Sábado 5 de octubre de 2019
En la comarca de els Ports, y cerca de Morella, se encuentra Forcall, población rodeada por cuatro muelas, la de Sant Cristòfol al SO, la de la Vila al N, la d'en Camaràs al NE y la de Garumba al SE. Hace unos años vinimos a Forcall a realizar una bonita excursión por esta última. Hoy volvíamos para realizar un exhaustivo recorrido por las otras tres y descubrir todos sus recovecos ancestrales, religiosos y naturales, y empaparnos en ellas de la magia de esta comarca del norte castellonense.
La Mola, o Lloma, de Sant Cristòfol.
Salimos de Forcall rumbo sur y por la carretera a Cinctorres, pasando junto a la Ermita de Sant Josep. No tarda en aparecer, a nuestra derecha, el sendero, PR-CV-117, por el que empezaremos la subida a la Mola de Sant Cristòfol. El terreno en este primer tramo de ascenso es árido, carente de vegetación, y en él destaca el trabajo de piedra en seco.
Nos plantamos al punto que da acceso a lo alto de la muela, es el primero de los "pujadors", que es como se les conoce por aquí a estos pasos ancestrales, por los que subiremos y bajaremos hoy, y que supondrán uno de los puntos fuertes de la excursión. Este en especial es espectacular, primero por unos escalones tallados en la roca y luego por que el sendero se aprovecha de unas grietas pasillo en la caliza para ganar la parte alta de la muela. Antes de seguir por la loma nos asomaremos al Peiró/Piló de Sant Pere, un estupendo mirador hacia Forcall y la triple confluencia de valles que forman, el Cantavella, el Calders y el Bergantes, único río valenciano que pertenece a la cuenca del Ebro.
Ya por la loma, el sendero discurre sobre una cornisa rocosa antes de introducirse en un tupido bosque de pequeñas carrascas. Así llegamos hasta el extremo más meridional de la muela, en las que se encuentra la ermita de Sant Cristòfol de Saranyana. El panorama visual es de primer orden, abarcándose la práctica totalidad de la comarca, así como bastante territorio del Maestrazgo turolense.
Dejamos que el PR se vaya hacia la Todolella. Nosotros continuamos ahora rumbo norte por un largo tramo de insulso carril, pasando por el punto más alto de la muela, coronado por un vértice geodésico, punto culminante, 1108 metros, de la ruta de hoy y que sin embargo no nos ofreció vista ninguna. La cosa mejora al introducirse el camino en un pequeño robledal, y al encontrar el paso de bajada de la muela, en el que combinaron el trabajo en la piedra con aderezos de madera. Un tramo por un limpio carrascal precede a un tramo de pista, por el que llegaremos a las ruinas del Mas de Roc. Desde allí un precioso sendero paralelo al Barranc del Mas de Roc y sus laderas aterrazadas nos irá bajando hasta su cauce, por el que llegaremos a la carretera a la Todolella.
La Mola de la Vila.
Cruzamos la carretera por un paso subterráneo, y empezamos a seguir el asfaltado del Molí de Matalí, que cruza el Riu Cantavella. No tarda en aparecer el sendero que sube hasta la Mola de la Vila, balizado PR-CV-322 y conocido como el Camí de la Dula. Se conoce como dula a un terreno común donde pastaban los rebaños de los vecinos de un pueblo. El sendero discurre muy bien trazado entre azagadores y campos de cultivo, y alcanza la pista que sube a la cima, que solo seguimos unos metros, ya que pronto nos sale a la derecha un nuevo sendero, más boscoso, que nos deposita en una nueva repisa rocosa, por la que alcanzaremos el rinconazo de la Cova de la Carn. De ahí una ruda y pedregosa subida nos hará alcanzar la pista, por la que llegaremos a lo más alto de la Mola de la Vila, coronada por un vértice geodésico autonómico y un nuevo peiró/piló, en este caso levantado en honor a Sant Marc. También hay unas antiestéticas antenas, que para nada empañan unas sensacionales vistas, las mejores hacia Forcall de todo el día y hacia los valles de los tres ríos antes mencionados.
La ruta continúa por el PR, que se va en busca del punto por el que mejor salvar los roquedos orientales de esta Mola de Vila. Encontrado el paso el sendero baja serpenteando hacia la ribera del Bergantes, el cual tendríamos que vadear para continuar con la ruta. Por suerte no era mucha caudal el que llevaba y lo pudimos hacer sin necesidad de descalzarnos. Tras el vadeo vino una fuerte subida y estábamos en la carretera a Ortells, dispuestos a encaramarnos a las laderas de la Mola d'en Camaràs.
La Mola d'en Camaràs y els Gegants.
No andaremos mucho trozo por la carretera, ya que inmediatamente sale el ramal que sube al Mas de la Grellera, tampoco pisaremos mucho este camino ya que de él ramifica un sendero por el que nos iremos aproximando a las paredes calizas de la Mola d'en Camaràs que nos descubren en su base un fantástico y fresco carrascal, salpicado de grandes bloques calizos desgajados de la pared, en el que no dudamos en hacer una relajada parada a comer.
La reanudación de la ruta nos reservaba una bonita sorpresa, un paso por el interior de un estrecho formado por la erosión, con bloque empotrado y un árbol saliendo bajo él. A esta bonita sección le iba a seguir un duro y áspero sendero tallado en la roca, que nos haría ganar la parte alta de las paredes calizas que reinaban sobre el carrascal.
Como todo su yin tiene su yan, a este precioso tramo de la ruta le iba preceder uno muy insulso, con largo tramo de carril y otro de sendero confuso que nos haría alcanzar el punto más alto de la Mola d'en Camaràs, que al igual que el de la Mola de Sant Cristòfol tampoco aportó demasiado a la ruta.
Por suerte no tardaríamos en recuperar la alegría, ya que encontramos el sendero que se dirige hacia el Pujador dels Gegants, que nosotros hoy utilizaríamos en bajada. Este sendero ancestral empieza a serpentear ladera abajo en busca del Bergantes, a cuyo valle nos asoma una sección del sendero. El panorama no puede ser más espectacular, por un lado la altiva e imponente Penya Alta y por el otro els Gegants, un conjunto de torres calizas, en el que destaca un espectacular gendarme independizado del resto.
Tras este punto tan álgido continuamos el descenso, con enormes robles y carrascas de por medio, hacia el Bergantes, aunque antes de llegar a él tendremos que cruzar nuevamente la carretera. Acabamos llegando al río, y junto al Molí dels Frares lo vadeamos de nuevo. Ya en la otra vertiente enganchamos con el Sender Fluvial, del cual andaremos un cacho hasta llegar de nuevo a la carretera. Esta vez ya no nos quedó más remedio que andar por ella hasta llegar a Forcall, donde hicimos un callejeo que puso el broche a esta completa, interesante, panorámica, y a tramos espectacular, ruta, que se hubiese quedado coja sin las dos cervezas que me tomé en una terraza de la plaza mayor de Forcall.
Un saludo a tod@s, sed felices!!.
En la comarca de els Ports, y cerca de Morella, se encuentra Forcall, población rodeada por cuatro muelas, la de Sant Cristòfol al SO, la de la Vila al N, la d'en Camaràs al NE y la de Garumba al SE. Hace unos años vinimos a Forcall a realizar una bonita excursión por esta última. Hoy volvíamos para realizar un exhaustivo recorrido por las otras tres y descubrir todos sus recovecos ancestrales, religiosos y naturales, y empaparnos en ellas de la magia de esta comarca del norte castellonense.
La Mola, o Lloma, de Sant Cristòfol.
Salimos de Forcall rumbo sur y por la carretera a Cinctorres, pasando junto a la Ermita de Sant Josep. No tarda en aparecer, a nuestra derecha, el sendero, PR-CV-117, por el que empezaremos la subida a la Mola de Sant Cristòfol. El terreno en este primer tramo de ascenso es árido, carente de vegetación, y en él destaca el trabajo de piedra en seco.
Nos plantamos al punto que da acceso a lo alto de la muela, es el primero de los "pujadors", que es como se les conoce por aquí a estos pasos ancestrales, por los que subiremos y bajaremos hoy, y que supondrán uno de los puntos fuertes de la excursión. Este en especial es espectacular, primero por unos escalones tallados en la roca y luego por que el sendero se aprovecha de unas grietas pasillo en la caliza para ganar la parte alta de la muela. Antes de seguir por la loma nos asomaremos al Peiró/Piló de Sant Pere, un estupendo mirador hacia Forcall y la triple confluencia de valles que forman, el Cantavella, el Calders y el Bergantes, único río valenciano que pertenece a la cuenca del Ebro.
Ya por la loma, el sendero discurre sobre una cornisa rocosa antes de introducirse en un tupido bosque de pequeñas carrascas. Así llegamos hasta el extremo más meridional de la muela, en las que se encuentra la ermita de Sant Cristòfol de Saranyana. El panorama visual es de primer orden, abarcándose la práctica totalidad de la comarca, así como bastante territorio del Maestrazgo turolense.
Dejamos que el PR se vaya hacia la Todolella. Nosotros continuamos ahora rumbo norte por un largo tramo de insulso carril, pasando por el punto más alto de la muela, coronado por un vértice geodésico, punto culminante, 1108 metros, de la ruta de hoy y que sin embargo no nos ofreció vista ninguna. La cosa mejora al introducirse el camino en un pequeño robledal, y al encontrar el paso de bajada de la muela, en el que combinaron el trabajo en la piedra con aderezos de madera. Un tramo por un limpio carrascal precede a un tramo de pista, por el que llegaremos a las ruinas del Mas de Roc. Desde allí un precioso sendero paralelo al Barranc del Mas de Roc y sus laderas aterrazadas nos irá bajando hasta su cauce, por el que llegaremos a la carretera a la Todolella.
Aún con el frescor matutino (el día fue bastante caluroso para ser primeros de octubre) abandonamos Forcall. Pasamos junto a la Ermita de Sant Josep. |
Por el PR-CV-117 empezamos ganar cota. Vemos Forcall y la confluencia de valles. A la derecha la Mola de Vila y a la izquierda la d'en Camaràs, ambas en el menú de hoy. |
Pero eso será más tarde. El primer objetivo será la Mola de Sant Cristòfol. Atractivos tramos de sendero como este nos aproximarán a ella. |
Ahí la tenemos, más en concreto su extremo NE, en el que distinguimos el Piló de Sant Pere. También nos llaman la atención todos esos bloques desprendidos. |
Y a medida que vamos avanzando las vistas van siendo mejores. Forcall queda ya muy alejado. |
Pero lo que venía después no iba a tener desperdicio, ya que el camino aprovechaba los pasillos entre los bloques desprendidos. |
Mirad que maravilla de sendero encajonado. |
¿Y qué me decís de este, con escalones tallados y todo?. |
El sendero continúa por este pasillo, camino de una brecha en la roca. |
Vistazo atrás al pasillo. |
Y con esta preciosa curva se remata la subida a la parte alta de la muela. |
Pero antes nos acercaremos al Piló de Sant Pere, para disfrutar de unas extensas y limpias vistas hacia el norte. |
Desde allí vemos la continuidad de la muela hacia el sur, con su parte alta colmada de arbolado. Hacia allí nos dirigimos ahora. |
Dejamos atrás el Piló... |
...y enfilamos el claro sendero hacia la ceja rocosa. |
Ya estamos caminando sobre ella, y con excelsas vistas. Se vuelve a apreciar con total claridad la intersección de valles... |
...con Forcall en el centro. |
El sendero se introduce en un joven y tupido carrascal. |
Aún así en algunos tramos podemos ver otro de los objetivos de la jornada; la Ermita de Sant Cristòfol de Saranyana. |
Esta gigantesca ermita (siglo XIV) domina el extremo más meridional de esta Mola de Sant Cristòfol. |
Rellano frente a la hospedería anexa a la ermita, en el que también hay un crucero. Esta ermita es el destino de cuatro romerías o rogativas diferentes, que parten desde la Todolella, la Mata, Cinctorres y el propio Forcall. Más información de esta ermita, y de otras de la comarca, en este enlace. |
Detalle del reloj de sol que hay en la pared de la hospedería. |
Panel interpretativo de las vistas, muy extensas hacia los montes que lindan con la provincia de Teruel. |
Detalle del crucero. |
Puerta de entrada a la ermita, en su vertiente oriental. |
Buenas vistas también desde este punto. Parte de la longitud de la Mola, y a la derecha el valle del Calders. |
Tras una breve parada en el ermita continuamos con la ruta. La retomamos con el tránsito por lo alto de la loma, que no es nada del otro mundo. La cosa se anima al entrar en un robledal. |
Junto a estas calizas, correspondientes a la Mola del Mas de Roc, encontramos el paso de bajada hacia el valle. |
Pegado a la caliza, y con listones de madera introducidos en la roca. |
Entramos en el Racó de Roc, en el que se conjugan paredes calizas... |
...con un bonito bosquecillo de carrascas. |
Acabamos saliendo, junto a un redil de vacas, a la pista que sube desde el Mas de Roc, cuyas ruinas vemos en la imagen. Tras él la Roca de Migdia de la Mola Garumba. |
Mas de Roc. |
Desde el Mas se va a afianzar un sendero que bajará al valle por la ladera izquierda de este barranco. La Mola de la Vila nos espera, mientras la d'en Camaràs espera su turno. |
Nos fijamos en la ladera opuesta del barranco, totalmente aterrazada. |
Y por nuestra vertiente, increíble muro trabajado en piedra seca. |
Me gustó mucho este tramo de bajada junto al barranco. |
La Mola de la Vila.
Cruzamos la carretera por un paso subterráneo, y empezamos a seguir el asfaltado del Molí de Matalí, que cruza el Riu Cantavella. No tarda en aparecer el sendero que sube hasta la Mola de la Vila, balizado PR-CV-322 y conocido como el Camí de la Dula. Se conoce como dula a un terreno común donde pastaban los rebaños de los vecinos de un pueblo. El sendero discurre muy bien trazado entre azagadores y campos de cultivo, y alcanza la pista que sube a la cima, que solo seguimos unos metros, ya que pronto nos sale a la derecha un nuevo sendero, más boscoso, que nos deposita en una nueva repisa rocosa, por la que alcanzaremos el rinconazo de la Cova de la Carn. De ahí una ruda y pedregosa subida nos hará alcanzar la pista, por la que llegaremos a lo más alto de la Mola de la Vila, coronada por un vértice geodésico autonómico y un nuevo peiró/piló, en este caso levantado en honor a Sant Marc. También hay unas antiestéticas antenas, que para nada empañan unas sensacionales vistas, las mejores hacia Forcall de todo el día y hacia los valles de los tres ríos antes mencionados.
La ruta continúa por el PR, que se va en busca del punto por el que mejor salvar los roquedos orientales de esta Mola de Vila. Encontrado el paso el sendero baja serpenteando hacia la ribera del Bergantes, el cual tendríamos que vadear para continuar con la ruta. Por suerte no era mucha caudal el que llevaba y lo pudimos hacer sin necesidad de descalzarnos. Tras el vadeo vino una fuerte subida y estábamos en la carretera a Ortells, dispuestos a encaramarnos a las laderas de la Mola d'en Camaràs.
Ya hemos cruzado la carretera y bajado al valle. Próximo destino, lo tenemos delante, la Mola de la Vila. Pasaremos junto al Molí Matalí. |
Pequeño estanque en el Riu Cantavella, antes de tomar el sendero de subida a la Mola. |
En plena subida por el Camí de la Dula, rumbo a la Mola de la Vila. |
El sendero tiene algunos tramos realmente deliciosos. |
Bonito contraste de las eras con los roquedos de la Mola. |
La subida va adquiriendo tintes panorámicos. Ancho valle del Cantavella y la extensa Mola de Sant Cristòfol. |
El sendero se sube a una cornisa rocosa camino de la cima de la Mola. |
Aquí tampoco faltan las secciones rocosas. |
Más vistas, ahora hacia Forcall y la Mola Garumba. |
Seguimos por la cornisa... |
...y llegamos al bonito rincón de la Cova de la Carn, que alberga varios apriscos de ganado. |
A partir de la cueva el sendero se pone bravo y nos hace alcanzar la pista que se dirige a las antenas. |
Ya estamos en lo alto de la Mola de la Vila, a 938 metros de altura. Se me olvido fotografiar el Piló de Sant Marc. Estas son las vistas que tenemos hacia el norte. |
Preciosa estampa hacia el este, hacia el punto donde Cantavella, Calders y Bergantes se hacen uno. |
Forcall y el valle del Calders. |
Desde la cima visualizamos parte del recorrido que nos espera ahora, la bajada al Bergantes y la Mola d'en Camaràs. |
La cima de la Mola de Vila vista desde el sendero de bajada al Bergantes. Al fondo la Mola Garumba. |
La Mola d'en Camaràs estuvo bien presente durante toda la bajada. |
Abusamos del zoom para ver mejor las paredes de la Mola d'en Camaràs, y de paso la imponente silueta del Castell de Morella. |
De nuevo la Mola d'en Camaràs. Intentando adivinar como íbamos a subir a ese pinar de la parte alta. Menuda sorpresa nos esperaba. |
Plácido tramo antes de ponernos a vadear el Bergantes. La imponente Roca del Migdia de la Mola Garumba. |
La Mola d'en Camaràs y els Gegants.
No andaremos mucho trozo por la carretera, ya que inmediatamente sale el ramal que sube al Mas de la Grellera, tampoco pisaremos mucho este camino ya que de él ramifica un sendero por el que nos iremos aproximando a las paredes calizas de la Mola d'en Camaràs que nos descubren en su base un fantástico y fresco carrascal, salpicado de grandes bloques calizos desgajados de la pared, en el que no dudamos en hacer una relajada parada a comer.
Como todo su yin tiene su yan, a este precioso tramo de la ruta le iba preceder uno muy insulso, con largo tramo de carril y otro de sendero confuso que nos haría alcanzar el punto más alto de la Mola d'en Camaràs, que al igual que el de la Mola de Sant Cristòfol tampoco aportó demasiado a la ruta.
Por suerte no tardaríamos en recuperar la alegría, ya que encontramos el sendero que se dirige hacia el Pujador dels Gegants, que nosotros hoy utilizaríamos en bajada. Este sendero ancestral empieza a serpentear ladera abajo en busca del Bergantes, a cuyo valle nos asoma una sección del sendero. El panorama no puede ser más espectacular, por un lado la altiva e imponente Penya Alta y por el otro els Gegants, un conjunto de torres calizas, en el que destaca un espectacular gendarme independizado del resto.
Tras este punto tan álgido continuamos el descenso, con enormes robles y carrascas de por medio, hacia el Bergantes, aunque antes de llegar a él tendremos que cruzar nuevamente la carretera. Acabamos llegando al río, y junto al Molí dels Frares lo vadeamos de nuevo. Ya en la otra vertiente enganchamos con el Sender Fluvial, del cual andaremos un cacho hasta llegar de nuevo a la carretera. Esta vez ya no nos quedó más remedio que andar por ella hasta llegar a Forcall, donde hicimos un callejeo que puso el broche a esta completa, interesante, panorámica, y a tramos espectacular, ruta, que se hubiese quedado coja sin las dos cervezas que me tomé en una terraza de la plaza mayor de Forcall.
Un saludo a tod@s, sed felices!!.
Vadeado el Bergantes empezamos el ascenso hacia la Mola d'en Camaràs. Se nos queda esta perspectiva de la Mola de la Vila. |
Atravesamos una pequeña era antes de aproximarnos a los roquedos de la Mola d'en Camaràs. |
La cosa promete ponerse interesante. |
Y tanto, el sendero se introduce en un delicioso carrascal... |
...que se conjuga a la perfección con estas paredes calizas, en las que vimos numerosas vías de escalada. |
Además en el carrascal hay numerosos bloques desprendidos. ¿La pirámide d'en Camaràs?... es curioso hace unos años, en plena subida a la Mola Garumba, me hice una pregunta parecida. |
Si no me equivoco este sector de escalada se le conoce como el de Grallera, he aquí una reseña del mismo por si os interesa. |
Como os dije antes el día fue caluroso. Estas carrascas nos ofrecieron sombra y frescor, tanta como para hacer la parada a comernos el bocata en este punto. |
Tras el descanso, y en un recoveco de la pared encontramos el paso de acceso a la parte alta de los roquedos. Este estrecho pasillo entre las rocas... |
...en el que destaca este bloque empotrado, con un árbol saliendo bajo él. |
Lo vemos con más detalle. Sencillamente sublime. |
Toda una sorpresa que no esperábamos este paso. |
Al pasillo le sigue un sendero labrado en la roca que nos hace ganar la parte alta de las rocas. Vemos un pequeño pueblo allá al fondo... |
...se trata de Villores. |
El sendero nos sitúa a los bordes arriba del pasillo rocoso. |
Y también esta vista de Morella. Pido disculpas por la mala calidad de la fotografía. |
Nos saltamos fotográficamente otro tramo sin mucho interés posterior a la cima. El encuentro con el sendero del Pujador dels Gegants me va hacer a volver a tener la cámara preparada. |
Nos asomamos al valle del Bergantes... |
...bien vigilado por la Penya Alta. |
Impresionante paredón... |
...que no es más que el comienzo de un festival calizo, con todas sus representaciones artísticas... |
...y que estará presidido por un lado por la Penya Alta... |
...y por el otro por els Gegants, espectaculares. Uno de esos lugares que te dejan boquiabierto y ojiplático cuando los ves aparecer ante ti. |
Todo un acierto haber hecho la ruta en este sentido y haber dejado esta maravilla para el final. Por cierto que bien queda la palabra "gegant" cuando está relacionada con la montaña, ¿verdad?. |
Perspectiva más cercana de este "moai" de els Ports... |
...y de nuevo la dominante Penya Alta. Como disfruté este tramo. |
Continuamos con la bajada. Desde la perspectiva contraria este gendarme no pierde su forma de faz. |
Durante esta segunda parte de la bajada encontramos carrascas tan majas como esta... |
...y robles tan robustos como este, ya muy cerca de la carretera. |
Bajando de nuevo al Bergantes. Pasaremos junto al Molí dels Frares. |
Buscaremos detalles erosivos en ella, como no, els Gegants... |
...y otras curiosidades geológicas... |
...en las que caben oquedades como esta. |
Por la carretera, rumbo a Forcall y con anhelos cerveceros. Pasamos frente a la Ermita de la Consolacioneta, junto a la que empezamos hace unos años la ruta a la Mola Garumba. |
Hablando de ella, ahí la tenemos, en concreto su altivo espolón NO, la Roca del Migdia. Qué bonito paso entre rocas hay también ahí. Os dejo el enlace a la crónica de aquella bonita ruta. |
Llegando a Forcall. |
Torre del campanario de Forcall, y detrás la Mola de la Vila. |
Plaça Major de Forcall, punto final de esta gran excursión por els Ports. |
- Esta ruta tuvo una longitud de 26,3 kilómetros, en los que salvamos un desnivel positivo acumulado de 1100 metros.
- La ruta transcurre en todo momento por buenos caminos y senderos de montaña, aunque hay tres puntos a considerar, el primero lo encontramos entre donde termina el camino de la parte alta de la Mola de Sant Cristòfol y el punto de bajada al Racó de Roc, en ese tramo no hay sendero. El segundo reside en localizar el mejor punto de vadeo del Bergantes para empezar a subir hacia la Mola d'en Camaràs, en caso de llevar el río más caudal habrá que descalzarse. Y el tercero es el tramo de sendero que conduce a la cima de la Mola d'en Camaràs, muy perdedor y con alambrada de por medio.
- Recomendado mapa de la zona o un buen track. Nosotros nos apoyamos del mapa els Ports I de el Tossal Cartografies y de un track del amigo Ángel de Vamos de Ruta..
- Este es el track que grabé yo.
- Las subidas a las tres muelas se pueden hacer de forma individual y de forma completamente circular. También se le puede agregar a esta ruta la circular a la Mola Garumba, con lo que tendríamos una integral a las cuatro muelas de Forcall, con cerca de 40 kilometrazos de ruta.
- Apuntar que cuando enlazamos con la pista que sube desde el Mas de Roc pasamos junto a un redil de vacas que estaba abierto, durante unos metros algunas de ellas nos siguieron, así que ojo, y si vais con perro, atado en ese tramo.
- No encontramos ninguna fuente en todo el recorrido.
Hola Dani,
ResponderEliminarEspectacular y completa ruta la que nos has mostrado hoy, la de horas de montaña que hay en ella.
Las vistas desde las molas son impresionantes, pero lo que realmente es espectacular son esos pujadors que serpentean entre pasillos rocosos, con zonas talladas en la misma caliza, debió ser una delicia transitar por ellos.
Cuando he visto el Gegant no he podido evitar que viniera a mi mente la imagen de un mohai, que pasada de gendarme, y que pasada de festival de formaciones calizas que has podido degustar.
Esta comarca dels Ports la tengo muy abandonada, y mira que la tengo de paso cuando vuelvo de Montanejos, habrá que hacer una visita a la zona, ya te avisaré para ver si hacemos una rutilla por allí, que con un guía como tú seguro que disfruto el triple, por no hablar de las cervecillas post ruta, que en buena compañía siempre saben mejor.
Un abrazo.
Hola David.
EliminarPues ocho horas de monte fueron, que me dejaron totalmente saciado y sediento, que no veas como entró la primera cerveza en la terraza jejeje.
Así es, las vistas fueron espectaculares en todo momento, y esas formaciones calizas, moái incluido, me maravillaron, pero si me tuviese que quedar con algo de la ruta sería con esos pasos de acceso a las muelas, uno se siente muy humilde al transitar por esos pasos que construyeron nuestros antepasados.
¿De paso esta zona cuando vuelves de Montanejos?, creo que tanto Toni como tú confundís la comarca de els Ports con el Parc Natural dels Ports, y no tiene nada que ver una cosa con la otra. Pero de todas maneras te tomo la palabra y cuando cuadre hacemos una ruta conjunta, sea donde sea jeje.
Un abrazo.
Hola Dani.
ResponderEliminarSegún leía esta entrada, me estaba preguntando....¿pero de cuantos km ha sido la ruta de hoy? jajaja, 26 y pico. Vaya pedazo de excursión, pero claro lo de querer unir las molas en una sola ruta es lo que tiene.
Tiene muchos tramos espectaculares, empezando por los chulísimos Pujadors (es curioso la de nombres que hay a lo largo de toda la geografía peninsular para denominar estos pasos ancestrales que salvan los desniveles rocosos, pujadors, graus, escalerones, etc...)
Luego esa mezcla de peiros, escaleras talladas, ermitas, ríos y bosques de encinas le da un toque muy rico, con ese final de traca con la Penya alta, los Gegants y el concierto calizo erosivo (como me gusta ese agüero tan perfecto con una aguja encima) Por cierto, esa piedra pirámide debe tener algo contigo, que son ya dos veces....
Al comentar que esto era Els Ports me ha venido a la cabeza un paisaje más lleno de pinares, y rocas más verticales y puntiagudas, chocándome al principio estos anchos valles labrados y estas molas más aplanadas, pero está claro que hay variedad de paisajes para elegir ;-)
Un abrazo.
Hola Toni.
EliminarComo le comento a David, creo confundes esta comarca de els Ports con el Parc Natural dels Ports, que engloba lo que es macizo del Mont-Caro, Beceite, el Matarranya, la Fageda del Retaule etc...Además de quedar bastante alejados una zona de la otra, orogrficamente no tienen nada que ver, tu lo has descrito a la perfección. Pero sí, ambas zonas son espectaculares a su manera, y nos ofrecen mogollón de posibilidades excursionistas.
Acabé "derrotao", ya que mi forma física este verano ha dejado bastante que desear, pero la satisfacción de haber realizado esta ruta tan completa fue proporcionalmente el triple del cansancio que acumulé.
Ya sabía yo, mientras hacía la ruta, que esos "pujadors" te iban a gustar, y bueno, de esos Gegants, del bocata que me comí, y de las cervezas que me tomé después ya os fui informando vía whatsapp jejeje.
Esas rocas piramidales...¿tendrán algo que ver con esos perfectos bloques cuadrados y rectangulares que vimos en la Degollá?...amiguitos, bienvenidos a la nave del misterio jajaja.
Un abrazo.
Vaya rutón tan chulo Dani, me lo apunto ya de ya. Me pasa como a David que esa zona la tenemos abandonada y bien merece frecuentarla un poco más. Me apunto a la quedada de David si no os importa, me encantaría acompañaros. Las cervezas corren de mi cuenta, jejejeje. Excelente descripción de las muelas y sus curiosos accesos. Y buena elección del track de Ángel Salom, buen conocedor de la zona. Un abrazo.
ResponderEliminarHola Paco.
EliminarUn recorrido que no te puedes perder, ideal para acabar empapado con la magia de esta comarca...y oye, como os pilla lejos, ¿por que no incluir también la Mola Garumba?, así volveríais pa Valencia con el pack completo de Forcall jejeje.
Con el track de Ángel, y el mapa de Tossal, ya sabía que perderme no iba a perderme jejeje.
Oye, pues a ver si para principios de año, que me bajará el trabajo, hacemos esa quedada con David, y le damos vida a una circular guapa que tengo trazada en papel para subir al Mont Caro.
Un abrazo.
Hola Dani.
ResponderEliminarPero estuviste en els Ports o en la isla de Pascua?. Esa primera fotografía, nada más verla me ha recordado a los famosos moais.
Recorrido muy largo, normal que tuviese algún tramo "feo", pero en general es una pasada poder caminar por esos senderos ancestrales, donde antiguamente subirían las caballerizas y que como siempre, me asombra la imaginación que tenían para encontrar siempre el paso bueno, aprovechando el entorno.
Las formas que adquieren las rocas, algunas de ellas parecen esculpidas por el mismísimo Gaudi, sin duda que caprichosa es la naturaleza y cuantos cientos de años habrán pasado para que tengan la forma actual.
De esa zona de Morella, ya nos has enseñado par de sitios chulos, yo apenas conozco la zona del Masmut, habrá que aprovechar para ir un fin de semana y conocer también el pueblo, que es otra de nuestras asignaturas pendientes.
Un saludo
Hola Eduardo.
EliminarJejeje, aquí en Castellón no íbamos a ser menos que en la Isla de Pascua...Siempre lo he dicho y no me canso de repetirlo, no hay mejor artista, y más original, que la madre naturaleza, nunca deja de sorprendernos. Aunque lo del hombre de antaño tampoco está nada mal, con esos caminos que se curraban para subir a lo alto de los montes.
Pues nada más tengas ocasión no dudes en dejarte caer unos días por esta zona de Morella, en la que además de visitar el pueblo, cosa totalmente recomendable, tienes cerca muy buenas opciones excursionistas. Además, y como he comentado en la crónica, se puede subir a las cuatro muelas de Forcall de forma individual y circular. La ruta a la Mola Garumba es una excursión que vale mucho la pena.
A Peñarroya de Tastavins tengo pendiente de ir, y hacer una circular a esas Rocas del Masmut.
Un saludo.