Domingo 21 de diciembre de 2014
Hola amigos, tras los dos pertinentes resúmenes del 2014 comenzamos la actividad rutera del blog en este recién estrenado año y lo hacemos con lo que fue la penúltima ruta que hicimos en 2014, en ella nos fuimos hasta Bejís en la comarca castellonense del Alto Palancia, donde realizamos una bonita ruta en la que a parte de subir a la cima de uno de los emblemas comarcales, Peña Escabia, vistamos el Estrecho del Cascajar, en el que nace el Río Palancia, y caminamos un buen tramo junto a las aguas del Barranco Resinero.
Nuestro recorrido de hoy arranca junto a la aldea del Molinar, para llegar allí desde Bejís seguiremos las indicaciones que señalan el camino a la embotelladora de agua, desde ella seguiremos unos varios centenares una pista de tierra en dirección norte hasta que llegaremos frente a el Molinar, bajo la presencia de las interesantes Peñas de Amador, allí estacionaremos el vehículo y empezaremos a caminar.
Ya a pie seguimos pista arriba, entre pinares y bajo la umbría que le otorgaba Peña Escabia a su vertiente norte lo cual no hacía más que acrecentar la baja sensación térmica, "useasé" el frío de cojones que hacía esa mañana, enseguida llegamos a una casa forestal abandonada, justo enfrente nace el sendero que sube de forma más directa a la cima, pero nosotros queremos ir primero al Estrecho del Cascajar, por lo que seguiremos por la pista durante un buen tramo, utilizaremos el sendero más tarde para bajar.
La pista se da de bruces con el Barranco Resinero, que para nuestra sorpresa baja con agua, lo cruzamos por un improvisado puente de piedras e inmediatamente después encontramos las indicaciones y el sendero que llevan hacia el Estrecho del Cascajar, este sendero, realmente precioso, transcurre prácticamente todo el rato por dentro del seco lecho del aquí recién nacido Palancia, y se encamina hacia un pequeño circo rocoso, solo quebrantado por el estrecho.
¿Habéis visto la peli El Señor de los Anillos: el Retorno del Rey, cuando Aragorn, Gimli y Legolas se adentran por un estrecho en el Sendero de los Muertos para llamar a filas al ejercito de los muertos y los caballos salen despavoridos de allí?, pues a mi, llamadme friki, en cierta manera la entrada al Estrecho el Cascajar me recordó a eso, y de hecho, ni Senda ni Laia se atrevieron a entrar, por lo que Eva y yo tuvimos que turnarnos para recorrerlo.
El estrecho tendrá unos 150 metros de longitud, y la verdad es que el angosto recorrido por sus grisáceas paredes resulta precioso, en ellas podemos observar varias y pequeñas surgencias que suponemos darán origen al Palancia, por que lo que es el nacimiento en sí no lo vimos, lo que si que es seguro que en ese punto, en el Estrecho del Cascajar, la Rambla Seca, que nace kilómetros más arriba, a 1600 metros de altura en la Sierra de el Toro, se convierte en el Río Palancia, que desde aquí y durante 85 kilómetros va creándose un caudal, recogiendo agua de varios barrancos (entre ellos del Resinero) antes de desembocar en las playas de Sagunt.
Una vez visitado el estrecho volvemos sobre nuestros pasos hasta donde habíamos tenido el primer contacto con el Barranco Resinero, desde allí retomaremos la pista en el mismo sentido que llevábamos antes de abandonarla, y que empezará a picar hacia arriba de forma considerable, avanzaremos por ella hasta que esta muere, nuevamente cuando vuelve a tropezar con el Barranco Resinero, a partir de ese momento empezaremos a seguir un senderillo aguas arriba, por el que tan pronto bordeábamos el barranco por su izquierda orográfica como lo hacíamos por su derecha.
Si el tramo del estrecho fue precioso, este del barranco no lo fue menos, disfrutamos mucho caminado junto a su cauce, siempre acompañados por el ronroneo del agua, que mediante diminutas cascaditas formaba bonitas pozas de agua cristalina.
Encontramos un hito que nos señala un sendero que seguiremos a partir de ahora y nos hará salir del cauce del barranco, este sendero, conocido como la Senda de los Tajos, con tramos muy empinados, nos enlazará con una nueva pista, la cual simplemente tendremos que cruzar para seguir por la senda, que continua con fuerte pendiente y discurre brevemente por un cortafuegos antes de pasar por una zona de jóvenes tejos y hacernos ganar el enorme altiplano que conforma el macizo de Peña Escabia, donde por fin, y después de haber ido toda la ruta por umbrías, nos iba a dar de lleno el sol de mediodía, cosa que se agradeció.
Obviaremos el Cerro de la Cruz, que es el punto más alto de este macizo y nos iremos directamente en busca del vértice de Peña Escabia, el cual alcanzaremos instantes después, allí no hay mucha sensación de estar en un pico, pero las vistas son muy buenas y amplias desde allí, veremos pueblos como el Toro, Torás, Bejís, o Caudiel, cimas como Peña Juliana, Santa Bárbara o Penyagolosa, y las sierras de la Calderona y Espadà en su práctica totalidad, incluso podíamos distinguir en la lejanía algunas sierras alicantinas como el Montgó, Bèrnia, Benicadell y Mariola.
De nuevo en marcha tras haber comido tranquilamente al solecito descenderemos unos metros para afrontar la subida (la típica subida toca-pelotas de después de las comidas no puede faltar en ninguna ruta) a la que es la punta más septentrional de Peña Escabia, unos metros más baja que el vértice, este tramo de transición entre cima y cima me recordó bastante a paisajes de Javalambre, en dicha cima las vistas son calcadas a las que pudimos disfrutar desde el vértice, pero aquí si que teníamos sensación de estar en un pico, y las panorámicas hacia las Peñas de Amador, y el Molinar, lugar donde habíamos empezado la ruta, y que veíamos perfectamente, eran bastante vertiginosas.
Como os digo el punto donde habíamos iniciado la ruta quedaba, perfectamente visible, 500 metros más abajo, pero a un escaso kilómetro en línea recta, así que como os podéis imaginar el descenso fue rápido, rápido y muy bonito también, sobre todo en su primer tramo, que discurría por unas deliciosas pinadas donde el sendero dibujaba innumerables lazadas, anda!!!, si me ha rimado y todo, si es que estoy hecho un artista jeje... luego, y para dar un plus a esa belleza, cuando ya perdimos algo de cota la mayoría de los pinos estaban engalanados con el muérdago, y es que se ve que las últimas lluvias han sido propicias para que salga en abundancia.
Así, y con este bonito, y también navideño, panorama, a la que nos quisimos dar cuenta llegábamos de nuevo frente a la destartalada casa forestal, ya solo nos restaba regresar a donde teníamos el coche, y tras dejar las mochilas, hacer una rápida visita a la bonita aldea del Molinar, lo que ponía el punto y final a esta productiva jornada de senderismo en el Alto Palancia.
Un saludo a tod@s.
Hola amigos, tras los dos pertinentes resúmenes del 2014 comenzamos la actividad rutera del blog en este recién estrenado año y lo hacemos con lo que fue la penúltima ruta que hicimos en 2014, en ella nos fuimos hasta Bejís en la comarca castellonense del Alto Palancia, donde realizamos una bonita ruta en la que a parte de subir a la cima de uno de los emblemas comarcales, Peña Escabia, vistamos el Estrecho del Cascajar, en el que nace el Río Palancia, y caminamos un buen tramo junto a las aguas del Barranco Resinero.
Nuestro recorrido de hoy arranca junto a la aldea del Molinar, para llegar allí desde Bejís seguiremos las indicaciones que señalan el camino a la embotelladora de agua, desde ella seguiremos unos varios centenares una pista de tierra en dirección norte hasta que llegaremos frente a el Molinar, bajo la presencia de las interesantes Peñas de Amador, allí estacionaremos el vehículo y empezaremos a caminar.
Ya a pie seguimos pista arriba, entre pinares y bajo la umbría que le otorgaba Peña Escabia a su vertiente norte lo cual no hacía más que acrecentar la baja sensación térmica, "useasé" el frío de cojones que hacía esa mañana, enseguida llegamos a una casa forestal abandonada, justo enfrente nace el sendero que sube de forma más directa a la cima, pero nosotros queremos ir primero al Estrecho del Cascajar, por lo que seguiremos por la pista durante un buen tramo, utilizaremos el sendero más tarde para bajar.
Punto de inicio, bajo las Peñas de Amador, en la Aldea del Molinar, esta edificación nos recordó a las posadas que habían en las ciudades de la edad media, alejadas del núcleo de población... |
...así veíamos la aldea del Molinar desde ella |
Un vistazo al sector más septentrional de las Peñas de Amador |
La pista por la que circularemos al principio transcurre en todo momento por la umbría de la vertiente norte de Peña Escabia |
La pista se da de bruces con el Barranco Resinero, que para nuestra sorpresa baja con agua, lo cruzamos por un improvisado puente de piedras e inmediatamente después encontramos las indicaciones y el sendero que llevan hacia el Estrecho del Cascajar, este sendero, realmente precioso, transcurre prácticamente todo el rato por dentro del seco lecho del aquí recién nacido Palancia, y se encamina hacia un pequeño circo rocoso, solo quebrantado por el estrecho.
¿Habéis visto la peli El Señor de los Anillos: el Retorno del Rey, cuando Aragorn, Gimli y Legolas se adentran por un estrecho en el Sendero de los Muertos para llamar a filas al ejercito de los muertos y los caballos salen despavoridos de allí?, pues a mi, llamadme friki, en cierta manera la entrada al Estrecho el Cascajar me recordó a eso, y de hecho, ni Senda ni Laia se atrevieron a entrar, por lo que Eva y yo tuvimos que turnarnos para recorrerlo.
El estrecho tendrá unos 150 metros de longitud, y la verdad es que el angosto recorrido por sus grisáceas paredes resulta precioso, en ellas podemos observar varias y pequeñas surgencias que suponemos darán origen al Palancia, por que lo que es el nacimiento en sí no lo vimos, lo que si que es seguro que en ese punto, en el Estrecho del Cascajar, la Rambla Seca, que nace kilómetros más arriba, a 1600 metros de altura en la Sierra de el Toro, se convierte en el Río Palancia, que desde aquí y durante 85 kilómetros va creándose un caudal, recogiendo agua de varios barrancos (entre ellos del Resinero) antes de desembocar en las playas de Sagunt.
Tenemos el primer contacto con el Barranco Resinero, nos sorprende gratamente verlo bajar con agua, nada más cruzarlo encontraremos el sendero al Estrecho del Cascajar |
Por dicho sendero encontramos este chopo con las raíces al aire |
Nos topamos con este pequeño circo rocoso, un poco más adelante encontraremos el estrecho |
Primeros metros del Estrecho del Cascajar, estrecho de veras |
Nos pareció incluso estar en el mismísimo Barranc de l'Infern |
A partir de este punto tanto Laia como Senda se negaron a pasar, incluso retrocedieron, tuvimos que hacer turnos, uno entrar en el estrecho y el otro quedarse con ellas |
Cuando entre yo tomé unas cuantas fotos, ahí van algunas de ellas, en sitios como este, sobran los comentarios: |
La luz de sol tan apenas puede penetrar en este estrecho de blancas paredes |
Una vez visitado el estrecho volvemos sobre nuestros pasos hasta donde habíamos tenido el primer contacto con el Barranco Resinero, desde allí retomaremos la pista en el mismo sentido que llevábamos antes de abandonarla, y que empezará a picar hacia arriba de forma considerable, avanzaremos por ella hasta que esta muere, nuevamente cuando vuelve a tropezar con el Barranco Resinero, a partir de ese momento empezaremos a seguir un senderillo aguas arriba, por el que tan pronto bordeábamos el barranco por su izquierda orográfica como lo hacíamos por su derecha.
Si el tramo del estrecho fue precioso, este del barranco no lo fue menos, disfrutamos mucho caminado junto a su cauce, siempre acompañados por el ronroneo del agua, que mediante diminutas cascaditas formaba bonitas pozas de agua cristalina.
De nuevo por la pista, empezamos a ganar altura, y vemos así el circo donde está situado el Estrecho del Cascajar |
También tenemos esta bonita perspectiva de la Peña Elvira |
Que fuéramos todo el rato por pista no significaba que el caminar fuese monótono, todo lo contrario, muy bonito paisaje |
En este punto muere la pista, nos disponemos a adentrarnos en el Barranco Resinero |
Esta bonita estampa nos recibe nada más entrar en él, un difuso sendero con marcas azules será ahora nuestro guía |
Numerosos saltos de agua, pozas y exuberante vegetación nos ofrecían estampas tan bonitas como esta |
Era obligado recrearse, un poco de zoom a este bonito rinconcito |
Remontando el barranco aguas arriba pasamos junto a sinfín de pozas como esta... |
...o esta, con su cascada en miniatura |
Si en verano bajara agua por aquí sería un buen sitio para hacer una ruta con posibilidad de chapuzón... |
...aunque hay a quien no le importó el frío que hacía y no dudó en darse un bañito |
La verdad es que no esperábamos encontrar con agua este barranco, y como ya os he dicho fue una agradable sorpresa |
Encontramos un hito que nos señala un sendero que seguiremos a partir de ahora y nos hará salir del cauce del barranco, este sendero, conocido como la Senda de los Tajos, con tramos muy empinados, nos enlazará con una nueva pista, la cual simplemente tendremos que cruzar para seguir por la senda, que continua con fuerte pendiente y discurre brevemente por un cortafuegos antes de pasar por una zona de jóvenes tejos y hacernos ganar el enorme altiplano que conforma el macizo de Peña Escabia, donde por fin, y después de haber ido toda la ruta por umbrías, nos iba a dar de lleno el sol de mediodía, cosa que se agradeció.
Obviaremos el Cerro de la Cruz, que es el punto más alto de este macizo y nos iremos directamente en busca del vértice de Peña Escabia, el cual alcanzaremos instantes después, allí no hay mucha sensación de estar en un pico, pero las vistas son muy buenas y amplias desde allí, veremos pueblos como el Toro, Torás, Bejís, o Caudiel, cimas como Peña Juliana, Santa Bárbara o Penyagolosa, y las sierras de la Calderona y Espadà en su práctica totalidad, incluso podíamos distinguir en la lejanía algunas sierras alicantinas como el Montgó, Bèrnia, Benicadell y Mariola.
Ya os había comentado que la mañana era fría, ¿verdad? |
Dejamos el sendero del barranco y tomamos este otro, ya con una pendiente considerable |
Cortafuegos por el que andaremos brevemente, en frente las peñas de la Loma de la Muela |
Por el cortafuegos, la fuerte inclinación del sendero no mengua |
Durante este tramo de subida pasamos por esta zona donde vimos un nutrido grupo de jóvenes tejos |
...la cual vemos aquí con un poquito más de zoom |
Vértice de Peña Escabia (1331 m.), dispongámonos a disfrutar de las vistas... |
...en primera estancia, en el llano, la población de el Toro, más en la distancia se levanta la Sierra de Gúdar... |
...de nuevo Peña Juliana, y tras ella, las cumbres más altas de la Sierra de el Toro |
...la Serra d'Espadà en su totalidad, y algunas poblaciones como Bejís, Teresa, Torás o Caudiel... |
...y dos emblemáticas cimas como el Santa Bárbara y Penyagolosa, y unos cuantos parques eólicos en las llanuras |
De nuevo en marcha tras haber comido tranquilamente al solecito descenderemos unos metros para afrontar la subida (la típica subida toca-pelotas de después de las comidas no puede faltar en ninguna ruta) a la que es la punta más septentrional de Peña Escabia, unos metros más baja que el vértice, este tramo de transición entre cima y cima me recordó bastante a paisajes de Javalambre, en dicha cima las vistas son calcadas a las que pudimos disfrutar desde el vértice, pero aquí si que teníamos sensación de estar en un pico, y las panorámicas hacia las Peñas de Amador, y el Molinar, lugar donde habíamos empezado la ruta, y que veíamos perfectamente, eran bastante vertiginosas.
Descendiendo hacia el collado que separa las dos cimas, me vienen reminiscencias de la Sierra de Javalambre |
Cima norte de Peña Escabia (1318 m.) |
Al igual que desde el vértice, grandes vistas desde aquí, con el añadido de las Peñas de Amador, las cuales no habíamos visto completamente desde el vértice |
Disfrutando de los amplios horizontes que nos ofrecía esta atalaya, una mirada hacia la Serra Calderona y más allá |
Desde allí arriba vemos así la aldea del Molinar, y un atractivo gendarme junto al que pasaremos durante el descenso |
La silueta del Peña Escabia proyectada hacia el este |
Como os digo el punto donde habíamos iniciado la ruta quedaba, perfectamente visible, 500 metros más abajo, pero a un escaso kilómetro en línea recta, así que como os podéis imaginar el descenso fue rápido, rápido y muy bonito también, sobre todo en su primer tramo, que discurría por unas deliciosas pinadas donde el sendero dibujaba innumerables lazadas, anda!!!, si me ha rimado y todo, si es que estoy hecho un artista jeje... luego, y para dar un plus a esa belleza, cuando ya perdimos algo de cota la mayoría de los pinos estaban engalanados con el muérdago, y es que se ve que las últimas lluvias han sido propicias para que salga en abundancia.
Así, y con este bonito, y también navideño, panorama, a la que nos quisimos dar cuenta llegábamos de nuevo frente a la destartalada casa forestal, ya solo nos restaba regresar a donde teníamos el coche, y tras dejar las mochilas, hacer una rápida visita a la bonita aldea del Molinar, lo que ponía el punto y final a esta productiva jornada de senderismo en el Alto Palancia.
Un saludo a tod@s.
Toca bajar, lo volvemos a hacer por la sombra, pero hacerlo por estos pinares tan limpios es toda una gozada |
Nos gustó mucho este tramo del descenso, la próxima vez que volvamos a Peña Escabia subiremos por aquí |
Durante todo recorrido vimos varias docenas de esta especie de vómito o excremento animal, ¿alguien me podría decir de que animal procede?, y si son vómitos, ¿qué se los produce? |
Un nuevo vistazo a las Peñas de Amador |
Un pequeño tramo de pista forestal, pasaremos junto al gendarme que veíamos antes desde la cima... |
...merecedor de ser visto con un poco más de detalle |
Solo una pequeña muestra de la cantidad de pinos que vimos con muérdago (viscum album) |
Nos detenemos a ver la casa forestal abandonada, buenas vistas desde allí también |
El Molinar, y por lo tanto el final de la ruta, cada vez más cerca |
La aldea esta adornada con bastantes detalles rurales, como por ejemplo este carro |
Y ya de regreso hacemos una parada a fotografiar, con los últimos rayos de sol, las Peñas de Amador y la Masada del Puente... |
...y como no, Peña Escabia |
- Longitud del recorrido: 13,77 kilómetros.
- Desnivel positivo acumulado: 800 metros.
- Desnivel negativo acumulado: 800 metros.
- Cota mínima: 839 metros.
- Cota máxima: 1331 metros.
- Duración: 6 horas y 23 minutos en total.
Aunque la cima, no sea nada del otro mundo, la ruta tiene tramos bien majos, como el barranco Resinero y el Estrecho del Cascajar, que tiene toda la pinta que si ha llovido en días anteriores, alguna marmita este con agua ... Como siempre que haces una entrada, nos ofreces otra, y ese Barranc de l'Infern, tiene una pinta estupenda. Un saludo
ResponderEliminarSi, muchas veces la cima sirve solo como complemento de una ruta, y esta, emblemática en la zona y que tiene muy buenas vistas, fue el caso, puesto que tanto el estrecho como el barranco la eclipsaron bastante.
EliminarEl Barranc de l'Infern hay que verlo in situ para poder contemplar de verdad su grandeza.
Un saludo.
Hola Dani
ResponderEliminarTen paciencia que veo que ya estás pensando en los chapuzones de verano jajaja todo llegará!!!
Precioso el estrecho del Cascajar y estrecho de verdad jajaja
En la aldea del Molinar he estado dos o tres veces y es muy bonita y típica y es cierto que en este tiempo no suele haber nadie, en verano ya es otra cosa, hace años pegadas a la aldea a 20 o 30 mts. habían unas pozas que te podías tirar desde arriba, eran alucinantes, hoy en día debido a la sequia, de eso ya no queda nada. Que pena...
Un abrazo
Jose
TROTASENDES BENICALAP
Hola Jose.
EliminarSi, ya me estuve informando al llegar a casa y vi que tanto en el Molinar como en el camping hay zonas con cascaditas y saltos y tal, a ver si vuelve a pegar una buena llovida y vamos allí este verano un día en plan pepito piscinas jajaja.
Un abrazo.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarHola Dani.
ResponderEliminarMuy buena ruta,me gusto mucho cuando la hicimos a finales de 2012 y de hecho,estaba pensando en volver este año,pero entrando al estrecho del Cascajar,por detrás y así no hacer ida y vuelta,se alarga un poco la ruta,pero bueno..
Jajajaja...muy bueno lo de El Señor de los Anillos,la verdad es que es ''muy'' Estrecho...jejjee...El barranco del Resinero,le da un aire de bosque de cuento a la ruta...Me llamo la atención lo de las dos cimas,con buenísimas vistas....
Saludos.
Hola Juane.
EliminarPues mira, no sabía que al Estrecho del Cascajar se podía entrar por la parte de detrás, bueno saberlo para próximas rutas por esta zona tan bonita.
Un saludo.
Hola Dani.
ResponderEliminarPreciosa ruta, y lo mejor de todo que me la conozco en gran parte. Hace unos cuatro años, la hicimos con los chicos. Dejamos el coche el la planta embotelladora y fuimos por el molinar hasta el nacimiento del Palancia y recorrimos el bello Estrecho del Cascajar. Recuerdo que era un día lluvioso y medio nublado, el Palancia nacía caudaloso justo a la entrada del Estrecho pero fuera de él. Nosotros lo vadeamos aquello y recorrimos bastante tramo del Estrecho del Cascajar. Recuerdo de cuando llevábamos un rato, y llegamos a una parte del Estrecho que se abría, aquello estaba nevado. Nos encantó la ruta. No me acordaba de esta ruta, a ver si no tardo mucho en colgarla en el blog y ves las fotos de aquello con mucha lluvia.
Es raro que el Barranco tuviera agua y el Palancia no! Ah!! este barranco con su arroyo con agua me ha recordado mucho a los de la Serranía.
Con tantas referencias a Tolkien, al final vas a tener que hacer una ruta a Mordor y toparte con Sauron ;-)
Un abrazo.
Oye la foto con esa mancha verde viscosa son vomitos, generalmente de zorro, aunque tb pueden ser de garduña o animal parecido. El motivo suele ser que ingieren algo toxico para ellos. Por ejemplo, dices que por ahí hay muérdago, pues esos vomitos pueden ser perfectamente de haber ingerido las bolitas blancas del muérdago.
ResponderEliminarVaya sorpresa Toni, tenías muy callado esto de que ya habías estado en el Estrecho del Cascajar, será posible que un tío de Cuenca lo haya visto antes que yo???, imperdonable por mi parte jajaja, ostia tío, pues publica esas fotos debió ser un puntazo salir del estrecho y encontrar todo aquello nevado.
EliminarY si que es chocante de verdad, que el Palancia bajara seco, y el Resinero, ya ves, radiante de agua...y de magia.
Gracias por la aclaración de los vómitos, los había visto antes, pero en tanta cantidad, nunca, por eso me chocó y lo puse en la crónica, y ahora que lo dices, si que parecen las bolitas del muérdago, entonces, ¿lo harán como un tipo de purga?.
Con Sauron aún no, pero con algún que otro orco si que me he topado en alguna ruta, jejeje...
Un abrazo.
¡Hola Dani! Ruta sin desperdicio y lo digo con conocimiento de causa. Realizamos prácticamente el mismo recorrido en diciembre de 2012. El Resinero también llevaba agua. Precioso barranco y vistas imponentes desde Peñascabia. Bonita ruta, ¡sí señor!.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola Emilio.
EliminarVaya!, parece que todos habíais hecho esta ruta menos yo jajaja, es toda una gozada encontrarte rinconcitos como los que encuentras en este recorrido, sobre todo, el Resinero con agua, que quizás fue lo que más me gustó.
Un abrazo.
Hola Dani lo que me extraña es que no hubieses hecho aún esta ruta, es preciosa y muy completa.
ResponderEliminarComo dice Toni el nacimiento esta antes del estrecho yo de tres veces solo lo he visto con agua una vez.
Sin embargo no es tan raro que baje agua del barranco del resinero, yo siempre lo he visto con agua.
Los Tejos son un puntazo y la cumbre y sus pinadas una pasada, me recuerdan un poco a las pinadas de Peñagolosa.
Fue una suerte que se librara del incendio de Andilla, estuvo cerca.
Saludos
Hola Jose.
EliminarNo suelo hacerme un calendario con las rutas que voy a hacer en el año, las voy improvisando sobre la marcha, pero esta de Peña Escabia si que es verdad que quería hacerla en 2014...y un poco más y no la hacemos jajaja.
Mucha y muy bonita variedad la de este recorrido, nos gustó mucho.
Un saludo.
Muy buena ruta...los Estrechos están chulisimos, y desde Peña Escabia, muy buenas vistas.. curiosa la reacción de Senda&Laia...algo hay....jejejeje... me he refrescado la memoria, aunque lo tengo muy difuso...la subida a Escabia...una crónica muy bien documentada, Dani. Esos restos de bayas deben ser vomitonas de algún zorrillo....nada despreciable su desnivel y muy fotogénicas las pocetas. Saludos!!
ResponderEliminarHola Ana.
EliminarSi, lo de las vomitonas ya me dijo Toni, que podían ser de zorro, lo que digo, o les deben sentar mal esas bolitas o lo hacen como purga.
No sé que les parecería a Laia y a Senda ese estrecho, pero ya te digo, ni se arrimaron, y eso que Laia es bastante "echá palante", cosas que nosotros no sentimos y ellas sí?, seguro!!!.
Un saludo.