13 de marzo de 2022

Moleta d'Aitana (1468 m.) y Aitana (1549 m.) por el Arran dels Esquiladors - Passet de la Rabosa - Penya Forata

 Sábado 2 de octubre de 2021

Después de un verano en que las rutas gordas de montaña transcurrieron exclusivamente en Aragón y Andorra volvíamos a patear montañas valencianas. Nos fuimos a uno de nuestros destinos favoritos, Alacant, para subir por segunda vez a su montaña más alta, Aitana. En la anterior visita, tras subir a la cima recorrimos parte del cordal oriental de la sierra, en esta ocasión llegamos a la cima tras haber recorrido la parte occidental de la cuerda, habiéndonos montado en ella mediante el estético paso del Arran dels Esquiladors, y coronando también la Moleta d'Aitana.



La cima de Aitana, el Passet de la Rabosa, la Penya Forata... fueron puntos comunes con la ruta de la anterior visita, en 2016. Pero esta vez la mayor parte del recorrido fue inédito para nosotros, aunque si quisiéramos buscar más paralelismos con aquella ruta se los encontraríamos fácilmente, como por ejemplo que en 2016 iniciamos la excursión en la Font de Partagat, y en 2021 lo hicimos partiendo desde otra fuente, la Font de l'Arbre. También tienen en común ambas fuentes que se encuentran en la vertiente norte de Aitana.

Tras seguir inicialmente una buena tacada del camino que conecta la Font de l'Arbre y el Port de Tudons nos desviamos siguiendo unas trochas que nos llevaron hasta el primero de los muchos pozos de nieve que vimos en esta jornada alicantina. A partir de allí ya nos tuvimos que inventar el camino para llegar a la base de las paredes de la Moleta d'Aitana y encontrar su punto débil, una marcada diagonal herbosa que ya hacía rato que habíamos localizado visualmente y a la que se la conoce como l'Arran, o Arranc, dels Esquiladors y que supone una manera muy elegante de subirse a la grupa del cordal de Aitana. Ya montados en la cuerda fuimos remontando, por cómodas pendientes, y bien acompañados por el mar de nubes que había instalado en el sur, hasta la cima de la Moleta d'Aitana, una de las montañas más altas de la provincia, y que sin embargo es toda una "outsider". Tras darle el reconocimiento que merece esta cima, recreándonos un buen rato allí arriba, retomamos el pulso al cordal, pues había que seguirlo para llegar a la todavía lejana cima de Aitana. El primer tramo de cresteo fue entretenido, que si tres collados por aquí, que dos cotas por allá, el mencionado mar de nubes... Pero se tornó insufrible cuando cambiamos el mar de nubes por el mar de hierros, los de la valla de las instalaciones militares. Mira que el paisaje de cortados que caen hacia el norte es guapo, pues la valla, y todo lo que hay dentro, lo consigue enturbiar. No disfruté nada de este tramo, y noté que Laia tampoco lo hizo, además, no veáis la de moscas que habían, y lo molestas que estaban, aunque por otra parte es lógico que hubiesen tantas, pues ya sabéis que es lo que más atrae a las moscas... Superada esta infamia llegamos a la cima "civil" de Aitana, en la que, y a pesar de la cercanía de la valla, ya se puede sentir la verdadera esencia montañera de esta cima, hoy engalanada por ese baile de nubes que limita las vistas, pero que siempre da un toque especial a las cimas.

Font de l'Arbre, situada a unos 1160 metros de altitud. Se accede a ella mediante una estrecha, serpenteante y a tramos muy empinada, carreterilla, y que parte desde Confrides.

Andamos un par de kilómetros por este carril, con la Moleta d'Aitana bien visible desde el principio.

Poco a poco nos fuimos acercando a las estribaciones más occidentales de la Serra d'Aitana, en cuyas paredes ya distinguimos...

...la diagonal del Arran dels Esquiladors, nuestra llave de acceso para llegar a la parte alta.

Dejamos la comodidad del camino para empezar a remontar por unas trochas. Llegamos a este bien conservado refugiete, del cual desconozco su utilidad.

De camino al Arran pasamos por una especie de eras, las cuales intentamos pisar lo más mínimo.

Seguimos remontando, y echando la vista atrás vimos la Serrella...

...con su cima estandarte, el Pla de la Casa, intentando emerger de entre las nubes.

Y trochea que te trochea llegamos hasta el Pou de Neu, o Clot, del Banc dels Esquiladors, uno de los muchísimos neveros y ventisqueros que hay esparcidos por esta vertiente norte de Aitana, y el primero de todos si cogemos la sierra desde Poniente.

Tras el pozo de nieve nos espera el Arran, cuya diagonal cada vez se definía más.

Las paredes son tan altas que eclipsaban al sol, por lo que hicimos esta subida a la sombra.

Otro de esos lugares a lo que las fotos no le hacen verdadera justicia.

Buscando el mejor paso para aproximarnos y acceder a él, entre piedras y erizones.

Impresionante paisaje el que se nos presentaba. Nos moríamos de ganas de llegar al Arran y remontarlo.

Laia me fue marcando, como de costumbre, el mejor camino.

Apuntar que nosotros hicimos la aproximación, digamos, más limpia. A posterior vi otros tracks que llegaban a las paredes trochemocheando más, y además pasando por otros pozos o ventisqueros y además viendo tejos. Tomo nota ✎📓

Y llegamos a lo que es el Arran propiamente dicho. Al principio fuimos lo más pegados posible a las paredes...

...pero luego, cuando menguó la inclinación de la ladera herbosa ya caminamos por el mullido verde.

El Arran dels Esquiladors, un paso realmente bello y elegante...

...al que podríamos llamar perfectamente la Gran Diagonal de Aitana.

Mientras, el Pla de la Casa seguía con su toma y daca particular con las nubes.

Nos colocamos bajo esta gigantesca bóveda...

...tras la que seguía la parte final del ascenso por el Arran.

Valía la pena ir mirando atrás...

...y contemplar toda la subida por la diagonal herbosa, y también para calibrar mejor la altura de las paredes.

Una delicia este Arran del Esquiladors. La única pega que le pondría es que se hace corto.

Superado el Arran encontramos este balcón hacia los roquedos, runars (pedreras) y precipicios de la cara norte de Aitana. Ahora tocaba buscar la manera de ganar la cuerda...

...lo haríamos mediante unas sencillas trepadas.

Arriba en el cordal enganchamos con el sendero que viene desde el Port de Tudons, y que nos tenía que llevar hasta la cima de la Moleta...

...la cual aún se nos mostraba lejana.

De vez en cuando nos fuimos saliendo del sendero para asomarnos a los precipicios que caen al norte.

En la más dócil vertiente contraria un mar de nubes cubría todas las comarcas y sierras más sureñas.

De ese mar de nubes solo lograba emerger la cima de Aitana...

...aunque hubo momentos, como cuando llegamos a la cima de la Moleta, en las que las nubes casi conseguían engullir al gigante alicantino.

Moleta d'Aitana, 1468 metros.

Posando contentos en la cima.

Mirada hacia la práctica totalidad del cordal que habíamos recorrido hasta llegar allí.

Y otra hacia la Vall de Guadalest y la Serrella.

Aitana vencía, como buen gigante, su lucha con las nubes, pero no era la única...

...pues que otro coloso alicantino, el Puig Campana, también lograba despuntar por unos momentos de ese lecho algodonoso.

Tras habernos recreado como toca en la cima continuamos con la marcha. La Moleta nos mostraba nuevos y atractivos matices, como esta ceja caliza...

...de la que nos tuvimos que bajar mediante este destrepe.

Tocaba centrarse ya en el siguiente objetivo, Aitana, que aunque bien visible, aún quedaba bastante lejos.

Entre la Moleta y Aitana nos aguardaban varios repechos y collados. Superado el primero de ellos vimos así esta sugerente silueta de la Moleta d'Aitana.

El sendero, en todo momento perfectamente dibujado sobre la cuerda...

...incluso con tramos que pasaban más pegados a la más abrupta vertiente norte de Aitana.

Tras coronar esta cota nos esperaba la bajada al collado previo a la subida final a Aitana.

En este collado se nos presentó la opción, muy sugerente por cierto, de abandonar el cordal...

...quizás hubiese sido lo más acertado, pues aunque el paisaje era espectacular...

...el ir caminado junto a la valla, por un terreno nada cómodo, y además con el añadido de las moscas no fue muy gratificante. Sinceramente se me hizo muy pesado este tramo, en el que hice muy pocas fotos..

...una de ellas al vértice secuestrado #freeaitana Lo más cerca que se puede estar, sin tener que pedir permiso al Ministerio de Defensa, de la verdadera cima de Aitana...

...aunque sinceramente prefiero disfrutar de la cima secundaria, la cual ya teníamos a la vista, sin estar rodeado de hierros y concertinas.

Pero olvidémonos de toda esa ferralla y disfrutemos del espectacular encanto calizo de Aitana.

Dejada atrás la base llegamos a una cota que marca 1552 metros...

...pero la que cuenta como cima, supongo que por razones de prominencia, es la que tenemos allá delante...

...es la que tiene el hito cimero y marca 1549 metros. Posamos contentos allí. La foto nos la hizo Òscar, única persona que vimos durante toda la ruta. Me contó que era catalán, de l'Empordà, y que, casualidades de la vida, en su juventud estuvo viviendo unos años en Betxí. Mantuvimos una agradable charla en la cima, hablamos de montañas (lo que más), de conocidos comunes en Betxí, y también de otras cosas, como por ejemplo de la creciente catalonofobia existente en muchos puntos del estado.

Las nubes volvieron a entrar en esos momentos, y nos limitaron las vistas. Espectacular vertiente norte de Aitana hacia la Moleta...

...y no menos espectacular hacia la Penya Alta y el cordal que recorrimos en 2016.

A falta de vistas a larga distancia nos centramos en cositas más cercanas, como la Penya Forata...

...o el Penyó de Rapel. Si alguna vez subís a Aitana desde la Font de Partagat no dudéis en desviaros para subir a su punta, obtendréis un fotón como este.


Tras la cima vino un tramo de terreno conocido: les Simes de Partagat (qué poco se habla de este sistema kárstico/tectónico de Aitana); el estrecho y técnico Passet de la Rabosa; la altiva Penya Forata, a la que en un principio no tenía pensado subir, pues me encontraba cansado, pero al final me engorilé y si que subí; el soberbio paisaje de la vertiente norte de Aitana; la Font de Forata... Fue en esta fuente donde dejamos el itinerario que viene desde la Font de Partagat y tomamos un camino forestal que ya no dejamos hasta llegar al punto de inicio, y que nos brindo algó de lo que la ruta estaba careciendo, bosque y arbolado, además de vistas hacia las calizas que sostienen la cuerda y el paso por diferentes pozos de nieve, que redondearon una nueva gran jornada de montaña, y van unas cuantas ya, por sierras alicantinas.

Desde la cima enfilamos el itinerario más común que sube desde la Font de Partagat. Vemos perfectamente la Penya Alta, así como las grietas y simas de esta zona de les Simes de Partagat.

Os acerco con el zoom una de esas fascinantes fracturas en el terreno.

Nuestro camino bajó a una de esas grietas...

... y la remontó por la vertiente opuesta para dirigirse al Passet de la Rabosa, que es la V que se ve a la derecha de la foto.

Vemos mejor aquí la profundidad de esta grieta aledaña al Passet de la Rabosa, así como la que sube por la otra ladera.

Laia, a punto de entrar en el Passet de la Rabosa...

...por cuya estrechez inicial pasan simultáneamente dos rutas homologadas, una de ellas el potente GR 330.

Este Passet de la Rabosa es un atractivo paso entre enormes bloques calizos...

...en el que encontramos otras estrecheces...

...así como destrepes.

Nos habíamos subido al cordal de Aitana de manera muy elegante, con el Arran dels Esquiladors, nos bajábamos también de la misma forma con este Passet de la Rabosa.

Bajando ya pudimos ver uno de los estandartes de este sector de Aitana...

...la bella Penya Forata.

Montaña alicantina en estado puro. Un paisaje espectacular.

En un principio descarté subir a la Penya Forata, pero al final si que lo hicimos, este es el panorama del que se disfruta durante la dura subida...

...se puede apreciar incluso la parte inicial del Passet de la Rabosa.

Como digo la subida es dura, con mucha pendiente y por algunos tramos descompuestos...

...pero merece la pena llegar allí arriba.

Incluso mi infatigable Laia parece acusar la dureza de la subida, pero tranquila Laia, que haremos aquí una buena parada para recuperar fuerzas y energías...

...y por supuesto para disfrutar de esta peculiar ventana a la Vall de Guadalest.

Hacia el otro lado del forat el paisaje tampoco es manco.

Preciosa Penya Forata. Hubiese sido un error no volver a subir aquí.

Además, intenté recrear, con más o menos éxito la foto que nos hicimos aquí en 2016.

A Laia le queda mucho mejor este agujero que a mi, donde vas a parar.

Descendiendo de la Penya Forata volví a mirar hacia el Passet de la Rabosa y en concreto haciaa algo que me había pasado desapercibido mientras bajábamos por allí, ¿un tejo?.

Nos bajamos definitivamente de las calizas, ahora ya las veríamos desde abajo, que soberbio paisaje el de la norte de Aitana...

...mucho más soberbio visto desde las inmediaciones del Pou de Neu de Forata. Más soberbio todavía si hubiésemos ido un mes más tarde con todos esos caducifolios con colores otoñales.

Desde el Clot también vimos así la Penya Forata.

Hace unos minutos estábamos formando parte de ella.

Llegamos a la Font de Forata, en la que Laia se pudo refrescar.

Y ya más abajo desde otro pozo de nieve, vimos así la parte alta de la sierra.

El Pou de Neu de Forata no lo fotografié bien, pero este si.

Y ya por la pista que nos llevaría de nuevo a la Font de l'Arbre vimos otros pozos de nieve, como este.

Y también detalles como este, ¿lo veis?, venga, os lo acerco con el zoom...

...una antena parabólica que cayó montaña abajo y que me da a mi que se va a quedar ahí 'pa los restos.

Estos gendarmes calizos tendrán que convivir con esa chatarra.

Otro Clot de Neu en el camino...

...camino en el que por cierto nos encontramos muchos tramos de bonito y sombreado bosque.

Y así llegábamos de nuevo a la Font de l'Arbre donde cerrábamos esta fantástica circular. Allí, con la presencia de la Moleta d'Aitana, nos relajamos un rato antes de bajarnos a Confrides a bebernos, bueno, a beberme un tercio.



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11 comentarios:

  1. Hola Dani.

    Ha sido leer Aitana y, ya me he imaginado el festival calizo que venía. Y para empezar ese Arran como diagonal herbosa a lo alto del cordal es una absoluta maravilla. Razón tienes al decir que se queda corto, este tipo de lugares estás deseando que se alargue más y más.

    El resto una maravilla, excepto los hierrajos militares. Esa foto del Puig Campana emergiendo brutalmente de entre las nubes es top.
    Y el Forat es perfecto, se ve que lo tienes bien medido, porque las autofotos con laia en ese terreno tan empinado y descompuesto bien cuestan un rato.
    Lo que me ha llamado la atención, y de hecho, me he creído que era otro forat es la antena esa tirada entre los gendarmes. En la siguiente foto ya he visto bien lo que era...

    Un abrazo.

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    1. Hola Toni.

      Cómo te gustan esas calizas alicantinas!!

      Lo del Puig Campana emergiendo de las nubes fue algo fugaz, pues ya no volvió a aparecer en lo que restaba de recorrido por el cordal. Que pudiera fotografiar ese pequeño gran momento fue gracias a dos factores, que llegué a la Moleta en ese instante y que no me diera en ese momento por estar mirando hacia otro lado ;-)
      Y el Arran... fue tan corto que me entraron ganas de bajarlo y volverlo a subir jajaja.
      Para hacer esa autofoto de Laia y mía en la Penya Forata tuve que tirar un poco de ingenio, y clavar los dos bastones bien clavados en un matorral, luego poner la cámara sobre ellos y después rezar para que no cayese jajaja, al final no estuvo mal el resultado.

      Un abrazo.

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  2. Un saludo, Dani... y también a Toni, que ha sido el primero en hablar. Salud a ambos.
    Tío, las nubes bajas te han ayudado a sacar unas fotos guapísimas. Es inmensa esa montaña, la verdad.
    Los terrenos militares, tienen sus pros y sus contras, como todo. Aquí hay zonas costeras, militares, que de no haber sido así, hoy estarías hablando de un litoral tan urbanizado que sería peor que el militarizado. En las cumbres montañosas, es distinto, porque la urbe no va a llegar tan alto... y la verdad es que podrían dejar pasar para llegar al VG quien lo desee. Pero bueno.
    Por otro lado, piensas que si es militar, puede estar más protegido y habrá menos basura... pero no es así... mira la antena... y esa antena no es nada, hay zonas, por ejemplo la cumbre de Villuercas, en Cáceres, que junto al nacimiento de uno de los ríos más importantes de la península, el Almonte, hay un vertedero de vidrios y filtros de aceite de camiones, generadores, todo terrenos... y un montón de chatarra oxidada, retorcida y de difícil extracción... pero bueno, la mancomunidad de municipios han gastado hace poco, para revalorizar el Geoparque, 3 millones de euracos en asfaltar la vieja carretera militar, para que el turismo suba más cómodo a la misma cumbre, y aparque en el helipuerto... mucho mejor que gastarlo en limpiar, adecentar y repoblar la zona... por poner un mísero ejemplo. El Geoparque Villuercas-Ibores-Jara, es de los más interesantes de la península... así que no entiendo esas acciones. Por uno de los GR que nosotros subimos, veíamos rodadas descarnadas de motos de enduro, entre un tupido bosque de melojos... eso no lo entendí tampoco. Al final, lo militar, es lo menos malo... visto lo visto.
    Que guapa esa pared agujereada... es impresionante. Dan ganas de ir por allí, que sólo conozco el Campana.
    Oye, engorilarse, jabalinear... en términos generales, se aprende bastante verborrea técnica contigo. Me gusta.
    Bueno, a ver si el ser humano aprende a vivir más cerca de los árboles y prestando menos importancia al metal y el hormigón... sería lo ideal.
    Por cierto, el sábado vimos a Rufus T. Firefly en Cádiz. ¡Buenísimos! Hicimos una ruta por Tarifa, que te dejo el enlace de la panorámica, luego a Vejer de la Frontera, y por la noche concierto. ¡Salud!
    https://horizontesibericos.com/pano.php?p=esROPNN0

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    1. Hola Fran.

      Aitana, quitando de ese montón de chatarra de su cima, es una montaña espectacular, sobre todo en su vertiente norte, después, el tramo de cordal que se prolonga hacia levante, y que empalma con el macizo de Ponoig y Puigcampana tiene algunos rinconazos calizos realmente espectaculares.

      No había oído hablar nunca de Rufus T. Firefly, a ver si luego les dedico una escucha.
      Lo de las sendas descarnadas... el la ruta del pasado sábado subía por un antiguo camino de herradura, y todas las lazadas estaban atajadas, no tardé en encontrar a los culpables, pues tras nosotros subieron un par de motos de enduro, aunque también me crucé con algún runner que atajó todas las lazadas...

      Respecto al tema militar y que es lo menos malo, pues que quieres que te diga... la verdad es que no comulgo mucho con ellos. Daría para un buen debate mi opinión al respecto. Resumiría diciendo que para mi lo ideal el ejercito solo actuara en situaciones excepcionales de emergencia, ya sean terremotos, inundaciones etc. Ejercito armados hasta los dientes + dementes ególatras al mando de los mismos = a peligrosa, muy peligrosa combinación...

      Expones tu el caso de Villuercas. Pues es similar a lo que ocurre en la Peña Salada, cima limítrofe entre Castellón y Teruel, en la que había un cuartel militar. A finales de los 90 dejó de funcionar. Qué hicieron, ¿la desmantelaron?, negativo. Allí arriba sigue cada día más destartalada. Digo yo que subiendo una carretera asfaltada hasta allí arriba no les hubiera costado tanto desmontar todo aquello y haberlo dejado lo más parecido posible a conforme estaba antes de construirla, más vale que el Ministerio de Defensa invirtiera más en casos de estos que en comprar y comprar más armamento...
      Y no hablo solo por el impacto que crea todo ese hierro y hormigón allí abandonado, sino por que, estando en el estado que está todo aquello, es un peligro para todo el que sube allí ya sea senderista, curioso, grafitero o investigador de fenómenos paranormales (hace unos años se puso bastante de moda subir allí a hacer investigaciones de ese tipo, grabar psicofonías y tal...), espero que no haya que lamentar ningún accidente algún día...

      Bueno, y no me enrollo más. Un placer como siempre tener estas conversaciones con usted amigo Fran.

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  3. Hola Víctor.

    Aitana, Serrella, Bèrnia, Puig Campana, Montcabrer, Cabeço d'Or... Inclús altres que no són tan conegudes, les muntanyes i serres alacantines son totes espectaculars, i en quasi totes hi han alternatives que fugen un poc de les rutes normals i ofereixen sempre una dosi d'aventura. No te les pots perdre!!

    Una abraçada i gràcies per comentar!!

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  4. Hola Dani,

    Como siempre, Alicante no decepciona, y esta ruta para visitar el techo de Alicante no ha estado nada mal.

    Que pasada El Arran dels Esquiladors, de haberlo conocido, tal vez habría subido por aquí cuando hace unos años me acerqué por allí, y que decir de la bajada, por ese Passet de la Rabosa tan estético, con visita a la Penya Forata, todo un acierto que bien merece el esfuerzo.

    Y para rematar, paseo bajo un bonito bosque, un auténtico rutón, como siempre.

    El tema de los hierros, por desgracia, poco podemos hacer cuando con los militares hemos topado... es una lástima que una montaña tan bonita quede afeada por tanto mamotreto.

    Un abrazo.

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    1. Hola David.

      Bueno, el Passet de la Rabosa, por el que subiste tu cuando estuviste en Aitana, y por donde subimos nosotros por primera vez, también es una manera muy guapa de ganar el cordal y la cima. Lo que pasa que como es un paso tan conocido pues parece como que se le resta importancia, pero como digo es un paso chulísimo, y al que tampoco hay que perderle el respeto.

      El Arran dels Esquiladors es más sencillo que el Passet de la Rabosa, y también diferente en cuanto a fisonomía, uno es herboso y el otro rocoso... que mejor entonces que juntarlos los dos en la misma ruta jeje.

      A ver cuando te vienes otro finde a Betxí y nos bajamos a Alacant, para que sigas aumentando tu currículum de montañas alicantinas ;-)

      Un abrazo.

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  5. ¡Hola, Dani! Otra bonita ruta de subida a Aitana (nosotros lo hicimos desde la Font de Partagat) que me anoto para una posible vuelta. Por cierto, a nosotros no nos dio por subir al Penyó de Rapel y ya he visto la foto que nos perdimos. Otro motivo para volver. Una pena el terreno militar que ocupa la cima, un verdadero despropósito. Pero a pesar de ello, una ruta muy bien aprovechada y disfrutada.
    Un abrazo.

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    1. Hola Emilio.

      La verdad es que, tanto el Arran dels Esquiladors, como el subiros al Penyó de Rapel, son dos excelentes razones para que volváis a hacerle una visita a la bella Aitana. En la ruta del Arran existe una bonita opción para bajarse antes del cordal y evitar ese antiestético tramo de la base militar, no subiríais a la cima de Aitana, pero queda una ruta muy apañada también.

      Un abrazo.

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  6. Hola Dani.

    Me quede con ganas de subir al Aitana, pero con el tema de las antenas en la cima y después, que venía mi mujer y es de poco subir, al final nos fuimos a la sierra de Bernia.

    Quitando los hierros de la cima (aquí también pasa), me ha parecido una circular muy bonita, con esos dos pasos cortos pero muy atractivos, como esa "gran diagonal" del Arran dels Esquiladors y la estrechez del Passet de la Rabosa.

    La Penya Forata, muy fotogénica y ya veo, tanto desde lejos como desde cerca, te dio mucho juego e hiciste bien en subir, que algunas veces pasa, que uno está ya un poco cansado, lo dejas y luego te arrepientes de no haber subido.

    Y sin entrar en polémicas con el tema de la "catalonofobia", te puedo decir, que conozco a mucha gente que antes iba a veranear a Cataluña y desde el tema de la independencia, han cambiado Cataluña por Castellón. Nosotros seguimos yendo a la Costa Brava (aunque llevamos dos veranos sin vacaciones), a mi me la pela el tema, pero si que es cierto, que muchas veces hemos entrado a las oficinas de turismo a pedir información y oyendo que les preguntábamos en español nos respondían en catalán, cosa que si bien más o menos entendemos, me parece una falta de respeto, por no hablar, que en muchos restaurantes, tienen la carta en catalan, francés, ingles o alemán y no en español ... Luego están los políticos, que tampoco ayudan a apaciguar y se dedican a echar gasolina al fuego, en fin, ahora están enfrentados con los dichosos Juegos Olímpicos, como si no hubiera cosas más importantes.

    Salud y montaña.

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    1. Hola Eduardo.

      Bueno, tampoco fue mala elección Bèrnia ;-)

      Tenernos que tragar ese tramo junto a la valla y las antenas fue el pequeño precio a pagar por hacer los dos pasos, el Arran y la Rabosa, en la misma ruta, pero valió la pena, pues nos quedó una ruta muy apañada, y de la que volví muy satisfecho. También valió la pena el pequeño esfuerzo extra de volver a subir a la Penya Forata, fue una bonita manera de redondear, y nunca mejor dicho, esta gran ruta por Aitana.

      Lo bonito sería que no hubiese ni catalonofobia ni hispanofobia, bueno, sería ideal que no hubiese fobia ni odio por nada y por nadie... Pero ahí le has dado, son los políticos, de ambas partes, los que tenían que evitar todo eso, pero hacen todo lo contrario y avivan más la llama del odio, y claro, no faltan los fanáticos hasta la médula de esos políticos, lo que lleva a situaciones nada agradables como que en unos sitios no quieran hablarle a una persona en castellano cuando no entiende el catalán, o que en otros miren con desprecio al que oigan hablar en catalán (de esto último puede dar fe el amigo David jeje). En fin, política y políticos, cuando más lejos, mejor.

      Un saludo.

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