8 de enero de 2023

Muntanyes de Tivissa-Vandellòs: Molló Puntaire (728 m.) y Punta dels Avencs (722 m.), desde Vandellòs

 Sábado, 30 de abril de 2022

En este 2022 que hemos dejado ya atrás hicimos unas cuantas rutas en nuestra vecina del norte Tarragona. En la primera de ellas nos fuimos hasta Vandellòs, para desde allí realizar una interesante y atractiva circular que nos descubrió una porción de las sugerentes Muntanyes de Tivissa-Vandellòs, y en la que subimos a las cimas del Molló Puntaire y la Punta dels Avencs.



No quisiera empezar a hablar del recorrido sin antes dedicar unas palabras al que fue nuestro compañero en esta ruta, mi amigo Miguel Ángel, que unos días antes, y tras dos años de duros sacrificios, superó la última prueba para poder ser maquinista de tren. Esto, amigo Miguel Ángel, ha sido equiparable a subir a una gran montaña, has tenido que recorrer un largo y laborioso camino, muchas veces demasiado cuesta arriba, y también has tenido que pasar alguna que otra penuria. Pero nada mejor que la privilegiada perspectiva que nos otorga la cima para ver, desde allí arriba, que todo ese sacrificio ha valido la pena. Enhorabuena amigo.




Y que mejor para celebrarlo que haciendo una ruta juntos, esas que tanto han escaseado estos dos últimos años. Elegimos Tarragona, y lo que son las cosas, unos días más tarde Miguel Ángel encontraba trabajo de maquinista allí... ¿Casualidad?, creo que no, es más, opino que estas no existen, yo prefiero llamarlas sincronicidades, ¿que no me creéis?, mientras escribo esto, en el Spotify ha empezado a sonar Synchronicity II de The Police...



Fue esta una ruta de muchos likes y un solo dislike. En el amplio apartado de los likes estarían el boscoso sendero que remonta els Graus de Vandellòs hasta els Dedalts; la sucesión de collados que nos llevaron hasta el laberinto rocoso de les Navaes; el moldeado kárstico de la zona del Molló Puntaire; la exuberancia caliza de la Portella del Xato y su entorno, donde encontramos el único dislike de la ruta en forma de tendido eléctrico de alta tensión. Seguimos con los likes: la cresta hasta la Punta dels Avencs; las maravillosas vistas y el almuerzo que hicimos allí; el jardín botánico que es la curvosa bajada por els Graus de Castelló; los fósiles que fuimos encontrando por el camino; el ver que el despoblado de Castelló ya no lo es; la agradable temperatura con la que hicimos la parte final de la ruta, pues la mañana había sido bastante fría... Un más que merecido like también para los bocatas que nos prepararon en el Casal de Masboquera, directos al top 5 de los bocatas post-ruta de 2022.

Tras dejar las calles de Vandellòs por un empinado asfaltado localizamos el sendero que sube a els Graus de Vandellós y els Dedalts. Rebosaba refrescante verdor.

El empedrado de muchos de sus tramos delata su pasado ancestral.

Poco a poco el bosque va menguando en espesor, lo que nos permite ver las calizas de els Graus de Vandellòs.

Sobre uno de esos espolones calizos parece que hay un mirador. No es de extrañar, viendo las vistas que se nos abrían al norte.

Vemos Vandellòs, con las sierras de Montalt y Llaberia al fondo.

Llegamos a els Dedalts, donde ya pudimos ver la cresta en la que están las dos cimas que ascendimos. En esta foto solo vemos, en el centro, el Molló Puntaire.

Uno de los muchísimos fósiles que encontramos durante todo el recorrido.

Este sector de ruta lo hicimos con público.

Nos dirigimos, en horizontal a media ladera, hacia el Collet del Corral de Ca la Torre.

Ahora si que vemos las dos cimas de la jornada.

Rumbo al Coll de la Basseta, por cómodo camino.

Coll de la Basseta, donde empezamos a subir hacia el Molló Puntaire.

Interesantes barrancos que se abren hacia la vertiente litoral de esta sierra.

Este barranco en concreto que mira Miguel Ángel es el de Llèria. La cresta de enfrente es la de les Moles del Taix.

Tras el collado pasamos por los verdes aledaños de la masía de les Navaes. Seguro que los que la habitaron comerían buenos higos de esa higuera.

Zona muy chula y verde esta, en la que acompañados de jaras...

...encontramos la Font de les Navaes, habitada por cientos de renacuajos y custodiada por una bonita carrasca.

Fue el lugar indicado para hacer un pequeño parón para recuperar energías.

Tras la fuente vino un laberíntico escarceo entre las rocas.

En ocasiones costaba un poco adivinar por donde iba el sendero, lo cual le dio un toque aventurero a la ruta.

La ruta nos estaba gustando cada vez más.

Llegamos a una depresión (por el marcado carácter kárstico del terreno diría que una dolina), donde ya vimos el pináculo cimero del Molló Puntaire.

De camino allí vimos alguna que otra escultura natural, no sería la única.

Cada vez el terreno kárstico se va haciendo más patente.

La pedregosa cima a tiro.

Una pareja, con la que compartimos charla y cámaras en la cima, nos precede.

La parte final tiene una corta cresta que viene de perlas para hacer posados con esta montañas tarraconenses como telón de fondo.

Llegando a la cima, donde ya estaban la pareja catalana.


Contentos, en el vértice cimero del Molló Puntaire. ¿Recuerdas Miguel Ángel, en la crónica de cuando subimos juntos al Molló (otra sincronicidad) de la Creu, lo que puse en el texto de la foto que nos hicimos en el vértice?. ¿No?, pues te lo recuerdo: "...cuando parece que todo está oscuro siempre hay un resquicio por el que se cuela la luz. Seguro que tu, amigo mío, sabes aprovecharla".

Otra foto cimera, la ocasión lo merecía, esta vez con el Mediterráneo de fondo.

Tras un rato de agradable charla nuestros compañeros de cima se marchan por donde subieron...

...nosotros continuaremos en la dirección de la imagen, con la Punta dels Avencs, allá al fondo, como destino.

Aquí cazo a nuestros compis de cima negociando el pequeño tramo de cresta.

Proseguimos con la ruta. Dejamos atrás el Molló Puntaire.

Ponemos la directa hacia la Punta dels Avencs...

...que aparenta cercana, pero un buen trecho nos separa de ella, con la Portella del Xato de por medio.

Entramos en un fascinante karst, que nos regaló más esculturas, ¿un caballito de mar?...

Pero la escultura que más nos gustó fue esta...

...una bonita "foradada".

Posamos arriba...

...y en su interior.

Molló Puntaire y Tosseta del Figuerol.

Sendero entre el karst, rumbo a la Portella del Xato.

Por desgracia esas torres afean bastante el espectacular paisaje...

...que nos ofrece este paso de montaña, la Portella del Xato.

Mas barrancos que caen hacia el Mediterráneo.

El primer paso por la Portella del Xato dio inicio a un ida y vuelta hasta la Punta dels Avencs.

Este ida y vuelta lo hicimos por una cresta en la que coronamos varias cotas, con unos excelentes y aéreos balcones hacia el norte.



Secuencia de la llegada de Miguel y Laia a la Punta dels Avencs, señalada en algunos mapas como la Portella o la Portellada.



Este vértice está situado a 722 metros de altitud.

Vistas hacia la cresta recorrida...

...y el Molló Puntaire.

Litoral mediterráneo tarraconense, con l'Hospitalet de l'Infant y Miami Platja. El punto donde se observan dos torres de alta tensión es la Portella de l'Arturet, desde ella sube un sendero equipado hasta esta cima de la Punta dels Avencs.

Visto lo que vimos, tendremos que hacer más visita a estas Muntanyes de Tivissa/Vandellòs.

Tras el almuerzo un rato de charla y relax en la cima.


Carpe diem.

Tras el agradable rato en la cima desandamos el tramo de cresta...

...para volver a la Portella del Xato...

...y su exaltación caliza.

El caminillo que se descuelga desde la Portella tiene tramos endiabladamente inclinados...

...y va serpenteando entre las diferentes agujas de la zona.

Tomamos nota de ese bosque mixto de umbría, para visitarlo en otoño...

...aunque recorrerlo en primavera también fue una delicia.

Pasamos junto a este farallón, en el que distinguimos algunas oquedades.

Y escoltados por el bosque seguimos con el rápido descenso.

Llegamos a els Graus de Castelló. Vemos la aldea homónima, y también Vandellòs.

Graus de Castelló y Castelló.

Precioso paisaje el de estos Graus de Castelló.

Llegamos a Castelló, que quedó despoblado a mediados del siglo XX, pero que ahora, y gracias a diversas iniciativas, se ha logrado que esta pequeña aldea no caiga ni el olvido ni el abandono.

Pequeña alberca en las proximidades de Castelló.

El sendero de regreso a Vandellòs muy frondoso y muy fresco también.

Llegando cómodamente a Vandellòs.

Entorno agrícola de Vandellòs, con la Moleta de Fatxes detrás . La ruta llegaba a su fin. Nos gustaron estas montañas, será cuestión de volverles a hacer una visita en el futuro.



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10 comentarios:

  1. Y qué te voy a decir amigo Dani !!! Eres hombre de palabra. Ya me comentaste que apuntada quedaba a propósito de mi visita a esta sierra en 2019. Veo que también disfrutaste de la ruta tanto como yo. Además en buena compañía. Precioso este bonito recorrido sobre todo en la umbrías y el cresterío cimero con unas vistas de fábula. Ruta calcada a la mía y que me ha servido para recordarla con cariño. Este año volví a Miami ...Platja pero el tiempo no acompañó y me privó de hacer otra salida por estas montañas como tenía previsto. En su lugar me dediqué al "aburrido" (para algunos) deporte de la pesca; y digo aburrido porque no me comí un torrao, jejeje. Espero repetir este año si todo cuadra y buscar una buena ruta por la Serra de LLaberia o la de Prades . Bueno Dani, un abrazote.

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    1. Hola Paco.

      No solo calcamos tu ruta, sino que además seguimos el mismo track y por si fuera poco he clavado algunas fotos de las que aparecen en tu crónica jeje. Repasando de nuevo tu crónica me arrepiento ahora de no haber profundizado más en Castelló, pero bueno habrá tiempo de visitar mejor esta pequeña aldea, ya que estas Muntanyes de Tivissa-Vandellòs nos gustaron tanto que seguro que volvemos por allí (ese sendero equipado que sube a la Punta dels Avencs puede ser una buena excusa).
      ...Y que decir de Tarragona, una gran tapada a nivel excursionista, la ruta que nos marcamos la semana siguiente Laia y yo en les Muntanyes de Prades fue memorable (estoy preparando la crónica), y luego en otoño el amigo David Bonilla y yo nos marcamos un rutón cinco estrellas en el Montsant... Bueno, ya habrás visto en el resumen de 2022 que hemos ruteado bastante por Tarragona.
      Como hombre de acción que eres, amigo Paco, no veo yo que te pegue mucho esa faceta de pescador jajaja.

      Un abrazo fuerte.

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  2. Pedazo de ruta guapa, copón.
    Pues me apunto a esa enhorabuena a Miguel Ángel, ese pedazo maquinista de ese medio de transporte que tanto me gusta... otra sincronicidad... y por supuesto he leído la ruta escuchando a The Police, y la canción que has recomendado. Hay que sincronizar... como dice Extremoduro: sincronicemos los latidos con la boca y tic tac tic tac.
    Los tediosos tendidos eléctricos, y necesarios de todas todas... para comunicarnos, para leerte, para viajar en tren... lo que si deberían estar TODOS, sin excepción, protegidos para evitar la muerte innecesaria de aves necesarias... tan necesarias como nosotros... pero eso hay quien no lo quiere ver... hay quien sólo ve necesario el dinero... y lo único que necesitamos es vivir, sin tantas "necesidades".
    Esta ruta me ha encantado, de veras. Que buenas formaciones y que buenas vistas tiene. Me alegro mucho por ti, por Laia y por Miguel Ángel.
    Un abrazo, necesario, sincronizado, y muy buen año, montañero y musical, y si es pajarero y emocional, mucho mejor.
    Salud.

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    1. Pues como Leño... o Albertucho... yo también me subo al tren. Mira que siempre me había parecido un medio de transporte muy romántico (obviando AVES y demás, claro está), pero ahora que tengo el privilegio de que mi mejor amigo sea maquinista y me cuente de primera mano como es el mundillo ferroviario desde dentro me parece aún más fascinante.
      Completamente de acuerdo en lo que comentas de proteger a las aves de los tendidos eléctricos... pero si a las compañías eléctricas no les importa sangrarnos a nosotros los humanos con precios abusivos, les van a importar los pobres pajarillos, es triste pero real.
      Me pareció curioso como los collados, que históricamente siempre se han usado para unir valles o pueblos mediante caminos ancestrales o puertos de montaña, también se hayan aprovechado en esta sierra para pasar ese tendido eléctrico.
      Una de las cosas que hice en este 2022 fue no informarme demasiado de las ruta inéditas que iba a hacer, así el factor sorpresa es mucho mayor. En estas montañas tarraconenses también aplicamos el plan y nos salió redondo, pues nos llevamos una grata impresión de todo este conjunto calizo. Además fue todo un acierto hacer la ruta en primavera.

      Abrazo fuerte para usted y para Isabel.

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  3. Hola Dani.

    Lo primero es darle la enhorabuena a Miguel Angel, bueno la virtual, pues, otra de las cosas muy gratas que tuvo la visita que te hicimos, fue que Miguel Angel se pasara por el Lapsus y nos conociéramos y nos echáramos alguna risa que otra, entre tanta cerveza, jajaja.

    En cuanto a la ruta, menuda explosión de caliza, además el verdor de los prados y esas fotos donde se ve la cercanía del mar la hacen muy potente. Como dices arriba, también echo en falta alguna foto o historia de ese despoblado de Castelló. Ya sabes que me encantan las historias de estos antiguos núcleos de población.
    Como bien dices, Tarragona es la gran tapada, y yo por ejemplo, no conozco mucho pero sí algo, y ya con la parte de Els Ports y la zona del Monsant que si llegamos a conocer Maru y yo, me parece otro de esos destinos para visitar y recorrer que no defraudan.

    Un abrazo.

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    1. Hola Toni.

      Como me mola leer como te refieres al Lapsus como si fuese algo familiar, señal de que te caló hondo 😉 Debería haber un Pub Lapsus en cada pueblo.

      Y vaya con Tarragona. Hasta ahora, a nivel excursionista solo la conocía de el Port y poca cosa más, pero ha bastado profundizar un poco por allí en este pasado año para descubrir el enorme potencial montañero que tiene esta provincia. Auguro unas cuantas ruta más por allí en este 2023.

      Y si que es verdad que deberíamos habernos dado un garbeo por Castelló y haber hecho más fotos, pero mira, no recuerdo el porqué no lo hicimos, y también es verdad que debería haber puesto algún enlace sobre este aldea.
      Pero nunca es tarde, te adjunto este artículo de la Vanguardia, que me pareció interesante:

      Castelló

      Un abrazo.

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  4. Hol Dani,

    Antes de nada, felicitar a Miguel Ángel, que se lo merece tras todo el trabajo y sacrificios qu ha tenido que realizar para conseguirlo.

    La zona que recorristeis es espectacular, la ruta me recuerda mucho a una que realicé allá por el 2017, pero a la inversa, pero en mi caso partiendo de Castelló y sin hoyar La Punta del Avencs, ya que al llegar a la Portella del Xato un fuerte viento casi me tira al suelo y se lleva volando el móvil, así que decidí que no era prudente acercarme hasta allí yo solo.

    Cuando yo fui, en Castelló aun estaban restaurando muchas casas y como dices, merece la pena darse un garbeo, que la aldea es muy bonita. Si te pasas por el blog creo que tengo unas cuantas fotos del pueblo colgadas.

    Como dices, el único pero son las torres de alta tensión, pero el resto de cosas de las que puedes disfrutar hace que sea un "mal menor" tener que lidiar con ellas un rato.

    Por cierto, ese extra de senderillos para llegar hasta Vandellòs fue todo un acierto, merece la pena ese par de kilómetros más por esos preciosos caminos.

    Un abrazo.

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    1. Hola David.

      Recordaba tu crónica de cuando estuviste por estas montañas, y le he vuelto a echar un vistazo, si que me arrepiento de no habernos detenido unos minutos en visitar un poco más a fondo Castelló
      El viento parece que suele venir de serie en todas esas comarcas cercanas a la desembocadura del Ebro, y ese día tuvimos suerte nosotros, ya que fue la excepción y no sopló ni pizca y pudimos disfrutar a lo grande de esta ruta de celebración, que todo sea dicho de paso estuvo a la altura de ella. Esmás, diría que superó nuestras expectativas.

      Un abrazo.

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  5. Hola Dani.

    Las montañas, no, pero, esa zona costera, la tenemos colonizada los maños, raro, es el que no tiene un apartamento en la playa, sobre todo en las poblaciones de Salou, Cambrils, la Pineda y Miami Playa. aunque nosotros íbamos a Sant Carles de la Rapita, que es donde teníamos familia.

    Sin duda, una buena elección, realizar la ruta en la primavera, el terreno está muy verde y contrasta con la caliza. A mí, como soy de secano e interior, lo que siempre me impacta de estas montañas, cercanas a la costa, son las vistas hacia el mar.

    Ya me fijé, en el resumen del año, que habías pateado mucho la provincia de Tarragona, así que, poco a poco, iré disfrutando de los fantásticos rincones, que ofrece a nivel montañero.

    Salud y montaña.

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    1. Hola Eduardo.

      Pues en total fueron seis rutas las que hicimos en Tarragona en 2022, y en este pasado mes de enero hicimos otra por allí, y más que caerán, pues ya hay algunas cositas apuntadas en la agenda. Esta provincia le pasa una cosa similar a Alicante, que tiene colgada la etiqueta de sol y playa y tiene un potencial montañero y excursionista tremendo.
      Jeje, no sabía yo eso de que a los maños os daba por ir a veranear por esa zona, la verdad es que para el que le guste ese tipo de turismo es una zona bien chula.
      Y desde luego que acertamos con la época idónea para ir a hacer esta ruta, pues el verde primaveral resaltaba más si cabe su atractivo. También debe ser interesante ir por allí en otoño, y disfrutar de los colores de esos bosquecetes de arces.

      Un saludo.

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