20 de marzo de 2022

Sierra de Albarracín: Laguna de Bezas - Alto de la Laguna - Campamento Escuela del Rodeno - Masía de Ligros - Alto de la Cruz

 Sábado 9 de octubre de 2021

Si bien es cierto que en el pasado ya habíamos realizado alguna que otra excursión en la Sierra de Albarracín todavía no habíamos hecho ninguna que profundizase en lo que es la verdadera esencia de esta extensa sierra turolense, es decir, los pinares de rodeno y la propia roca arenisca. Eso lo solucionamos un sábado del pasado mes de octubre, realizando allí una extenuante y completísima caminata que si algo tuvo fue variedad, incluso más de la que refleja el título de este post. Vayamos pues a desgranar lo que dio de si esta intensa jornada por los bosques de Albarracín, que fue mucho y muy bueno.



Desde que finalizamos esta caminata, de cerca de 28 kilómetros, ya caí en la cuenta de que hacer una descripción detallada de la misma iba a resultar una empresa bastante compleja, y que intentar resumirla en un texto no muy extenso iba a resultar complejo también. Ya habréis comprobado que últimamente intento no estirar en demasía las descripciones, así que comprimir todo lo que tuvo esta ruta en poco texto ha resultado todo un desafío.

Empezaré diciendo que la tónica general de la ruta fue caminar bajo una vasta extensión de pinares, en uno de los pocos claros de esa mancha verde apareció, cual oasis en el desierto, la bella Laguna de Bezas, con su fauna palmípeda. Para cumplir con la máxima de que las lagunas hay que verlas a ras de agua y desde las alturas, nos subimos al Alto de la Laguna, además de ver la laguna a vista de chova nos llevamos la recompensa extra de ver unas trincheras. Vimos más posiciones defensivas en otro puntos de la ruta. Del Alto de la Laguna nos subimos y bajamos por sendos cortafuegos. Algunos de los barrancos por los que transitamos parecieron avenidas, con altos edificios de rodeno a ambos lados, algunos decorados con arte rupestre. Y hablando de rodeno, vimos mucho (además de conglomerados), pero la palma se la llevó la Escuela del Rodeno, un laberinto de callejones areniscos en los que se hizo fuerte y montó un campamento la asociación maqui AGLA. La ruta tuvo también dos trabajosos y largos tramos de jabalineo trochemochero, uno para alcanzar la pista que nos llevó al Collado de Tabernillas y el otro para subir a el Alto de la Cruz. Cuando llegamos a esa atalaya rodena el día ya decrecía, por lo que la siempre embelesadora luz de la tarde le dio mucho más brillo a las vistas. Con casi 20 kilómetros en las piernas la mullida hierba alrededor de la Masía de Ligros vino de perlas para estirar más de la cuenta la parada de la comida. Y si nos hubiésemos traído una cesta hubiésemos regresado a casa con unos cuantos kilos extra de peso, pues níscalos habían por doquier.

Este ha sido el desordenado resumen de la ruta. Las fotos si que vienen en orden para arreglar el pequeño caos cronológico del anterior párrafo.

Punto de inicio de la excursión, en el que ya nos quedó claro quienes iban a cortar el bacalao hoy, los pinos y el rodeno. La peña de la imagen es la Peña del Azarollo.

Seguimos inicialmente una pista forestal paralela al Barranco de la Laguna. Tal era la espesura del pinar que apenas dejaba penetrar los rayos del sol.

Solo había que mirar hacia las laderas de las lomas para constatar dicha frondosidad.

Pero no todo iban a ser pinos, también vimos sabinas, y bien majas...

...que crecían en los aledaños de la Laguna de Bezas.

Mi compi no tardó ni un minuto en ir a refrescarse las patas y formar parte de los bonitos reflejos.

La verdad es que la laguna me pareció mucho más bonita de lo que esperaba. También me alegré mucho de verla con buen nivel de agua, señal de que el principio de otoño había sido generoso en lluvias.

Al fondo vemos las Casas de la Laguna. ¿Y que está mirando Laia?...

...a la numerosas fochas comunes, que como estas, nadaban arriba y abajo sin importarle nuestra presencia.

Dio mucho juego fotográfico esta pincelada lacustre entre los pinares de rodeno.

El lugar se prestaba a hacer una primera parada a comer alguna cosa.

Tras el parón tocaba afrontar la primera subida de la jornada, por un pindio cortafuegos y en pos del Alto de la Laguna...

...y con el objetivo de ver la Laguna de Bezas desde las alturas. No fue necesario llegar arriba del todo para cumplir el objetivo...

...incluso la vimos enmarcada entre pinos.

Al llegar al Alto de la Laguna, a 1467 metros de altitud, además de tener buenas vistas de la Laguna también vimos algunas trincheras.

Pero vimos más cosas. Por ejemplo desde la primera cima del día vimos la que sería la segunda...

...la atalaya rodena del Alto de la Cruz.

Subimos por el cortafuegos y lo seguimos en bajada. No veáis la de mosquitos que habían. Tuve que hacer la bajada con la boca cerrada, sino hubiese terminado con mi dieta vegetariana en un suspiro 😂.

Y hablando de comida. Aquí tenéis a los más buscados de la zona cuando llegan finales de septiembre principios de octubre. En mi opinión una desmesurada fiebre la que hay por ellos últimamente. Ese día los vimos a montones.

Tras una tirada larga de carriles, a la que le siguió un incómodo trochemoche encontramos una zona de pinar más limpio por la que llegamos al Collado de Tabernillas.

Desde el susodicho collado empezamos a seguir una pista forestal más ancha, que pasó bajo los conglomerados de ahí en frente. A esta zona se la conoce como la Umbría de Ligros.

No solo vimos níscalos, también habían otro tipo de setas y hongos. No recogí de ningún tipo. Me dediqué a la micología fotográfica, que también me gusta mucho.

Empezamos a pasar cerca de formaciones de rodeno, señal inequívoca de que nos estábamos acercando al campamento maqui.

Un panel informativo nos daba la bienvenida al campamento, más adelante ya encontramos esto, que seguramente sería algún puesto de vigilancia.

Y esta es la entrada propiamente dicha al campamento. A continuación un poco de historia del lugar, para eso que mejor que transcribir, al pie de la letra, el texto del panel de bienvenida y un vídeo que he encontrado en YouTube:

Cuando finalizó la Guerra Civil muchos de los que la perdieron se echaron al monte para sobrevivir y seguir combatiendo contra el franquismo. Al finalizar la Segunda Guerra Mundial en 1945, el Partido Comunista Español organizó desde Francia grupos de guerrilleros que se introdujeron en España para contactar con los núcleos que ya existían y crear nuevas agrupaciones. Su objetivo fundamental era hostigar las estructuras del régimen y fomentar un levantamiento general.

Los grupos que actuaron en esta zona formaban parte de la AGLA (Agrupación Guerrilleros Levante y Aragón), que se organizó en 1945 tras el fracaso de la invasión del Valle de Arán en octubre 1944.

Los guerrilleros, conocidos también con el término francés "maquis", crearon diversos y diferentes campamentos. Los hubo de paso, estables y de emergencia. El que va a visitar fue considerado de los estables.

Este campamento, creado a comienzos de 1947, fue sede del Estado Mayor de la AGLA y una escuela de Guerrilleros.

Las formaciones de roca en esta zona facilitaron el emplazamiento del campamento, ya que permiten su vigilancia, y los numerosos pasillos formados por las rocas hacían posible la huida si eran atacados. Esto ocurrió en la madrugada del 20 de diciembre de 1947, cuando fue asaltado por las fuerzas de la Benemérita, de los batallones del ejército destacados en Albarracín y Teruel, y por un grupo de miembros de la Guardia de Franco.

En el campamento guerrillero se encontraron, según los informes de la Guardia Civil, pizarras para dar clase, dos mosquetones Mauser, tres máquinas de escribir, cincuenta metros de mecha, un saco de azufre, un frasco de ácido sulfúrico, sellos y efectos robados del Ayuntamiento de Calomarde, cuarenta cabezas de ganado en canal y curadas por el frío, dos multicopistas, papel y tinta, diez kilos de dinamita, tres cajas de fulminantes, cincuenta pieles de lanar, cuatro mantas, útiles de cocina, un tronzador, hachas, ocho botellas de coñac, petardos y bombas de mano, un frasco de glicerina y abundante documentación.

Contamos con la descripción pormenorizada del campamento y de la vida en el mismo gracias a las memorias de José Manuel Montorio, antiguo guerrillero conocido como "El Chaval", tituladas Cordillera Ibérica, Recuerdos y Olvidos de un Guerrillero.

Las actividades de la AGLA comenzaron a decaer a partir de 1948, retirándose todos los miembros de la agrupación a Francia.






Ya dentro del campamento, en el que encontramos más paneles informativos, nos dimos un cumplido garbeo por esos callejones de rodeno.

Avenida, peatonal, del Rodeno 😏...

...con los bloques de rodeno como casas. Los pinos ejercerían de farolas 😂.

El rodeno tiene ojos. Nos sentimos observados por ellos.

Aquí parecía que ya no se podía continuar...

...pero si que se podía. Mirad que grieta...

...no nos pudimos resistir a comprobar si tenía continuidad...

...la tuvo. Eso si, hubo que trepar por esta estrechez. Me tuve que quitar la mochila, y también ayudar a Laia.

Tras este pasillo más estrecho salimos de nuevo a callejones más amplios...

...que nos condujeron a un mirador. Impresionante extensión de pinar en este sector de la sierra.

Está claro por que al paraje se le conoce como los Pinares de Rodeno, ¿no?

Seguimos callejeando por esta particular ciudad de rodeno...

...en la que seguimos encontrando curiosas formaciones.

Llegamos a lo que era la estancia principal del campamento, a la que se accedía por ese hueco entre los bloques y unos escalones.

Ahí está mi guerrillera preferida, esperando a que yo subiera.

Nos estaba encantando este campamento, y nos hubiésemos quedado más rato por allí, pero aún nos quedaba más de media ruta por delante.

Abandonamos el campamento bajando por esta canal...

...y bajamos hasta el lecho del Barranco del Pajarejo, donde en mi opinión nos esperaba el tramo más espectacular de todo el recorrido...

...cerrado en ambas vertiente por altísimos paredones de rodeno, tan altas como los pinos que han crecido, y siguen creciendo, en su base.

Fascinante combinación entre rodeno y pino.

Tampoco faltaron en este tramo las caprichosas formaciones.

Como disfrutamos de este tramo...

...que también nos regaló alguna pequeña pincelada otoñal.

Sencillamente espectacular.

Entramos en un sector del barranco en el que fuimos un buen tramo bajo la bóveda de las paredes.

Así, con este tramo tan bonito...

...llegamos hasta las pinturas rupestres del Abrigo del Barranco del Pajarejo, muy bien protegidas por una valla...

...he de decir que de las pinturas rupestres que he visto todos estos años en nuestras rutas estas han sido de las mejores.

Pinos, torres y edificios de rodeno, bóvedas, pinturas rupestres, al barranco solo le faltaba agua...

...y la encontramos un poco más abajo, en un tramo muy bien excavado por la actividad fluvial.

Valieron la pena, y valga la doble redundancia, las penurias del último tramo del barranco (sendero muy cerrado por la vegetación), con tal de disfrutar de este rincón tan chulo.

Tras salir del Pajarejo empezamos a seguir, y en dirección contraria al barranco, una pista forestal paralela al mismo. El tramo fue largo, pero valió la pena, pues nos permitió enlazar de nuevo con el barranco, solo que con la denominación de Barranco de Ligros.

Cambio de nombre pero no de tónica, es decir, muy bonita.

Se avecinaba otra sección de ruta realmente deliciosa. A las siguientes fotografías me remito.





Superado este tramo tan disfrutón, y por esta avenida herbosa...

...íbamos a llegar a la Masía de Ligros.

Camino de la Masía vimos esto. Desconozco si la zona posee un pasado megalítico, pero, ¿a qué parece un dolmen?.

Aunque si hubiese existido dicha actividad megalítica no sería de extrañar...

...pues no me digáis que este lugar no desprende energía y misticismo.

Precioso y verde entorno el de la Masía, donde el edificio que más llama la atención es...

...la antigua casa foresta de Ligros, que tiene pinta de llevar mucho tiempo cerrada.

En la parte posterior de la casa, donde hicimos una relajada parada a comer, está esta otra edificación, habilitada como refugio libre. Al fondo vemos, todavía lejano...

...el Alto de la Cruz, próximo destino. 

Habiendo recuperado energías retomamos la ruta. Nuevo largo tramo de carril. Pasamos junto a la Fuente Royuela.

Como os había dicho no recogí ningún níscalo, pero si hubiese tenido algo para meterlas, estas macrolepiotas se hubiesen venido conmigo. Muchísimo más deliciosas que los níscalos, donde vas a parar.

Y entre tanto pino nos sorprendió encontrar un bosquecillo de robles. A partir de este punto empezaba un largo y trabajoso tramo de monte a través en busca del Alto de la Cruz.

...hablando de él.

El tramo, con el tute que llevábamos en las piernas-patas, y además en ascenso, nos pasó factura, pero valió la pena con tal de disfrutar de más formaciones de rodeno...

...y de sus mensajes crípticos.

Así llegamos a la base del Alto de la Cruz, a cuya cima se accede por un aéreo, pero acondicionado, sendero.


Vistas excelentes incluso antes de llegar a la cima. Horizonte limpio hacia el Valle del Jiloca...

...y horizonte limpio hacia Sierra de Albarracín y Montes Universales.

Una escalera tallada en el rodeno da acceso a la cima...

...en la que encontramos una coqueta caseta de vigilancia forestal, un vértice geodésico...

...y la cruz que le otorga el nombre más popular a esta cima...

...aunque también se la conoce como Peña Botadera, su altitud 1535 metros.

Nos sentamos en la cruz a tomar, tras casi ocho horas de ruta, un más que merecido descanso. ¿Típica, y cansina, selfie?, no gracias, mejor buscamos algo de originalidad.

Identifiquemos alguna de las vistas. Piramidal Pico Carbonera. A la agenda!!

Sierra de Albarracín.

Al fondo del todo otra pirámide, a la que ya subimos hace unos años, el Cerro de San Ginés. En primer término las Peñas Royas.

Cerca de la cima, y de bajada, encontramos estas posiciones defensivas...

...evidentemente relacionadas con la Guerra Civil Española.

El resto de la ruta fue tan sencilla como seguir la pista que sube al Alto de la Cruz hasta la furgoneta, y degustando las últimas pinceladas de lo que fue una extraordinaria excursión por la Sierra de Albarracín.




Powered by Wikiloc

22 comentarios:

  1. Benvingut al club de fans de la Sierra de Albarracín.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No sé perquè serà, però crec que aquest és un club amb molts membres ;-)

      Eliminar
  2. Hola Dani,

    Menudo festival de pino y rodeno que nos has regalado en estos 28 Km de delicia de ruta.

    Siempre me han encantado los pinares de la zona de Albarracín, pero es que es laguna me ha hipnotizado, con esos reflejos y en un rincón tan idílico.

    La zona de trincheras me ha gustado, pero lo que realmente me ha flipado ha sido el campamento maqui, todo él laberíntico y con unas formaciones impresionantes, uno se podría tirar allí horas intetnando descubrir todos sus rincones secretos.

    Y cuando parece que la cosa ya no puede mejorar, vas y nos ensenyas un precioso baarranco que incluso tiene pinturas rupestres en un estado de conservación impresionante.

    El acceso al Alto de la Cruz me ha gustado, intentando aprovechar el porpio rodeno para crear unas escaleras mimetizadas con el entorno, y encima desde la cima espectaculares vistas.

    Lo dicho, menudo rutón os habéis marcado, no descarto copiarte la ruta en algún momento que esté por Montanejos... jejeje

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola David.

      Fue el típico recorrido en el que la suma de cosas que vas viendo y visitando, más el kilometraje, claro está, acaban convirtiendo la ruta en una cinco estrellas. Difícil inclinarme por alguna cosa que me gustará sobre las otras, pero si tuviera que decir algo sería ese tramo de barranco que vino después del campamento Maqui. Nos sentimos muy pequeños caminado emboscados entre la propia vegetación del barranco, esos pinos tan altos y las no menos altas paredes de rodeno.
      Ya te digo que me hubiese gustado callejear un poco más por el campamento, pero quedaba mucha tela por cortar. Quizás en un futuro vuelva a la zona, empezando la ruta en la Masía de Ligros, y profundice más en el campamento, y también cerca de la masía, que estos días he estado investigando por la red y he visto que hay más grabados rupestres por allí.
      Respecto al acceso al Alto de la Cruz, a mi también me gustó, ya que han actuado sobre la montaña, lo han hecho con buen gusto, haciendo las protecciones del sendero con madera, y tallando esos escalones en la roca. Cuando menos hierro mejor.

      Un abrazo.

      Eliminar
  3. Dani, me ha gustado bastante el paisaje, las formaciones de rodeno erosionadas, las estrecheces laberínticas aderezadas con arte esquemático, el artículo de los maquis... por cierto, gracias por ello... ha estado bastante interesante todo.
    Yo te sigo animando a que mandes fotos a Luis, para Horizontes Ibéricos, pues luego, cuando está montada, te recreas identificando cada una de las cumbres que viste desde arriba, como este de Peña Botadera. Te iban a gustar bastante ver esas panorámicas hechas por ti. Es muy fácil. Sólo haces las fotos, un poco solapadas y manteniendo el nivel del horizonte, y se las mandas... y que cierren los 360º de paisaje. El otro día le mandé unas desde La Peña, en Tarifa. https://horizontesibericos.com/pano.php?p=esROPNN0
    Bueno, después de Rufus, hemos visto a Ángel Stanich... que hacía 4 años que lo vimos... como ha pasado el maldito tiempo... y este sábado hemos vuelto por Grazalema, y el domingo a la ópera, en Cádiz... no hay que parar.
    Salud, amigo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Le da bien a las baquetas la chica esta de Rufus T. Firefly... A Ángel Stanich tampoco lo conocía, ha estado hoy usted muy indie con las recomendaciones musicales ;-)
      He visto que también has publicado el relato de vuestra subida a la Peña, luego la subo yo virtualmente contigo e Isabel jeje
      La Sierra de Albarracín es muy extensa, y bajo esos frondosos pinares de rodeno esconde muchas maravillas, creo que con lo relativamente cerca que la tengo debería dejarme caer más por allí.
      Esa historia del campamento merecía ser contada ;-)

      Un abrazo.

      Eliminar
    2. Dani, se llama Julia la baterista de Rufus. Por si no lo sabes, Rufus T. Firefly es el nombre del personaje que interpreta Groucho Marx en Sopa de Ganso. Les gusta mucho el cine... tienen títulos de canciones como Final Fantasy o Magnolia... Está muy interesante esa psicodelia... a mi me gustan... pero tampoco tanto como para verlos 18 veces en directo... o más... como los ha visto un colega de Jerez con el que yo quedaba para hacer kayak Surf.
      El amigo Stanich tiene letras muy buenas, y en directo gana mucho... coge una fuerza indescriptible... no lo parece en el disco... que ya tengo 3 vinilos suyos.
      Ah, el sábado salvé la vida de 2 salamandras preciosas... estaban atrapadas bajo una arqueta de una fuente, hasta la tapa de agua, y sin poder salir... casi inertes estaban... al cabo de un rato empezaron a caminar lentamente... menos mal. Nos llevamos la alegría del día.
      Oye, la violinista Judith Mateo ha hecho algo con los del ríu Sec de Castelló.
      ¡Abrazos para esa tierra! Y cuidado con el agua estos días... bajan las ramblas a tope.

      Eliminar
    3. El Riu Sec, pero el de Betxí, baja desbocado desde el lunes...

      Gracias por los apuntes, del del nombre de la batería de Rufus y la referencia cinematográfica que desconocía por completo.

      Yo últimamente estoy escuchando bastante metal, pero no metal al uso, escucho bastante a Arch Enemy y a los ucranianos Jinjer, ambas bandas con gutural cantante femenina. También escucho a la danesa Myrkur, que hace una interesante mezcla entre folk y black metal (su último disco, totalmente folk, es una pasada). Y estoy flipando con los últimos discos de Mastodon y Opeth, dos autenticas bandazas.
      Respecto a conciertos, hace casi tres años que no voy a ninguno (no sé si te lo creerás, pero fue a uno gratuito de Fangoria en Vila-real). No sé como está ahora el tema de llevar mascarillas en los conciertos, pero la verdad es que no me apetece para nada ir a ver un concierto con ella puesta, si no cambia la normativa estoy planteándome incluso vender la entrada que tengo desde 2020 para ver a los Foo Fighters en Valencia... En octubre viene Robe y su grupo a Onda (a 10 km de Betxí).

      Y que bueno lo de las salamandras, ese pequeño acto, que muchos no harían, dice mucho de ti amigo Fran. Nosotros hace unas semanas también tuvimos un caso con unos perros extraviados de una batida, ya lo contaré en el blog cuando le llegue el turno a esa ruta :-)

      Eliminar
  4. Hola Dani.

    28 kilometrazos!! Que por este paisaje tan guapo se harían más amenos; aún así, menudo tute, amigo. Te imagino con la boca llena de mosquitos y me entra la risa ;-)

    Esta excursión, creo recordar, que hablamos de hacerla en una de nuestras planeadas rutas conuntas. Es una pasada, empezando por esa laguna de bezas y sus reflejos (la tengo pendiente). Cuánto se parece la Laguna de Bezas a la Laguna de Talayuelas, no solo por la lamina llana del agua sino el entorno es también arenisca y pino rodeno por todos los sitios.

    Pero no solo eso, sino es que son calcados estos pinares y estos afloramientos rocosos de rodeno con toda la zona de la Serranía Baja de Cuenca con lugares como Villar del Humo o Boniches, además con pinturas rupestres como por aquí. Lo que no hay por aquí, o por lo menos de manera tan clara, es lo del Campamento maquis. No ha tardado mi cabeza ni dos segundos en imaginarme a los duros maquis sobreviviendo por estos lares.

    Hablando de maquis, el último relato de Zacarías que estoy pergeñando trata del maquis por completo, y menciono este campamento de Ligros (incluso tu pueblo ;-) Aun falta mucho, pero te gustará.

    Lo dicho, una maravilla de entrada para recrearse fotográficamente en la variedad de lugares, objetos y sensaciones que trasmiten. A ver si me pongo a confeccionar entradas por la sierra de Albarracín, que tengo algunas hechas hace ya tiempo, y que sabes, que junto con el alto tajo, es la otra comarca "mía"

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Toni.

      Jeje, en la foto en el Alto de la Cruz no se nos nota, pero estábamos ya cansadetes. Tu lo has dicho, fue un tute, pero bendito tute.

      Si que es cierto que hubo secciones de la ruta que me recordaron a la zona del Ranera y las Callejuelas, o aquella ruta por las Corbeteras y el Saladar... Pero es la grandeza del Sistema Ibérico, que tiene mucha variedad pero que también puede mostrarnos paisajes con idéntico ADN en lugares bastante alejados entre si.

      Es cierto, una ruta semejante a esta la planeamos en 2019, si no recuerdo mal la idea era empezar en la Masía de Ligros y hacer la circular por los barrancos y el Campamento Maqui, y luego visitar la Laguna de Bezas, pero fue cuando yo me hice aquel esguince gordo e iba con muletas. Cambiamos el plan a turismo, pero también nos salió rana por la meteo ¿recuerdas el tormentón y los pedrolos que cayeron cuando estábamos comiendo en ese sitio chulo de Albarracín?.

      Y doble alegría me ha dado con ese nuevo relato de Zacarías que estás preparando, primero por que me encantan las aventuras y desventuras del bueno de Siglo, y segundo por que veo que tu paréntesis rutero está siendo provechoso en escritura. Con lo que me comentas, pues con muchas ganas ya de leer ese nuevo relato, y a ver que has carburado para incluir a Betxí en él ;-)

      Un abrazo.

      Eliminar
    2. Como para olvidar aquella tormentaca, aunque sabes que mi memoria es muy gastrónomica, y aquellas hamburguesas veganas con sus cervezas artesanales en aquel restaurante de escaladores tampoco se me olvidan.

      Jjejeje, esta vez, el amigo Siglo va a estar por la Serranía baja, y varios personajes son de pueblos de Valencia, Teruel y Castellón, pero aún falta muuucho para presentarlo, aunque si es verdad que con este obligado parón estoy avanzando mucho.

      Eliminar
    3. Jajaja, está bien eso, memoria gastronómica en vez de memoria fotográfica. La verdad es que yo también me suelo acordar de los bares en los que he comido o cervezeado tras las rutas, sobre todo si he comido bien y he pasado un buen rato ;-)
      Promete ser apasionante ese nuevo relato de nuestro pastor serrano favorito ;-)

      Eliminar
  5. ¡Hola, Dani! Preciosa ruta y preciosa sierra. Has definido muy bien la ruta con dos expresiones: pino rodeno y roca arenisca. Son el elemento común y pintoresco de esta larga y preciosa ruta a cuya descripción no le falta ni le sobra nada. Preciosa la laguna que da el toque acuático a la ruta. Excelente día que seguro, no olvidarás.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Emilio.

      Esos dos ingredientes, pinos y rodenos, ya hubiesen sido suficientes para garantizar un buena ruta, pero se le sumaron otros alicientes, como la laguna, las trincheras, el campamento, las vistas desde las cimas, para que la excursión fuese el doble de satisfactoria.

      Un abrazo

      Eliminar
  6. Hola Dani,Precioso reportaje en tu linia.Un saludo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias Juan Carlos. Un placer y una alegría volver a verte por aquí ;-)

      Un saludo.

      Eliminar
  7. Hola Dani,

    Fijate si me han gustado estos parajes que nos vamos a ir a verlos el próximo fin de semana!! Mis hijos se van de viaje escolar y habíamos pensando aprovechar para hacer una escapadita de pareja. Esta tarde, leyendo tu reportaje, me ha parecido una excelente opción. Ha sido consultar las previsiones, y como no dan lluvias, ya he hecho la reserva del alojamiento para 3 noches. Solo me queda organizar las rutas. Los 28 Km. son muchos para mi, menuda paliza!, pero veo que hay varios aparcamientos y se pueden hacer un par de excursiones cortas en un día. No voy a perderme el laberinto de campamento maqui. Las pinturas rupestres me fascinan y ya he visto hay varias repartidas por la zona. Y la laguna, aunque se ve pequeñita desde lo alto, es muy linda desde la orilla y da mucho juego con los reflejos. Y tendremos tiempo de descubrir otros rincones de esta sierra, además de conocer el pueblo de Albarracín, que ya iba siendo hora.
    Lástima que no sea temporada de setas, porque yo no me resisto. En otoño siempre llevo la bolsa setera en la mochila pero aquí en Madrid somos demasiados los aficionados a las setas y están muy buscadas.
    Seguro que vamos a disfrutar del viaje. Gracias por la inspiración!

    Un saludo,

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Nuria.

      Seguro que le sacáis mucho jugo a esta escapada!! Es verdad, esta zona ofrece la oportunidad, de si no se quiere hacer la ruta tan larga, de poder hacer un par de caminatas cortas en un día, por ejemplo desde la Masía de Ligros se puede ir al Campamento Maqui, recorrer alguno de los barrancos de rodeno y ver las pinturas y grabados rupestres de la zona, y luego, o antes, ir con el vehículo a ver y caminar junto a la Laguna. Luego seguro que descubrís otros fascinantes rincones de esta bella Sierra de Albarracín.
      A nivel cultural la zona también ofrece muchas posibilidades, así a bote pronto se me ocurre el Acueducto Romano de Gea, y como bien apuntas la visita al propio pueblo de Albarracín, el cual aún tengo yo pendiente visitar, y no es por que no lo haya intentado, una vez fuimos y empezó a diluviar, y la segunda vez iba con muletas y también llovía, así que mientras mis amigos visitaron el pueblo yo me quedé en el coche...

      Lo dicho, a disfrutar de la escapada!!

      Un saludo.

      Eliminar
    2. hola Dani,
      la escapada estuvo muy bien, además nos cogimos el lunes para aprovechar el viaje, hay mucho que ver por la zona además de la villa medieval de Albarracin: el barranco de la Hoz, acueducto de Gea, pinares de Rodeno, la laguna, pinturas rupestres y campamento maqui, no paramos! y también volvimos a recordar lo que es pasar frio, jejeje! Queríamos pasar por Teruel, pero no había tiempo para tanto, asi que tendremos que hacer otra escapada a conocer la ciudad y de paso, alguna montaña turolense.

      un saludo,

      Eliminar
    3. Hola Nuria.

      Me alegro de que disfrutaseis de la escapada turolense, y de que la aprovechaseis al máximo!!. Y si, en Teruel, además de existir, hace mucho frío en invierno ;-)
      A mi también me pasa cuando hago escapadas de este tipo, que se me quedan cosas en el tintero jeje. La ciudad de Teruel es muy bonita, vale la pena hacerle una visita a fondo, además hay buenos reclamos excursionistas cerca, como los Amanaderos de Riodeva (imprescindibles) en la Sierra de Javalambre, o el sorprendente paisaje de la Rambla de Barrachina, a escasos cinco kilómetros de la capital.

      Un saludo.

      Eliminar
  8. Hola Dani.

    En el resumen del 2021, ya te comenté que esta circular, la tenía pendiente desde hace unos años. Al ser tan larga más el viaje, hace que me de pereza y casi sea "obligatorio" pernoctar, así que no veo descabellado, recortar la circular y visita la laguna con la furgoneta.

    Lo bueno de abarcar tanto espacio, es que la variedad de paisajes y rincones con encanto, son casi infinitos. Caminar por ese laberinto de rodeno en el que se ubica el Campamento Maqui, tiene que ser una pasada y ver las pinturas rupestres, una gozada, porque por la zona de Teruel, suelen estar bastante difuminadas (ya me dirás donde están el resto de pinturas, por si se pueden incluir en la ruta).

    Me ha encantado las vistas desde el Alto de la Cruz y sobre todo, esa forma piramidal del pico Carbonera, cuya ascensión habrá que investigar. Me han llamado la atención esos pozicos llenos de agua en la roca, no se si serán por el efecto de la erosión o tendrían alguna función ... y ese Dolmén, que no se si tendrá mucha antigüedad, porque esta en muy buenas condiciones.

    Yo para las setas soy muy quisquilloso, los níscalos, para mi gusto son algo bastos, prefiero la seta de cardo o los Boletus, que en Soria los tienen por castigo.

    Salud y montaña.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Eduardo.

      He estado mirando cuanto tienes de carretera desde Zaragoza hasta Bezas y tienes más o menos el mismo tiempo que yo desde Betxí. Yo fui y volví en el día, fueron hora y casi tres cuartos en ir, las ocho horas y pico de ruta más la hora y casi tres cuartos de volver, que la verdad si que se me hicieron un poco pesados. Un buena opción sería, si tienes la furgoneta preparada para dormir, ir la noche de antes, así el día siguiente no es tanta paliza. Y si no la zona ofrece una buena combinación de pistas forestales, en buen estado, para hacer tres o cuatro pequeñas rutas en el día y así conocer todos los puntos de interés de esta zona tan bonita e interesante sin pegarte el palizón de andar. Por ejemplo desde la Masía de Ligros se puede hacer la circular del campamento maqui y esos barrancos adyacentes (incluido el de las pinturas rupestres). Luego a la Laguna de Bezas se puede llegar con coche y luego bordearla a pie, y al Alto de la Cruz también sube una pista hasta prácticamente arriba. Te paso este enlace en el que vi las pinturas y grabados rupestres que existen en las cercanías de la Masía de Ligros:

      Masía de Ligros

      A mi también me llamaron la atención esas cazoletas de piedra del Alto de la Cruz, investigué sobre cual podría ser su origen, al igual que ese supuesto dolmen, y no encontré nada.

      A mi también, los níscalos, a la que los como dos o tres veces ya me cansan, a mi padre, que desde que se jubiló le ha dado por ir a buscar cada dos por tres cuando es temporada, le tengo que decir que no me dé más jajaja. Han cogido mucha fama últimamente y cada vez sale más gente a por ellos, olvidándose de que hay setas y hongos infinitamente más sabrosos, como los que comentas tú, o las macrolepiotas o las negrillas, solo por mencionar las más comunes.

      Salud y montaña.

      Eliminar