Ruta Fluvial Cirat-El Tormo-Río Mijares

Domingo 17 de julio de 2011


¡Hemos repetido! La semana pasada nos gustaron tanto Cirat y sus parajes, que este domingo nos hemos vuelto a escapar allí para realizar una ruta que une esta población con la de El Tormo, para posteriormente regresar a Cirat siguiendo el cauce del Río Mijares, el cual hemos tenido que cruzar en varias ocasiones, encontrando una enorme balsa que nos ha servido de improvisada piscina, con trampolín incluido.

Llegamos a Cirat a eso de las ocho y dejamos el coche en una zona de acampada que encontramos a la entrada del pueblo, cerca de allí hay una playa fluvial que suponemos (y bien) que hoy tendrá overbooking.
Cruzamos el Río Mijares por primera vez (por un puente) y cogemos una senda que nos subirá hasta la carretera, vamos unos metros por ella, pero pronto encontramos un camino y luego un sendero que nos llevará hasta la Cueva Matrillas, donde hacemos la primera de nuestras paradas.
Esta cueva se utiliza (o se utilizaba) para guardar ganado, ya que a parte del muro exterior y el recinto para las cabras u ovejas, vemos la caseta del perro y una estancia superior en la que suponemos que dormiría el pastor.
Unos metros más adelante encontramos otra pequeña cueva.

Primer contacto con el Río Mijares

Cirat

Cueva de Matrillas

Foto desde el interior

Como veis es bastante grande

Habitáculo del pastor...

...y del perro?

La otra cueva...

...que tiene esta hendidura en el techo

Continuamos con la marcha y entonces el sendero enlaza con la parte más baja del Barranco del Lobo, a partir de entonces la senda empieza a estar poco definida y tenemos que estar muy pendientes de nuestros Garmin.
Por suerte tan solo son unos pocos cientos de metros, porque luego el camino se hace más evidente, caminando por dentro del Barranco de Aguas Malas en lo que es la parte más bonita de la ruta, ya que caminamos entre abundante y espesa vegetación que no dificulta en absoluto el avance, además eso impide que entre el sol que ya empieza a picar de lo lindo.

Barranco del Lobo

Barranco de Aguas Malas...

...de exuberante vegetación...

...y donde encontramos este madroño,rara avis por estos lares

Más tarde nuestra senda se cruza con el PR-Aldeas, el cual se han pegado la magnifica currada de acondicionar y señalizar nuestros colegas del CAMET (desde aquí os recomiendo echar un vistazo a su blog, vale mucho la pena), lo seguimos durante un rato hasta que encontramos una pista hormigonada que nos conducirá hasta El Tormo.
Cuando llegamos a esta acogedora localidad, nuestra intención era de almorzar en el bar, pero claro, hoy no todo nos iba a salir bien y lo encontramos cerrado ¡¡yo no llevaba bocata!! ¡¡y con lo bien que hubieran entrado unas birrillas!! así que callejeamos un poco y en el Mirador del Ociño, aprovechando que hay unos bancos, paramos a almorzar, y yo a comerme un pepino y una manzana que llevaba por si fallaba lo del bar (más vale prevenir...)

Cruce con el PR-Aldeas

Camino de El Tormo

Iglesia de El Tormo

Casa antigua...

...y vista general, con la Muela al fondo

Mirador del Ociño

Panorámica desde el mirador

Dejamos atrás El Tormo y bajamos hacia el del Río Mijares, una gran pared de piedra nos da la bienvenida a él, caminando encajonados en su cauce pronto encontramos una pequeña playa fluvial en la que ya entran ganas de zambullirse, luego más tarde llegamos al primer punto en el que tenemos que cruzar el río, nos calzamos las chanclas...y a cruzar, esta operación la repetiremos cuatro veces.
Pero el culmen de esta ruta lo encontramos en el segundo cruce del río, ya que allí aparece ante nuestros ojos y cual oasis una larga, profunda y enorme balsa natural en la que el agua esta clarísima, así que ni cortos ni perezosos nos ponemos el bañador y nos zambullimos, el agua esta deliciosa para el baño y para bucear, además encontramos un par de lugares altos ideales para saltar al agua que nos sirvieron para hacer un repertorio de saltos y piruetas que dejaron boquiabiertas a cuatro truchas despistadas que nadaban tranquilamente en la balsa (el vídeo que adjunto da fe de ello)
Teniendo esto, quien quiere playa, aquí no hay masificación, el agua esta limpia, te diviertes más y estas en la montaña...no hay color, por lo que pido a la gente que vaya a esta balsa que respete, cuide y no ensucie el entorno, ya que hay que cuidar estas pequeñas joyas naturales.

Esta pared nos da la bienvenida al río

Playa fluvial

Paco, cruzando el río por primera vez

Y la balsa

Desde aquí saltamos

Paco buceando...

...y yo bañándome

Río Mijares from Daniel Alcala on Vimeo.

Cruzamos el río tres veces más

Después de estar casi una hora en la balsa, seguimos con la ruta, frescos como como una rosa,  cruzamos dos veces más el río, nos volvemos a poner las zapatillas y salimos del cauce para llegar a la presa-dique de Cirat, luego seguimos caminando por el camino asfaltado que lleva a ella, bordeando el Embalse de Cirat, que contiene bastante agua, al llegar a un  pequeño túnel que hay allí, nos subimos a unas rocas para echar unas buenas fotos del embalse.

Una toma del Embalse de Cirat...

...y otra más general...

...una panorámica...

...y la presa

¡¡¡corre hacia la luz, Paco, corre hacia la luz!!!

Cruzamos el túnel y llegamos a la central hidroeléctrica, allí a parte de todo el tinglado eléctrico, encontramos un gran desagüe del agua sobrante y una enorme tubería que baja de la montaña.
Volvemos a encontrar la carretera de Cirat, pero nos desviamos un poco para visitar el poblado del Collado Blanco, lugar donde vivieron las personas que trabajaron en la construcción de la presa y de la central hidroeléctrica, hoy estos barracones (incluso tenían una iglesia) son víctimas del abandono y de los graffitis, una lástima por que es un espacio que se podría aprovechar y enfocarlo hacia el turismo rural o algo así.

Las adelfas lucen sus tres colores, rosa, blanco y rojo

Poblado del Collado Blanco...

...víctima del abandono...

...y de los graffitis, como podéis ver en la iglesia

Y ya por la primera senda que habíamos tomado por la mañana regresamos a la zona de acampada, en donde efectivamente la playa fluvial y el río estaba repleta de gente bañándose, pareciéndose así a una playa normal, de esas masificadas que tan poco me gustan a mi.


Postdata:


Para esta ruta Paco ha estrenado un nuevo modelo de calzado de montaña, lo último de lo último, lo más de lo más, con Gore-tex, suela Vibram de alta gama y una excelente sujeción de los tobillos, el resultado...satisfactorio a más no poder.

VALORACIÓN DE LA RUTA:


Una ruta corta y sencilla, para tomársela con calma, muy boscosa y un paraje precioso como es el Barranco de Aguas Malas en su primera parte, y refrescante en su segunda parte, la que transcurre por el Mijares, por la opción (obligación, diría yo) de darse un baño, además incluye la visita a El Tormo, bonito pueblo en el que no había estado nunca.
Como dije la semana pasada,nos gusta Cirat, volveremos más veces.


Agradezco desde aquí a Jose Tomas Izquierdo, por el track y por toda la información que me envió sobre esta ruta y sobre Cirat y os invito a visitar su magnifico blog Rutas de Senderismo por la Comunidad Valenciana.


DATOS DE LA RUTA:


Senderistas: Dani y Paco
Longitud: 12 kilómetros
Altura mínima: 255 metros
Altura máxima: 493 metros
Desnivel acumulado: 430 metros, tanto positivos como negativos
Tiempo: 4 horas 31 minutos en total y con baño incluido
Dificultad: Baja, aunque es recomendable el uso del GPS en ciertos puntos, como al salir de la Cueva Matrillas y para salir del río.
Aconsejable llevar chanclas para cruzar el río.
No hemos encontrado agua para beber en ningún sitio, por lo que es recomendable llevar buen suministro de ella, sobre todo si le ruta se realiza en estas fechas.