Ferrateando en el Mijares: Estrechos de la Hoz y Jurásica - Formiche Alto (Teruel)

Martes 17 y lunes 23 de mayo


Ya con el problemilla informático solucionado, de tierras malagueñas saltamos a nuestro vecino Teruel, no nos vamos muy lejos de la capital, más en concreto a la población de Formiche Alto, donde un joven Mijares ha tallado unos excelentes estrechos, nos introduciremos en ellos y los recorreremos, mediante la unión de dos espectaculares ferratas de carácter horizontal, la de los Estrechos de la Hoz (especialmente espectacular esta) y la Jurásica.

Antes de ponerme con la descripción me hace ilusión comentaros una cosita; esta entrada que estáis leyendo es la número 300 en la historia de este blog, no sería nada más que una simple efeméride de no ser por que la primera entrada que escribí en este blog fue para resumir una jornada en la que en plan dominguero visitamos Alcalá de la Selva, y luego para bajar una opulenta comida en la que predominó la carne porcina nos fuimos a visitar el nacimiento del Río Mijares, en la vecina localidad de Cedrillas, pues mira por donde quien me iba a decir a mi, que 299 entradas y casi seis años después seguiría con esto del blog, que ya no comería carne, que haría ferratas y que esta entrada de número tan redondo tendría, como la primera, un casi recién nacido Mijares cómo protagonista, una, creo, bonita casualidad.

1 de mayo de 2010, Alberto, Graciela y unos cuantos kilos más de Dani, cerca del nacimiento del Mijares en Cedrillas, unos meses después me dio por crear este blog y esta fue la primera entrada.

Contado esto, vamos al meollo, cómo habréis observado, astutos lectores, hay dos fechas distintas en el encabezamiento de la entrada, y es que en cuestión de seis días hice esta ferrata (Estrechos de la Hoz) dos veces, el primer día fui con Jesús y Xevi, con el propósito, además de unir estas dos ferratas, claro está, de que Xevi pudiese elaborar una reseña más completa a la que ya tenía publicada en deandar.com, añadiendo la última parte de la de los Estrechos de la Hoz y la continuación de la Jurásica más el retorno más idóneo para cuando se juntan los dos recorridos. Cómo la actividad me gustó tanto (especialmente la primera ferrata), unos días después volví con Eva para repetirla (solo Estrechos de la Hoz), y es por eso que en esta crónica encontrareis imágenes de dos jornadas diferentes.

Para encontrar el principio de la ferrata deberemos abandonar las calles de Formiche Alto en dirección (TE-V 8011) al Castellar, estaremos atentos a la indicación que nos desviara (izquierda) a una pista de tierra (apta para turismos), a partir de aquí las señales son abundantes y nos conducirán sin perdida al inicio de la ferrata, donde encontraremos unos paneles informativos y un refugiete.
Una vez equipados vadearemos por primera vez el río y solo tendremos que andar unos minutos para entrar en el tercer estrecho y por consiguiente en la zona equipada. La progresión en este primer estrecho (en sentido de la marcha, tercero en el sentido del río) es completamente horizontal (a poca distancia del agua) y no entraña ninguna dificultad, y alterna, tanto en una orilla como en la otra (deberemos vadear el río unas cuantas veces aquí), tramos de ferrata con otros que se hacen caminando, y es ideal para ir calentando, disfrutando de la sorprendente belleza del lugar, sobre todo de las pequeñas cascadas que forma el río y de los espectaculares estratos que saldrán a nuestro paso. Una serie de vadeos nos llevarán ante la Sabina Pinera, una sabina a la que le ha crecido dentro un pino, ambos han entablado una bonita lucha vegetal, en la que ninguno de los dos, de momento, parece dar muestras de flaqueza, aquí en este punto termina el tercer estrecho.

Primero de los muchos vadeos que haremos, especialmente en el primer tramo. El paisaje ya se adivina espectacular antes de empezar.

Dirigiéndonos al tercer estrecho, como mola ver ese reflejo en el agua.

Empieza lo bueno, el paisaje embelesa desde el primer instante.

Aquí el recorrido toma un poco de altura con respecto al agua.

Pero la tónica general de este primer tramo equipado será ir bastante cerca de ella. Espectacular gorga.

Uno de los pasos más atractivos de este tercer estrecho.

Eva me capta desde su posición.

En este tercer estrecho serán varias las veces que bajaremos a ras de agua.

Haremos algunos tramos andando.

Zona de pequeñas cascadas, aquí se cruza al otro lado, teniendo la posibilidad de subir a una cueva cercana.

Desde la subida a la cueva capto la acción de Eva.

Precioso entorno.

Hasta el estrecho intermedio hay ahora un buen tramo de andar, durante el cual disfrutaremos de unos espectaculares estratos, estos y los de las dos siguientes fotos.

Poco antes de llegar al segundo estrecho nos topamos con la Sabina Pinera, desde aquí puede parecer una sabina normal.

Pero no lo es, a esta le ha crecido un pino en su tronco, y ahí andan a la brega, a ver quien aguanta más ;-).

Un primer puente nos introduce en el segundo estrecho, el recorrido, con algún paso más atlético pero sin crecer en dificultad y sin perder el cariz horizontal, toma un poco de altura con respecto al agua y pasa a discurrir en su totalidad por el margen izquierdo del curso (derecha orográfica), seguiremos disfrutando del transcurrir del río por los meandros y los troncos que ha ido arrastrando en épocas de crecidas, de sus estratificaciones o viendo como surgen de lugares imposibles los árboles, incluido algún pequeño tejo.

El segundo estrecho lo inaugura este puente colgante.

El trío "la-la-la" en el primer puente ;-).

Continuamos con una larga horizontal, podemos ver los enormes troncos arrastrados por las crecidas al fondo.

El resto del recorrido de este segundo estrecho discurre por bonitas zonas de estrato.

Xevi y Jesús progresando en este segundo estrecho.

Bonito paso de salida del segundo estrecho.

Salimos del segundo estrecho y tras un tramo de transición (es un decir, los tramos que se hacen andando también tienen su encanto) llegamos a un segundo puente, su acceso, ligeramente desplomado, ya nos augura que la vía va aumentar de dificultad ahora, entramos en el primer estrecho, sin duda el más espectacular de los tres, al poco de cruzar el puente (pasamos a margen orográfico izquierdo) encontraremos un escape (si optamos por escapar por aquí saldremos al puente tibetano de madera), y a partir de entonces la ferrata sube en su dificultad, tanto física como técnica, me atrevería a calificar este tramo final cómo de K3, cuando lo anteriormente recorrido era K1. Empezaremos destrepando con cuidado una canal, primero ayudados solo por el cable y después por grapas, que nos volverá a bajar casi a ras de agua, el río se encajona aquí de manera espectacular y esta será la tónica hasta el final de esta primera ferrata, empezaremos a encontrar los primeros desplomes y alejes entre grapas, y también, ojo!!!, muchas que se nos moverán al cogerlas, el recorrido sigue la tónica horizontal pero con tendencia descendente, tanto que acabamos bajando al cauce, aquí nos podemos tomar un respiro. Se continua superando una placa tumbada, que nos vuelve a hacer ganar altura y volvernos a meter de lleno en el estrecho, mucho más angosto ahora, y que nos evocará a alguna sección del Sorrosal, aquí la visión de dos grandes bloques encajados nos sobrecogerá, superados estos el recorrido entra en su parte más física pero también más disfrutona, el ligero pero constante desplome hará que se nos carguen los antebrazos, y en ocasiones tendremos que estirarnos más de la cuenta, en estéticos pasos, para llegar a ciertas grapas (quien mida menos de 1'65 lo pasará mal aquí ;-))todo este esfuerzo será recompensado con el espectacular entorno encajonado que nos rodea, a modo personal, quizás la ferrata más bonita que he hecho hasta la fecha, esta primera ferrata finaliza con una exigente vertical de unos 20 metros que nos depositará ante el mencionado puente tibetano de madera que sirve de nexo entre las dos ferratas.

El primer estrecho se inicia con un nuevo puente, con ligero desplome para acceder a él, ¿se atreve alguien a cruzar por el tronco? ;-).

No seré yo ;-) aquí me tenéis accediendo al puente.

Tras el puente ganamos un poco de altura para llegar a un escape, tras él llega este destrepe, que nos vuelve a meter de lleno en el estrecho.

A partir de aquí la ferrata ya no es apta para principiantes, este tramo descendente hay que hacerlo con bastante cuidado.

Entramos en la zona más bonita y también más técnica de todo el recorrido.

Bonita conjunción entre el rosa y amarillo de Eva, la vegetación, la gris caliza y su reflejo en el verde del agua.

La cosa empieza a desplomar ligeramente.

Aquí nos podremos tomar un respiro.

Tras ello tendremos que continuar por donde va la cabra.

De bonito pasamos a espectacular, entramos en la zona de los bloques encajados, vemos el primero.

Xevi y Jesús lo superan.

Y aquí el segundo, con cascada debajo, yo mientras tanto cruzo un mini-puente.

Eva, estirándose para alcanzar una grapa.

De nuevo Xevi y Jesús, llegando a la altura del segundo bloque.

Y superándolo, ¿imagináis cómo debió ser el momento en que se desprendió y quedo ahí encajado?.

Una pequeña vertical, en la zona más estrecha de todo el recorrido.

Superados los bloques seguimos por lo más estrecho.

Este tramo de los bloques y el posterior son los más disfrutones, pero también donde se nos moverán más grapas.

No estuvimos solos el primer día, un poco más adelante vemos a una pareja de Lleida, negociando un desplome.

Al cual llegamos nosotros ahora.

Hay que tirar de técnica y de brazo en este tramo, se nos cargarán los antebrazos.

Y nos los acabarán de castigar esta corta pero exigente y desplomada vertical.

Por ella accedemos al bonito puente tibetano de madera, que nos servirá de nexo si queremos unir los dos recorridos, si solo queremos hacer la primera ferrata lo cruzaremos dos veces, una de id ay otra de vuelta.

En este punto tenemos dos opciones; cruzar el puente de ida y vuelta y abandonar, si hacemos esto deberemos seguir un marcado sendero que en fuerte ascenso nos conducirá a un cortafuegos, iremos ahora por su interior, siguiendo las numerosas señales, hasta que llegaremos a un refugiete similar al que habíamos encontrado al principio, desde allí, sin dejar de seguir las indicaciones en una hora + o-llegaremos al punto donde habíamos dejado el vehículo. Si por el contrario cruzamos el puente y continuamos estamos afrontando la Vía Ferrata Jurásica en sentido contrario, aunque esto no supone ningún problema puesto que el recorrido es totalmente horizontal y muy facilón y se puede hacer igual en un sentido que otro, el recorrido sigue siendo muy atractivo, pero sin llegar a la espectacularidad alcanzada en el tercer estrecho de la anterior ferrata, y combina sencillos tramos equipados a diversas alturas del agua con largos tramos de andar por bonitos pinares, aunque en mi opinión, el recorrido, juntando las dos ferratas, acaba haciéndose bastante largo (4'30 nos costó a nosotros hacer las dos, a buen ritmo, sin contar retorno)e incluso monótono en algún tramo. Cómo apunte decir que esta ferrata, cómo su nombre indica, nos dará la posibilidad de encontrar algunos fósiles de aquella época. Así llegamos al final (principio) de esta Jurásica, recordamos que la hemos hecho al contrario y que ahora haremos parte del camino de aproximación como retorno, hay que tener esto en cuenta y no seguir este camino de forma íntegra, de lo contrario nos enfrentaríamos a una larguísima caminata para volver al punto donde tenemos en vehículo, para evitar esto deberemos estar atentos a unas marcas de pintura roja en un pino en la orilla contraria, aproximadamente a los 500 metros de haber acabado la ferrata, vadearemos el río y será importante no perder el rastro de esas marcas, ya que nos conducirán al refugiete anteriormente mencionado, y al retorno de Estrechos de la Hoz, de todas maneras os dejo el enlace a la reseña de Xevi por si queréis más información y orientación de tiempos recorrido/retorno.

Vías ferratas Estrechos de la Hoz y Jurásica, dos bonitas maneras de disfrutar de un joven y salvaje Mijares, Teruel nunca deja de sorprendernos!!!

Un saludo a tod@s.

Xevi, cruzando el tibetano, vamos a por la Jurásica.

No encontraremos ninguna dificultad a reseñar en esta ferrata.

Encontraremos tramos muy atractivos aquí también.

Iremos alternando, a diferentes alturas, tramos equipados con tramos de andar.

Lo único que nos puede pasar factura aquí es el cansancio, al empalmar dos ferratas ya largas de por sí.

Últimos compases de la Jurásica.

Salida de la Jurásica, unos metros más adelante (en la orilla contraria) encontraremos las marcas que nos enlazarán con el retorno de Estrechos de la Hoz.

Hace unas semanas os comenté que vi una colmenilla por primera vez, pero que, cosa rara en mi, se me olvido fotografiarla, hoy volví a ver una, y está vez no se me escapó ;-).

Y para finalizar el habitual vídeo de cuando hacemos actividades de este tipo,  hoy la música corre a cargo de Sound Of Contact; saga Collins, espíritu Genesis.