Serra d'Irta: el Saltet - Vistahermosa - el Boixar - Castell de Polpís

 Sábado, 4 de diciembre de 2021

Es curioso que teniendo la Serra d'Irta tan cerca como la tenemos solamente la hubiéramos visitado tres veces a lo largo de todos estos años, y resulta más curioso aún que estas tres visitas fueron realizadas las tres en el ya lejano año 2013, así que era de recibo planificar una buena caminata con la que paliar semejante desaguisado. Creo que lo logramos con creces, pues no fue una ruta, sino dos, dos circulares las que hicimos por esta siempre agradecida sierra litoral del Baix Maestrat.

Para hacer esta ruta nos fuimos hasta Santa Magdalena de Polpís, y desde allí hasta un punto de la vía de servicio paralela a la AP-7, que serviría de nexo entre las dos circulares. En la primera remontaríamos el Barranc del Saltet con sus formaciones calizas para alcanzar un primer cordal, que recorreríamos hasta la cima de lo Sant, desde allí bajaríamos hasta la Vall de Conques y el Barranc de Moles, punto en el que empezaríamos una nueva remontada, esta vez hasta el panorámico balcón hacia el Mediterráneo que es el cordal de los Alts de Vistahermosa, abandonaríamos el cordal y bajaríamos de nuevo al valle de la Rambla d'Alcalà encajonados al resguardo de la vaguada del Barranc del Boixar.

De nuevo en la vía de servicio nos iríamos en busca de la circular al Castell de Polpís. La subida hasta este castillo templario la haríamos por un frondoso bosque. Visitada esta antigua fortaleza seguiríamos subiendo hasta el Alt de la Bota, para después regresar al valle por el Camí del Mas del Senyor. Apuntar que nada más empezar la subida al Castell me noté muy fatigado y me costó mucho llegar arriba, por lo que decidí que bajaríamos por el mismo camino de subida, pero tras reposar y comer en el castillo, y aunque aún me notaba cansado, me engorilé y seguí con el plan previsto, pero sin subir al vértice de la Bota, lo cual vi totalmente innecesario.

Al final 21 kilometracos, y 900 metros desnivel positivo acumulado, que habiendo alcanzado una cota máxima de 435 metros no está nada mal. Irta nos dejó un buen sabor de boca, no esperábamos otra cosa.

A continuación, y como viene siendo habitual últimamente, más detalles de la ruta en la galería fotográfica.

Tras andar un buen cacho paralelo a la AP-7 localizamos el sendero por el que íbamos a remontar el Barranc del Saltet.

Estábamos muy al norte de la provincia, ya muy cerca de Tarragona, por lo que su cima más alta, el Mont Caro, no tardó en hacer acto de aparición.

El sendero, pindio y bastante camuflado entre el matorral fue subiendo barranco arriba...

...el cual no tardó en enseñarnos su seña de identidad...

...estas curiosas formaciones calizas.

En la ladera contraria a la de la subida también vimos formaciones chulas. Os las enseño luego con más detalle.

De momento nos centramos en estas, ya que el sendero llevaba toda la pinta de plantarse en su base.

Me tomé la libertar de bautizarlas como "els Frares del Saltet". Su topónimo correcto, según el visor GVA, el Cingle del Saltet.

Ya casi llegando a su base vimos como la erosión va haciendo mella en ellas, en forma de oquedad.

Ya en su base nos salimos del sendero para acercarnos lo máximo a una de esas oquedades...

...y vimos que una de ellas tenía incluso salida de humos 😝

Como os había prometido aquí están las formaciones de la otra ladera, ya bien iluminadas por el sol...

...entre ellas nos llamó la tención esta, a la que bauticé como "el infante siniestro".

Pasamos bajo este Cingle del Saltet...

...finalizando así esta sección tan atractiva de la ruta...

...que a partir de ahora tomaba un cariz más panorámico. Vemos de forma más amplia el Massís del Caro en el Port, con la plana de Tortosa a sus pies.

Mirando en la dirección contraria vemos el valle de la Rambla d'Alcalà, con Santa Magdalena de Pulpis.

La volvemos a ver otra vez, para acercaros un poco más el macizo montañoso del fondo, que se trata de la Serra d'en Galceran...

...en el despunta el Tossal de Saragossa. Detrás, no queriendo ser menos que su homónimo tarraconense, asomaba Penyagolosa.

Ganamos un cordal, que culminó en la tímida cima de lo Sant, allí tuvimos las primeras vistas hacia el Mediterráneo de la jornada.

Vemos Benicarló y Vinaròs, y más al norte el Delta de l'Ebre...

...y junto al Delta siempre está su inseparable Serra de Montsià, con la población de Alcanar a sus pies.

Bajamos hasta el fondo de la pequeña Vall de Conques y el Barranc de Moles, en el que aún se conservaba alguna pequeña poza en la que se pudieron refrescar mis compis.

Desde el barranco volvemos a remontar, en busca del cordal de Vistahermosa. Pasamos junto al Corral de Badal, o más bien lo que queda de él.

Camino de los Alts de Vistahermosa pasamos por varios pozos de agua.

Pronto nos quedó patente el porqué del topónimo Vistahermosa. Menudo balcón al Mediterráneo.

Vimos con total nitidez (incluso se aprecia el faro de l'Illa Grosa), les Illes Columbretes, las cuales os acerco con el zoom.

Y ya en los puntos más altos del cordal vimos...

...la bonita Péniscola, con sus murallas y su castillo.

Otro de los pozos que vimos.

Siguiendo el cordal hubiésemos llegado al Alt de la Bota y al Castell de Polpís, pero queríamos conocer el Barranc del Boixar, así que nos desviamos por el sendero que discurre por su interior.

Agradable bajada, con tramos de sol y otros de sombra, y con bonitas secciones de sendero.

Este Barranc del Boixar también tiene sus detallitos calizos.

Muy chulos estos dos barrancos de la primera circular.

Tras volver a la vía de servicio anduvimos otro buen cacho junto a la ruidosa, pero al fin gratuita, autopista, para ir en busca de la circular al Castell de Polpís...

...que aún luce altivo, a pesar del paso de los años, sobre su atalaya.

Esta subida tuvo algo de lo que hasta ahora había carecido la ruta, arbolado y sombra...

...y estas aparecieron de forma frondosa y exuberante.

Cada vez veíamos más cerca la ondeante bandera templaria.

Vista atrás, hacia la vaguada por la que discurre la subida al castillo, que paradójicamente se la conoce como la Solana del Castell.

Y con más pena que gloria, al menos yo, llegamos al castillo y ante su Torre del Homenaje.

Puerta de entrada a esta fortaleza de origen islámico (s.XI-XII) y que perteneció luego a la Orden del Temple, posteriormente fue reconquistado de nuevo por los musulmanes, y tras ser conquistado finalmente por Jaume I perteneció primero a la Orden de Calatrava y a la Orden de Montesa después.

Aljibe y Torre del Homenaje.

Restos de la Muralla Islámica.

Patio de armas, donde han crecido multitud de Altramuz del Diablo anagyris foetida, que por sus propiedades tóxicas se utilizaba para envenenar las puntas de las flechas, y es por eso que este árbol suele ser bastante común en los restos de antiguas fortificaciones del País Valancià.

Muralla Islámica y Santa Magdalena.

Barbacana Islámica.

Con mis dos compis en el Castell de Polpís.

Desde allí arriba volvimos a ver el Caro. 

Y tras visitar el castillo seguimos subiendo, a lo recto hasta las inmediaciones del Alt de la Bota.

Allí arriba, y a pesar de que el cielo, de golpe y porrazo, se encapotó, volvimos a ver el mar...

...y les Columbretes.

Y de la bajada poco puedo reseñar, pues ya fue íntegramente por un camino como este y sin mucha más historia.

Si el Caro había tenido dos zooms en este reportaje, Penyagolosa no iba a ser menos. Con ella cerramos esta galería fotográfica.

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