7 de diciembre de 2014

Barranc dels Horts, Caminando Entre Gigantes

Domingo 9 de noviembre de 2014

Hoy os voy a mostrar uno de los tesoros a nivel botánico de la provincia de Castelló, y por que no decirlo, del País Valencià, se trata del Barranc dels Horts en Ares del Maestrat, un fantástico robredal que como bien indico en el título del post nos permitirá pasear junto a grandes ejemplares de roble.
Gustad de acompañarnos a Laia, Eva y a mi por este mágico enclave del siempre espectacular Alt Maestrat.






Pero antes de empezar con la crónica resaltar que la finca en la que se encuentra el Barranc dels Horts es propiedad de la Fundació Caixa Castelló, por lo que si tenéis previsto visitarlo deberéis dejar constancia de ello avisando previamente llamando a uno de estos dos números de teléfono: 964 23 26 90 o 964 23 25 51 donde os tramitarán un permiso para visitar el paraje.


Nosotros al equivocarnos de camino nos saltamos la caseta del guarda (aunque cuando nos fuimos estaba cerrada), así que en el primer sitio amplio que vimos para aparcar dejamos el coche y empezamos a andar, lo que íbamos a ver nos iba a encandilar desde el principio, y es que mirásemos donde mirásemos estábamos rodeados de grandes robles, tan entusiasmados íbamos con el bosque que a la que nos dimos cuenta nos habíamos salido cientos de metros del track que me había descargado y estábamos paseando hipnotizados y por fuera de cualquier sendero o camino por una zona donde los robles ya cobraban dimensiones gigantescas.


Regresamos sobre nuestros pasos y el track nos iba a meter de lleno a caminar por dentro del mismo Barranc dels Horts, al gran atractivo de caminar entre grandes árboles se le iba a sumar el hacerlo, y durante un largo tramo, encajonados entre las paredes y la vegetación salvaje del barranco.

Salimos del barranco atravesando un joven carrascal, como veis hoy todo quedaba en familia, la de los quercus, siendo los rubur los que volvían a ganar el absoluto protagonismo de nuevo durante un buen tramo donde pudimos ver algunos ejemplares realmente enormes.

El camino que seguíamos ahora nos lleva ahora a un altiplano carente de arbolado cercano al Tossal d'Orenga, y donde lo más llamativo además de las amplías vistas, son los largísimos ribazos que delimitan las parcelas y los grandes abrevaderos para el ganado.

Dejamos la subida al Tossal para otro día y empezamos a seguir en descenso un hormigonado que nos llevará a la parte más espectacular del recorrido, y es que los robles que vamos a encontrar ahora iban a ser descomunales y majestuosos, y fuimos saliéndonos del camino para ir a ver unos y otros, como por ejemplo el monumental Roure Pare, el más anciano habitante del Barranc dels Horts, estar junto a él hace parecer insignificante nuestro paso por este mundo comparándolo con su longevidad, pero antes de visitar a este venerable anciano también nos deleitamos ante un nutrido grupo de grandes ejemplares, donde la magia casi se podía palpar...la cámara no es capaz de plasmar toda la belleza del lugar, incluso el ojo humano tampoco es capaz de ver todo lo que habita por allí, como bien acertó a decir una señora, que como nosotros paseaba absorta por ese bosque, un lugar para liberar la mente y simplemente dejarse llevar...

Así, siguiendo el camino, y acompañados por los robles regresábamos al punto donde habíamos dejado el coche y dábamos por finalizado este precioso recorrido por un paraje cautivador, el Barranc dels Horts, del que nos fuimos encantados, hemos tardado en visitarlo, pero seguro que a partir de ahora le haremos más visitas en el futuro.


Un saludo a tod@s.





Este viejo roble mochado nos da la bienvenida al Barranc dels Horts

A partir de ahora, miremos donde miremos veremos asomar buenos ejemplares de roble

La noche anterior estuvo lloviendo y formó el charco del que bebe Laia, afortunadamente, y aunque hacía bastante frío, amaneció un día perfecto para visitar este paraje

Los robles que vamos encontrando son enormes, pero van apareciendo ya algunos que destacan sobre los demás

El bosque nos atrae hacia él

Las ramas de los robles nos permitirán tomar contraluces come este

Laia entrando en un tramo realmente cautivador

Guauu!!!, en Betxí no tenemos árboles como estos!!!, a qué sitio más bonito me habéis traído!!!

Eva también se funde con el bosque

Entramos de lleno en el cauce del barranco, las raíces de este roble le ganan la partida, prácticamente engulle, a la roca

Este otro nace directamente de las calizas paredes del barranco

El barranco tiene una belleza,...

...salvaje
Seguimos avanzando por el barranco

No dudamos en posar y empequeñecer aún más junto a estos mastodontes

El musgo reposa sobre el tronco de este roble, que a su vez reposa sobre una roca

Los robles no fueron los únicos gigantes que vimos, buen ejemplar de sapo común (bufo bufo)

¿Ya os había dicho que la vegetación era salvaje?

Ramaje espectacular

Otro bonito contraluz

A ambos lados del barranco podemos ver grandes robles, como estos tres

No solo íbamos a disfrutar de los árboles, las paredes del barranco, también dignas de mención

Ya fuera del barranco el bosque vuelve a ganar protagonismo...

...y nos regala rincones como este

Idílico

Un lugar para sentarse y simplemente sentir, así lo hace Eva
Penyagolosa, el Gegant, entre gigantes

Bonito ejemplar de tres troncos

Extensas vistas sobre l'Alt Maestrat y l'Alcalatén

Nos asomamos a estos cortados, ante la presencia del Tossal d'Orenga

Típico paisaje de altura de l'Alt Maestrat, si nos fijamos bien podemos apreciar la cumbre en la distancia del Tossal de la Nevera de Catí

Vacas pastan a sus anchas en un prado, en un claro entre el robredal

Tras un buen tramo sin arbolado volvemos a reencontrarnos con los robles

De nuevo a contraluz

El paisaje es magnífico

Entramos en el bosque donde más gigantes hay concentrados, como este

Magia pura



Tardamos en visitarlo, pero no nos hubiésemos ido de este lugar

Estos robles parecen cobrar vida, como si fuesen Ents...
Este incluso parece que tenga las dos piernas, y en cuanto menos nos lo esperemos, eche a andar

Como en un bosque encantado
Sobran las palabras

Vamos siguiendo senderillos, en busca de nuevos gigantes...

...y encontramos alguno con proporciones realmente descomunales...

...así lo vemos desde la distancia

Font del Barranc dels Horts

Otro trío

Menudo porte

Y llegamos al colofón del recorrido...

...el Roure Pare, majestuoso...

...monumental...

...agotaría todos los adjetivos

Su enorme tronco y su ramaje abarcan una buena extensión de terreno, el Roure Pare gran colofón a este paseo entre gigantes







14 comentarios:

  1. Hola Dani!
    Estos robles tienen que tener bastantes años,aqui en Cazorla visite unos Tejos milenarios,son una pasada.Saludos amigo.

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    1. Hola Juan Carlos.

      Pues según me dijo un amigo mío, algunos de estos robles ya andaban por allí en tiempos de Jaume I, así que imagínate...
      He buscado fotos de los tejos milenarios de los que me hablas, si que son impresionantes de verdad, a ver si algún día tenemos la suerte de verlos en persona.

      Un saludo.

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  2. Hola Dani
    Majestuosos, una maravilla y de todos los tamaños (verdaderamente mas bien grandes que pequeños) seguro que un gustazo caminar junto a ellos y poderlos observar de cerca.

    Un abrazo
    Jose
    TROTASENDES BENICALAP

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    1. Hola Jose.

      La verdad es que la sensación de estar caminando por allí no se puede describir con palabras, una ruta que os recomiendo encarecidamente.

      Un abrazo.

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  3. Hola Dani, que pasada de bosque he seguro que pensaste, como es que aún no había venido por aquí.
    En mi opinión es una de las mejores joyas naturales que tenemos y toda una suerte el que haya llegado así a nuestros días.
    Caminar entre esos gigantes parece que te transporte a otra época muy muy lejana, es un de esos pocos lugares que parecen conservar algo de magia.
    Saludos

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    1. Hola Jose.

      Y tanto que lo pensé, teniéndolo tan cerca de casa y que no lo hubiera visitado aún, pero nunca es tarde si la dicha es buena jejeje...
      Mira que tenemos tesoros naturales en la provincia, pero esa sensación de magia que como bien mencionas, no la había sentido en ninguno de ellos.

      Un saludo.

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  4. Hola Dani.

    Guuuuuaaaauuu!! como desprende la entrada lo que yo llamo la magia de los Quercus! De la visión de tantas ramas y troncos gordos le pasa factura a los que estamos leyendo la entrada, y entra una sensación de podería, grandeza y monumentalidad increíble.
    Algunas veces me comentas que de botánica controlas poco. La verdad que tiene que acompañar que por la sierras que andes haya tesoros y sorpresas botánicos, y en este caso, este barranc es un tesorazo, de los que hace enamorarte de estos árboles, y querer seguir descubriendo más sorpresas vegetales.
    Otro sitio que me apunto para visitar.
    Me hubiera gustado ser Laia en esta entrada.
    Un abrazo.

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    1. Hola Toni.

      Pues si leyendo la entrada te han dado todas esas sensaciones, imagínate estando, viendo y respirando allí...y Laia, pues opino que los animales tienen un sentido especial, y seguro que ella pudo captar y sentir cosas en este robredal que nosotros los humanos no somos capaces de percibir.

      Un abrazo.

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  5. ¡Hola Dani! Preciosa ruta. Aún guardo con admiración las imágenes de esos gigantes milenarios tan preciosos y magníficos. Una maravilla de ruta que vale la pena visitar. Espero que ese rincón privilegiado de la Comunidad Valenciana se conserve durante muchos muchos años para que las generaciones venideras puedan disfrutar de semejante maravilla de la naturaleza. Por cierto, se te echó de menos en el Encuentro Blogger.

    Un abrazo.

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    1. Hola Emilio.

      Es esperamos, que este lugar tan mágico siga igual de bien conservado y limpio como lo encontramos, creo que en ese sentido le beneficia que haya que pedir permiso para visitarlo y que sigan limitando el número de visitas al día.
      Respecto al encuentro, como estoy de nuevo en el sector citrícola no iba a saber hasta el sábado si ese domingo iba a trabajar o no, puesto que ahora la campaña está en su punto álgido, y opté por no apuntarme, al final no trabajé, pero preferí hacer una ruta más íntima, espero poder acudir el año que viene.

      Un abrazo.

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  6. Hola Dani! Vaya robles!! Mi árbol tótem!! que bonito todo el paraje..desconocía su existencia, a tenerlo en cuenta, desde luego! Descomunal el Roure Pare...que pasada, cuanta sabiduría hecha madera y savia, un gran ejemplar. Y del sapo , que te digo....jodo..todo un batracio por su camino, jajajaja... genial la entrada, las fotos y la ruta. Me ha gustado mucho!! Salud.

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    1. El mío es el alcornoque, todo queda en familia jejeje...¿No conocías este lugar?, pues no dudéis en ir a visitarlo en cuanto tengáis ocasión...allí se respira magia, en serio.
      El Roure Pare...pues según me dijo mi colega Jesús, ya estaba allí en tiempos de Jaume I, así que imagínate...
      ¿El sapo?, calla, calla, que hubo un momento de tensión, que vi a Laia detenida mirando algo fijamente, y era el sapo, y lo tenia a centímetros del hocico, y el sapo se iba hinchando, imagínate si le escupe veneno...

      Salud y monte!!!

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    2. Por cierto Ana, si vais a visitar este paraje, no dudéis al acabar en entrar a comer al restaurante de la Ermita de Sant Pau, que está cerca de allí, yo entré a por cervezas y la pinta que tenía la comida era excelente, y olía muy bien, luego un compi del curro me lo confirmó, se come de rechupete, además allí hay una hiedra cuyo tronco, agárrate, tiene 400 años!!!, y esta declarada como árbol monumental.

      Un saludo!!!.

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