Tossal de Mollet

Domingo 3 de abril de 2011


Inicialmente el plan previsto para este fin de semana era ir a hacer íntegramente el PR-CV 276, sendero que une las poblaciones de Ayódar y Villamalur en la Sierra Espadán, pero ayer a ultima hora cambiamos de planes y decidimos variar un poco e irnos a la también cercana Sierra de Borriol para realizar una ruta circular alrededor de una de sus montañas mas carismáticas: el Tossal de Mollet.

El punto de partida de esta ruta es la enorme y bonita Ermita de San Miquel, llegamos a ella por la carretera CV-160 que une las poblaciones de Sant Joan de Moró y Vilafamés, el camino de tierra que conduce a ella esta a mano derecha y esta bien indicado, no hay perdida.
Nos llama la atención ver a un numeroso grupo de gente caminando por la carretera, luego cuando llegamos a la ermita vemos que están preparando bocadillos y montando tenderetes y mucha parafernalia, más tarde nos dicen que hoy se celebra una romería que sube desde Vilafamés a esta ermita, acto enclavado en las fiestas de Sant Miquel de dicha población, eso significa que encontraremos cantidad de gente durante toda la caminata.

Ermita de Sant Miquel

Justo detrás de la ermita encontramos la senda que nos conducirá hasta la primera parada del día: el Tossal de Mollet, esto es ir directo al grano.
Esta senda es en continuo ascenso, aunque no presenta ninguna dificultad, solo algún tramo donde el agua ha formado alguna regata y un par de subidas con un poco mas de pendiente, todo ello envuelto de matorral bajo y pequeñas encinas.

La ermita de Sant Miquel desde las primeras rampas

Quizás el tramo con mas pendiente de la subida

Llegando a la cima

A hora de almorzar alcanzamos la cima del Mollet, esta montaña no es propiamente un pico, sino una gigantesca y ancha loma, llegamos al lugar donde esta el poste de la cima, pero que no es el punto mas alto, para ello tenemos que caminar unos metros por un poco definido sendero hacia el norte donde se encuentra el hito que indica la cota mas alta del Tossal, 704 m.s.n.m., cerca de allí hay un mirador donde las vistas son buenísimas tanto hacia el mar como hacia el interior, lástima que el día este nublado, mientras almorzamos vemos allá abajo en la distancia la romería dirigiéndose a la ermita.

Punto mas alto del Tossal de Mollet

El Desierto de las Palmas envuelto en un mar de nubes

Lugar del almuerzo

A mitad del camino de la cima y el lugar del almuerzo observamos la ventana que os muestro en la cabecera de esta crónica, así que no puedo resistir la tentación y jugándome un poco el tipo decido trepar a ella, el pequeño riesgo vale la pena, las vistas sobre y desde ella son brutales y vertiginosas.

Ventana de Mollet

Como una cabra

Interior de Castellón desde la ventana

Después de un distendido almuerzo decidimos que es hora de continuar, volvemos al poste cimero y comenzamos a bajar, durante el descenso aparte de otro buen mirador también encontramos las ruinas de lo que en su día fue un poblado íbero, en ese momento hace acto de presencia una  ligera lluvia, aunque la cosa no pasa a mayores.

Restos de un poblado íbero

El día gris nos privó de unas buenas vistas

Llegamos a un punto donde finaliza la senda y empezamos a caminar por el poco grato asfalto que nos conduce al GR 33, sendero aun desconocido para nosotros, navegaremos un buen rato por él, aunque este tramo no es muy atractivo que digamos, ya que es camino asfaltado en su totalidad, pero lo compensa la visita que hacemos al Mas de Panero (Masía del Panadero) y sobre todo al Pou de Mollet, un profundo pozo a la antigua usanza, con polea, cadena y cubo, no podemos resistirnos a sacar con estilo un cubo de su limpia y refrescante agua.

Mas de Panero

Pou de Mollet

Por fortuna el asfalto termina pronto y encontramos una bonita senda en descenso por la que caminaremos hasta que  una majestuosa encina nos sirve de antesala para visitar la otra ermita de la ruta, la de Sant Vicent, perteneciente a Sant Joan de Moró, una moderna construcción muy bien habilitada para pasar un día en familia.
Cerca de allí esta la Font de Ros (Fuente de Ros) donde volvemos a abrevar.

Camino de Sant Vicent

Preciosa y gran encina

La ermita de Sant Vicent y detras el Tossal de Mollet

Reloj de sol de Sant Vicent

Font de Ros

Ahora solo nos queda llegar al Barranc del Molí del Roig (Barranco del Molino del Rojo) donde hallamos la senda por la que normalmente se empieza a subir al Mollet y que tiene algún tramo realmente hermoso.
Un par de subiditas mas y llegamos de nuevo a la senda por la que ya habíamos subido esta mañana desde la ermita de Sant Miquel.

Efectos de la erosión

Dos metros de esparrago, casi ná....

Senda de regreso a Sant Miquel

Welcome to the jungle

Para no repetir camino, damos un pequeño rodeo para volver a la ermita, entonces vemos el ambiente festivo que se ha montado en ella  cantidad de gente, la escandalosa tómbola, tenderetes de  marroquinería, artesanía, juguetes, antigüedades, globos, golosinas, repostería....vamos, una fiesta patronal con mayúsculas, a nosotros acostumbrados a la tranquilidad de las montañas cuando salimos de ruta esto nos sorprende bastante y nos damos un garbeo por allí pero como somos más de bar nos montamos en el coche para dar por finalizada esta entretenida ruta y buscar la merecida y reparadora cerveza.

Ambiente festivo en la ermita de Sant Miquel

Postdata:


Esta ruta ha sido la ultima aventura de nuestro buen amigo el plátano viajero.
Ha viajado desde Canarias hasta Betxí, la semana pasada se hizo con nosotros los 35 kilómetros de Betxí-Espadán y hoy en el Tossal de Mollet ha hecho su gran y ultimo viaje, te echaremos de menos, amigo.


Moraleja: Después de cada ruta hay que asegurarse que se vacían bien las mochilas.

El plátano viajero yacerá para siempre en el Mollet

DATOS DE LA RUTA:

Senderistas: Alberto, Dani, Gema, Graciela y el plátano viajero.

Longitud: 11'1 kilómetros

Altura mínima: 221 metros

Altura máxima: 704 metros
Desnivel positivo acumulado: 645 metros
Pendiente máxima en ascenso: 37'2%
Tiempo: 4 horas 11 minutos en total
Dificultad: baja-media