fotografías es la Tuca Blanca de Paderna.

Mirada hacia las Maladetas...

...donde reina el Pico de la Maladeta, en cuya cima estuvimos en 2012.

Terreno duro y agreste por allá arriba, mucho más amable y bucólico este, con estas bonitas aguas tuertas que serpentean en el pastizal.

Las vemos desde un poco más arriba, en la corta subida la Ibón de la Renclusa.

Allí me senté a comer alguna cosa, y de inmediato apareció de la nada este amiguito, mendigando comida y cariño. Se llevó una buena dosis de ambas cosas. En la bajada se repitió la historia. Me lo hubiese llevado a casa 😍.

Ibón de la Renclusa. Durante la bajada, en la que había menos contraluz, le hice más fotos. Las veréis luego.

Tras el momento lacustre y gatuno sigo con el ascenso, que entra en terreno más pedregoso.

Abajo queda el pastizal de las aguas tuertas.

Toca atravesar ahora este caos de bloques. Superado este me espera la vaguada de enfrente, la cual hay que remontar entera.

Este caos de bloques no es más que el final de la lengua de la morrena glacial, que como veis baja desde casi extinto Glaciar de la Maladeta. Impresionante a la vez que estremecedor.

La vaguada es mucho más sencilla y cómoda de remontar de lo que aparentaba desde abajo. Además de permitirme ganar metros de forma bastante rápida...

...me mostró esta perspectiva menos fiera e inaccesible del Pico de Paderna.

Ya casi tengo remontada la vaguada, este pedrolo puede servirnos como punto de referencia orientativa en la ascensión, aunque hay numerosos hitos que hacen casi imposible la perdida.

Primeras vistas a larga distancia, mi amor platónico Maubèrme tuvo el honor de inaugurarlas, apareciendo tras la Tuca de Bargues.

Acabo ganando el cordal, en el que me esperan ahora una serie de subes y bajas, que me acercarán al Collado de Paderna, ya sin perder de vista la cima. Al Salvaguardia le salen unos competidores muy fuertes...

...la Tuca Blanca de Paderna y la Tuqueta Blanca de Paderna. Bárbaras las dos.

Tras frotarme los ojos repetidas veces seguí rumbo a la cima, siempre bajo la mirada del Salvaguardia...

...y las Maladetas.

Para llegar al Collado de Paderna tendré que realizar un corto descenso. Desde el collado todo tieso hasta la cima. ¿Veis como si que se podía subir andando?.

Hago una paradita en el collado (2504 m.), para recuperar el resuello de cara a la parte final del ascenso y para contemplar las vistas. Ibón de la Renclusa y montañas que ejercen de divisoria entre el Valle de Benasque y la Val d'Aran...

...escarpadas y bárbaras Tuca Blanca y Tuqueta Blanca de Paderna...


... y brutales y verticales Maladetas.

La subida final es tiesa pero no ofrece complicaciones.

Qué gustazo alcanzar una cima como esta y tenerla para uno solo. A disfrutar a tutiplén con las vistas. Salvaguardia (fue en 2010 mi primera cima pirenaica, lo volví a subir en 2011), Portillón de Benás y Pico de la Mina.

Menudo balcón hacia el Plan de Están.

Cuerda del Port dera Picada, con la Tuca de Bargues y la Tuqueta de Bargues. Al fondo aparecen algunos rascacielos de la Val d'Aran, como el Maubèrme, el Tuc de Barlonguera o el Mont Valier.

Seguimos mirando a ese cordal divisorio, en el que destacan la Tuca Blanca de Pomèro y el Malh dera Artiga, cimas que vigilan el Lac deth Còth deth Hòro, mal llamado Lago, o Ibón del Coll del Toro. También sería correcto llamarlo Ibón del Collado del Forau. Muchísimas más montañas aranesas y catalanas en el horizonte, entre ellas...

...el bicéfalo Malh des Pois o Forcanada, una montaña tremenda, tan tremendas como las ganas que tengo de subirla. Asoma sus dos cabezas tras el Pico de la Renclusa.

Pero las mejores vistas del Pico de Paderna son hacia las Maladetas Occidentales, ya que se divisan prácticamente todas. Os canto las principales, de izquierda a derecha: Pico de la Maladeta, Pico Cordier, Pico Sayó, Pico Mir, Diente del Alba...

...y Pico del Alba, centro derecha de la foto.

Pico de la Maladeta. Durante mucho tiempo se le consideró como el pico más alto de la cordillera pirenaica.

Volvamos a mirar hacia la Tuqueta Blanca de Paderna, ya que ahora en esa dirección se ve el macizo del Perdiguero al completo, desde el propio Pico Perdiguero, hasta el Sacroux, pasando por la Punta de Literola, el Pic Lézat, el Maupas, el Boum o el Mall Pintrat.

Un poco más de zoom hacia el Perdiguero.

Y muchísimo más zoom para conseguir esta brutal fotografía, con el Posets asomando entre los estratos verticales de la Tuqueta Blanca de Paderna.

Y finalizo el bloque de fotos de cima con una foto mía en lo alto del Pico de Paderna, 2627 metros.

Toca bajar, y lo hago invirtiendo el camino de subida, por lo que estas y las siguientes fotos quizás os suenen.



¿Os imagináis cuando la lengua de hielo del glaciar llegaría hasta aquí?.


Y ahora si, sin tanto contraluz, pude hacer las fotos que el Ibón de la Renclusa se merece.


Incluso me permití el lujo de sumar unos metros más de desnivel a la ruta para ver el lago desde un poco más arriba de su orilla.

Lo dije en el anterior reportaje, una ruta pirenaica sin su lago se queda coja siempre.

Recreémonos una vez más con este precioso paisaje a pies del Pico de Paderna.

Pasé de nuevo por la Renclusa, y como era buena hora decidí parar a comerme el bocata que llevaba en uno de los bancos del exterior y regarlo con un cervecita fría, pero cuando entré al refugio a comprarla no había nadie. Salí y estaban todos haciendo una cadena humana, entrando paquetes de refrescos y cervezas al interior. Cuando les dije que quería una cerveza me dijeron que por favor me esperase a que terminasen, así que ni corto ni perezoso me metí en la cadena, y allí estuve, entre risas y buen rollo, ayudándoles. Cuando terminamos y entré a por la cerveza no dejaron que la pagara. Muchas gracias amigos!!

Tras el feliz momento de la comida volví a bajar al llano. Compases finales de la ruta.

Subir al Pico de Paderna había sido una excelente elección.

El día siguiente tenía pensado hacer mi tercera ascensión al Salvaguardia, pero surgió un pequeño imprevisto que me limitó a poder hacer solo una corta actividad por la tarde, en la cual acabé empapado pues se lió a llover (os lo cuento en la próxima entrega). El sábado siguió lloviendo, por lo que decidí adelantar a ese día mi regreso a Betxí.

6 comentarios:

  1. Hola Dani.

    Será más modesta la jornada entre desnivel y altitud, pero los paisajes que muestras son de órdago. Maru y yo tenemos el chascarrillo de que yo siempre estoy en las rutas con el cuánto falta para el refugio de la Renclusa, jejeje tontás.

    El catálogo de figurantes puntiagudos es sencillamente fabuloso, pero me ha gustado mucho esas postales con los pastizales de aguas tuertas y la visión de donde están encajonadas, con el ibón y la antigua y extinta lengua glaciar más arriba. ¡Espectacular se queda corto!

    Ah, buenísima la anécdota de la cadena humana para aprovisionar el refugio. ¿Te imaginas una cadena humana para iros pasando botes de cerveza frios, abiertos claro, y dándole un tiento largo por cada vez?

    Un abrazo.

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    1. Hola Toni.

      Hombre, tu coña con la Renclusa es mítica, creo que no ha habido quedada MS/PDIPB en la que no haya salido a la palestra jajaja.
      No recuerdo si os había contado personalmente la anécdota de la cadena humana en la Renclusa, pero fue un momento bonito, y que conste que lo hice de forma totalmente altruista, pues yo insistí en pagar la cerveza, pero la chica se negó en redondo a que se la pagara. Eso si, mientras estuve en la cadena solo entramos Coca-colas, y uno de los chicos me dijo "estás ayudando a entrar Coca-colas, tendrás que tomarte una Coca-cola" jajaja.
      Si la cadena humana fuese como tu dices creo que yo iría colándome una y otra vez jajaja.
      Y la ruta, fue una pasada, y además influyó el factor de que de Renclusa para arriba todos los paisajes eran nuevos para mi, y qué paisajes. Como digo al final fue todo un acierto haber subido este Pico de Paderna.

      Un abrazo.

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  2. Hola Dani,

    El Pico de Paderna es espectacular, parece inexpugnable conforme vas ascendiendo, además el ascenso es precioso, pasando por unos rincones brutales, y luego las vistas sublimes, un rutón en toda regla.

    Aun recuerdo cuando lo subí hace unos cuantos años, una ascensión que no estaba prevista en el finde que hice el Aneto, creo que ya te lo he explicado en alguna ocasión, que lo subimos porqué nos dijeron que había corvertura... jajaja, y al final fue un acierto total.

    Que buena la cadena para cargar cerveza en el refu, si llega a estar un grupillo que yo me se no se si habría llegado alguna a su destino... jajaja

    Un abrazo.

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    1. Jeje, nos ponemos, en esa cadena humana, los del grupo del Moncayo, más Fernando y Arnau, y el helicóptero no da abasto a subir sacas de cerveza jajaja.

      Si que me has contado alguna vez lo del Pico de Paderna y la cobertura, resulta curioso que desde el refugio os mandaran allí arriba, supongo que ahora ya tendrán wi-fi...
      Pues no sé vosotros si tendríais cobertura allí arriba, pero yo nada de nada, eso si, encontré una conexión brutal con la naturaleza, con semejante entorno😉.

      Un abrazo.

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  3. Hola Dani.

    Bueno, se dice que el hombre es el único animal que tropieza dos veces en la misma piedra, pero, está vez, elegiste una ascensión más acorde con tu estado de forma.

    Muy bonita la subida y como suele suceder, con dos paisajes muy diferenciados, con esas verdes praderas atravesadas por riachuelos, que son una delicia, que más arriba, dan paso a un terreno más duro, aunque, veo que más o menos se camina bastante bien.

    Si bien desde el final de lo que antes era el glaciar, se ve una montaña inexpugnable, se intuye que la ascensión tiene que ser por la "puerta de atrás", accediendo por el collado.

    Aunque es un pico "fácil", oye, son 2627 metros, que, como no es un tres mil, a veces desmerecemos la altura y por lo que se ve en las fotografías, es uno de esas montañas-mirador, porque las vistas son extensas.

    Sino recuerdo mal, se podía trazar una circular bajando por la Coma de Paderna, pero, en este caso, te hubieras quedado sin la cerveza en el refugio de la Renclusa y esa cadena humana pasando Coca Colas. Y mira que insistir en pagar en Aragón, leches, si te dicen que no pagas, no pagas, parece mentira que no te acuerdes, que a cabezones no nos gana nadie 😀.

    Salud y montaña.

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    1. Hola Eduardo.

      Bueno, el episodio del refugio al menos me sirvió para comprobar que, aunque muy cabezón que me considere yo, jamás de los jamases podré alcanzar el nivel de cabezonería de un aragonés, me quedó muy claro jajajaja.

      Y el subir al Pico de Paderna me sirvió, aunque eso ya lo sabía, que no hay que ser demasiado pretencioso y exigente con la elección de las ascensiones para disfrutar de una excelente mañana de montaña y de unos extraordinarios paisajes. Y es que se tiende a menospreciar (no es mi caso, y veo que el tuyo tampoco) a estas cimas de más "modesta" altura (no sé que tiene de modesto medir 2600 metros) y que están al lado de cimas más altas y con más renombre, y muchas veces estas cimas de menos altura, con un recorrido más sencillo, y sin tener que cascarse un desnivel de aúpa nos brindan unos paisajes que a veces, por obcecarnos con la altitud, el desnivel y el renombre, nos los perdemos.

      Un saludo.

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