6 de agosto de 2017

Peña Oroel (1770 m.)

Jueves 20 de julio de 2017


Desde que en 2015, volviendo de ascender la Collarada parásemos en Jaca a comer en la Casa de la Montaña, siempre que hemos ido a los Pirineos más occidentales, o bien a la ida o bien a la vuelta siempre nos hemos detenido en la capital de la Jacetania a comer en este restaurante. Ambiente distendido, exposición cambiante de fotografías y pintura, museo y biblioteca de montaña y buena comida, con multitud de opciones vegetarianas y veganas hacen que nos encontremos siempre muy a gusto en este sitio, y por eso hemos venido ya unas cuantas veces desde aquel primer día. Esta vez volvíamos del Valle de Tena, no nos viene de paso Jaca, pero solo es cuestión de desviarse en Sabiñánigo no llega a 20 kilómetros, además, ya lo habíamos hecho en una anterior ocasión. Pero hoy le propuse a Eva levantarnos un poco antes de lo previsto, para así llegar más pronto a Jaca y que antes de comer nos diese tiempo de ascender Peña Oroel. Le pareció perfecto el plan, y así, de esta manera casi improvisada subimos a la cima de esta emblemática montaña, una de las imprescindibles, que siempre habíamos mirado con deseo en todas nuestras visitas a Jaca, al final ese deseo se cumplió y esta es la crónica de esa subida.






La Peña Oroel se levanta altiva y aislada casi 1000 metros sobre el llano de Jaca, cosa que la hace fácilmente reconocible desde mucha distancia y puntos, eso también la convierte en una de las cincuenta montañas más prominentes de la Península. Como comento es una montaña visible desde muchos puntos, pero es su vertical cara norte, la que podemos ver desde cualquier punto de Jaca, la más famosa y fotografiada de esta montaña. Su situación la convierte en un estupendo mirador de la práctica totalidad del Pirineo Aragonés. Como montaña emblemática que es, es propicia a que se cuenten muchas leyendas sobre ella, como bestias míticas que vivían en la cumbre, defendiendo tesoros ocultos bajo tierra. Junto al Monasterio de San Juan de la Peña forma parte del Paisaje protegido de San Juan de la Peña y Monte Oroel.


La Peña Oroel desde la Ciudadela de Jaca, en una soleada jornada de finales de julio de 2015.


A parte de tener que ir a comer a la Casa de la Montaña no olvidemos que también teníamos que volver a Betxí, así que no nos calentamos mucho la cabeza a la hora de elegir la vía de ascensión y nos decantamos por la clásica, la que parte del Parador de Oroel, subiendo y bajando por el mismo sitio. Por delante casi 600 metros de desnivel a salvar en casi 4 kilómetros. La mayor parte de este desnivel lo salvaremos por el interior de un poblado y excelso bosque, por un marcado sendero que dibujará innumerables lazadas en él. Andaremos entre boj, pinos, abetos, hayas, acebos, serbales o arces, y también entre diminutas flores y fresas y frambuesas silvestres de las que podremos ir comiendo durante la subida.


Parador de Oroel, empezando la ruta desde aquí restaremos 400 metros a la prominencia de Peña Oroel.

En frente mismo del parador arranca el ancho sendero que lleva hasta lo más alto de la Peña.

De inmediato el sendero se introduce en un frondoso bosque de multitud de variedades arbóreas.

Enseguida nos damos cuenta de porqué este es un paraje a proteger.

Altos pinos se entremezclan entre marañas de boj.

Estos nos empequeñecen.

Otra seña de identidad de esta subida clásica a Oroel son sus numerosísimas lazadas, esta es una de las primeras.

El boj aguantó bien en sus hojas la lluvia de la noche anterior, Laia aprovechó tal circunstancia para ir refrescándose.

Los abetos y la hayas irán apareciendo conforme ganaremos altura.

Y mientras tanto más y más lazadas.

Y así es la primera parte de la subida a Oroel, una sucesión de deliciosos tramos de sendero.


Sin transición ninguna el bosque termina y salimos al kilométrico cordal de Peña Oroel, donde la vegetación se reduce a erizones, boj y algún pino disperso. Seguiremos la cuerda en dirección O, siempre guiados por la enorme cruz cimera, que nos hará de faro. Nos salen dos senderos, uno se ciñe a lo más alto del lomo cimero y el otro pierde un poco de cota para ganarla de nuevo y unirse luego al primero, que más adelante se mantendrá alejado de los impresionantes precipicios de la vertiente norte de Oroel, que crea un brutal contraste con las laderas de la cara sur, aunque nosotros no podremos evitar ir saliéndonos de vez en cuando del ancho sendero para asomarnos a estos vacíos septentrionales de Oroel.


El bosque termina de forma brusca en este collado, estamos en el largo cordal de la Peña Oroel.

Enseguida vemos nuestro punto de destino y el sendero que conduce a él, no hay perdida posible.

Enganchamos el sendero que transcurre en lo más alto de la cuerda, en la ida utilizaríamos el que va más abajo. Una pena que se nos empiece a encapotar el día.

Al menos la cima está despejada, cuando veníamos por la carretera llevaba la "txapela" puesta.

Aprovechemos pues para posar con ella detrás, no se la vuelva a poner.

Aquí ya podemos apreciar la longitud de la cuerda de Peña Oroel, de un extremo a otro hay casi 4 kilómetros.

Veamos ahora el contraste de las dos caras de esta montaña, esta es la vertiente sur; laderas, erizón, algún pino solitario...

...y esta es la norte, verticalidad, precipicios, repisas...

...espectaculares paredes de conglomerado, en las que se aferran osados abetos.

No podremos evitar asomarnos, con precaución a estos cortados.

Por esta vertical vertiente de Oroel hay una vía de ascensión, la Vía Mayencos.

La cima nos espera...

...vamos a por la última y cómoda rampa.

Impresionados con el espectáculo que nos estaba ofreciendo esta montaña.

Formemos pues parte de ese espectáculo, aunque sea de forma efímera.

Un último esfuerzo.


Así llegaremos a la cruz que domina la cumbre de Peña Oroel, bastante concurrida pese a ser jueves. Aunque no elegimos el mejor jueves para subir, al menos climatológicamente hablando. Constantes intervalos nubosos pasaban sobre nuestras cabezas, quedando enganchados en la cadena pirenaica, de la que apenas pudimos intuir nada, y es que desde esta cima podemos dominar desde los picos más occidentales del Pirineo hasta las Maladetas, calculad si caben sierras y montañas entre un punto y otro, una pena no haber podido disfrutar de ese espectáculo. Un poco más nítidas si que fueron las vistas hacia el sur y pudimos distinguir algunos enclaves como la Sierra de Guara, Peña Gratal, Puchilibo, Peña Rueba o el Cuculo y San Juan de la Peña. También tuvimos el privilegio de ver la ciudad de Jaca a vista de buitre. Con todo esto, y pese a no poder disfrutar del 100% de las vistas, muy satisfechos de haber parado en Jaca y haber ascendido la gran Peña Oroel.

Un saludo a tod@s.


Laia como siempre, será la primera en llegar a la cima.

En Peña Oroel, 1770 metros, hay que hacerse dos fotos de cima, una en la cruz, que lleva ahí desde 1902, levantada por el cuerpo de forestales.

Y la otra en el vértice geodésico.

Un poquito de relax...

Los cuatro kilómetros de cuerda de Peña Oroel.

Vemos Jaca, dos construcciones destacan, el Palacio de Hielo y la Ciudadela.

Si antes veíamos Peña Oroel desde la Ciudadela ahora es a la inversa.

San Juan de la Peña y el Cuculo.

Lo poco del Pirineo que pudimos ver desde la cumbre. Zona del Aspe.

Punta más occidental de Peña Oroel, vayamos para allá.

Así se ve la cima desde allí.

Grandiosa Oroel.
Toca bajar, pues nos vamos a comer a Jaca.
Unos suben, otros bajamos.

Posando con el bonito colorido.



No nos importó en absoluto repetir el tramo del bosque.

Peña Oroel desde el Parador.

Hace un momentillo estábamos por ahí arriba.

El Pirineo seguía cubierto al bajar. Al menos aquí vemos la Forca de Cavichirizas y la Corona del Mallo en la Sierra de la Partacua.

Peña Oroel desde Jaca, antes de emprender el camino de regreso a Betxí. Durante la subida y la bajada por el bosque hice algunas macros. Despedimos el reportaje con un puñado de ellas.

Mostajo o serbal blanco (Sorbus aria).

Esta no sé como se llama, si alguien lo sabe y me lo dice se lo agradecería.

Dos pequeños insectos alimentándose de un hongo.

Fresa silvestre (Fragaria vesca).

Frambuesa (Rubus idaeus).

Campanilla silvestre (Companula persicifolia).

Hoja "tuneada", seguramente por un caracol.

Entre tantas variedades de Russula, me es difícil atinar de cual se trata esta..


17 comentarios:

  1. Hola Dani.

    He subido unas cuantas veces a la Peña Oroel, y siempre salgo encantado, porque a pesar de ser un recorrido corto, la subida por el bosque es una delicia, con esa variedad de árboles, y flores, que por cierto la que te falta por nombrar es la prunella vulgaris, muy común en esa zona.

    Justo al salir del bosque, a la izquierda en el collado, hay un par de neveras restauradas, que están muy bien, y en ese punto se puede continuar por el cordal para bajar por la senda de los lobos, que para mi es la mejor opción, y sale una circular redonda.

    Lo único malo que tiene esta cima, es que vayas el día que vayas, y más en verano, siempre te encuentras mucha gente, además se puede subir desde Jaca sin tener que coger el coche, eso si, es un mirador de 360º, porque además de las que nombras, también se pueden ver los Mallos de Riglos.

    Para otra ocasión te recomiendo, la zona del Cuculo y San Salvador, igual o más interesante, aunque los recorridos son algo más largos.

    Salud y montaña!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Eduardo.

      Nos gustó mucho esta clásica subida a Oroel. Seguro que volveremos por la zona a probar alguna de las recomendaciones que nos haces, y a ver si en la próxima tenemos suerte con el cielo y podemos disfrutar más de esas excelentes panorámicas ;-)

      Un saludo!!

      Eliminar
  2. Hola Dani
    Vosotros no perdéis el tiempo, aprovecháis hasta el ultimo minuto jajaja
    Que comemos en Jaca, primero hay que ganarselo, hay que subir sea donde sea...Bueno pues eso, tiene pinta de ser facilita y para aprovechar la mañana está muy bien.

    Un abrazo
    Jose
    TROTASENDES BENICALAP

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Jose.

      Aprovechando al máximo y exprimiendo cada minuto jajaja.

      Aprovecho tanto que no he tenido tiempo todavía de leer vuestra primera crónica de la vuelta al Posets, a ver si me pongo esta noche.

      Un abrazo.

      Eliminar
  3. ¡Hola Dani! Pues una subida muy interesante con excelentes vistas aunque no las pudierais disfrutar del todo por culpa de las nubes. Buena opción para ocupar la mañana antes de regresar a casa.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Emilio.

      Oroel acompaña al peregrino entre Jaca y Puente la Reina de Jaca, no pasa desapercibida. Si alguna vez estás en la capital de la Jacetania...no lo dudes!!

      Un abrazo.

      Eliminar
  4. Desde luego Dani,que pasar cerca de una montaña como la Peña Oroel,es delito...jajaja.
    Bueno,aunque os tuvierais que desviar un poquito,la verdad es que bien merece esa ascensión esa Peña,aun siendo prácticamente lineal,la subida por esa frondosa senda y el caminar por ese cordal,mas la cima por supuesto,la hacen atractiva de verdad.
    Por cierto,también por Jaca anduvo una Empinada...jejeje,nuestra amiga Mabel,haciendo el camino,entre Jaca y Arres,aunque unas fechas antes...
    Bien aprovechado ese viaje de ''relax'' al Valle de Tena...jajaja

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ...Huy,me he dado cuenta que en la primera frase me ha faltado,después de Peña Oroel,lo de ...''y no subir''...jajaja,pues eso.

      Eliminar
    2. Pues no me como letras yo...jajaja. Como le digo a Emilio, si alguna vez paráis en Jaca y tenéis tres horas, no dudéis en subiros a Oroel!!!
      Empinados por el mundo jajaja.

      Un abrazo.

      Eliminar
  5. Dani, me apetece mucho esta montaña, tiene muy buena pinta. Ya sabes que he estado una sola vez en Pirineos y es complicado poder hacerlo todo. Lo único que sé es que iba en mi agenda como una de las opciones a hacer, de hecho atravesé lamentablemente en coche parte de su ladera cuando venía de regreso de San Juan de la Peña a Jaca.
    Una vez vista tu cronica mas ganas tengo de subir.
    Saludos, nos vemos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Cierto que te pillan lejos los Pirineos Salvador, pero vi que aprovechaste muy bien en tu primera visita e hiciste un montón de rutas. Seguro que en la próxima visita vuelves igual o más de cargado. Como ya te he comentado en la entrada de los Ibones de Anayet, la zona del Valle de Tena, y los Pirineos más occidentales son una buena opción para volver a Andalucía con el zurrón bien cargado de bonitas rutas y montañas.

      Un abrazo.

      Eliminar
    2. Vamos a ver si es verdad... Tambien tengo en por delante las 50 cimas provinciales que te restan mucho tiempo, pero es que todo no se puede tener. Si todo sale bien para Sep-Oct, me escapo a Trevinca, Picos, Peña Prieta, nos se si Pais Vasco y algo de Pirineos... a ver si estoy ambicionando mucho, jeje, en una de estas mi mujer me deja.
      A ver que puedo arañar y traerme para abajo. Saludos.

      Eliminar
    3. A aprovechar bien aprovechada esa escapada norteña de final de verano/principio de otoño Salvador!!!, estaremos atentos a tu blog!!

      Un abrazo.

      Eliminar
  6. Hola Dani!!!

    Vaya ritmo estáis cogiendo este verano, si es que no paráis.
    Impresionante esta Peña Oroel, me ha recordado mucho a la Serra del Cadí, con una vertiente Norte vertical y una Sur con praderas.
    La subida por ese frondoso bosque es espectacular.
    Lo que te comenté el otro día, una entrada más y otra más qe apunto en mi lista, a este paso la lista nunca se va a acabar... jajaja

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola David.

      Mira quien habla de ritmo, el que como siga así se va a ventilar los Pirineos en cuatro días jajaja.
      A ver si saco un poco de tiempo y me pongo con tus crónicas, en concreto con la del Cadí (si que guarda cierta similitud esta Peña Oroel con el Cadí) y ese trío de colosos pirenaicos que os marcasteis en pocos días.

      Un abrazo máquina!!

      Eliminar
  7. Hola Dani.

    Me encantan estas montañas como aisladas y rodeadas de llano para poder otear al fondo las grandes montañas. En cierto modo, me recuerda a la Peña Montañesa de Aínsa (no por la forma de la montaña que no se yo si se parecerá mucho, pero si en que está a los pies de una pequeña ciudad y un excelso mirador para ver las grandes mountains pirenaicas) El mirador saliendo del valle del Roncal para ir hacia Lumbier tampoco estaba mal, eh)
    Es cierto que el bosque del principio impresiona, y es tan tupido que hasta el haya no lo llega a colonizar a tenor de las fotos.

    Un abrazo, y tengo ganas de ver la Doble A (que no doble V como el whisky)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Toni.

      Pues si, esta Peña Oroel pertenece a ese grupo de montañas, todas atractivas, tipo Moncayo, Peña Montañesa, la Sagra etc., que al estar aisladas de otras montañas parece que son más altas de los que son, y que debido a ese aislamiento siempre suelen tener grandes vistas. Si que fue un puntazo ese mirador pirenaico del Puerto de las Coronas, creo que se llamaba así. Fue una suerte que la carretera a partir de Burgui estuviese cortada y tomásemos esta variante.

      Ya me he puesto con la crónica del Acherito, voy por la parte de las Foyas del Ingeniero, y la criba de fotos ya está hecha, va a ser un reportaje cargadito de imágenes jejeje.

      Un abrazo y a ver si nos vemos en octubre!!!

      Eliminar