Domingo, 15 de marzo de 2015
Tal y como os adelanté en la anterior entrada, tras haber subido al Cerro San Felipe el sábado, para la jornada del domingo el amigo Toni nos había reservado toda una "delicatessen" de ruta, un aventurero recorrido por bosques, arroyos y barrancos en torno al Puntal de los Hayales y que iba a transcurrir por veredillas animales, terreno poco pisado o casi virgen, senderos ancestrales y una espectacular faja, una ruta de las que marcan... la Serranía más salvaje en estado puro.
Como os comentaba hoy Toni nos tenia preparada una ruta cinco estrellas que iba a girar alrededor del Puntal de los Hayales o de los Poyales en la Sierra del Agua, la idea era adentrarnos en la barrancadas que separan las cimas del Púlpito y el Puntal de los Hayales y remontar esta última hasta llegar a un estupendo mirador en su cara norte, desde allí recorreríamos una larguísima e impresionante faja para bajar luego al cauce del Arroyo Almagrero y visitar la Cueva de las Grajas, luego subiríamos de nuevo a la faja para localizar un sendero tallado en la roca que nos bajaría de nuevo al arroyo, y si daba tiempo visitaríamos, antes de volver al punto de inicio, un paraje conocido como la Bodega, vayamos ahora con una explicación un poco más detallada de este recorrido y de lo que aconteció en la jornada:
Hoy nos acompañan Maru, y su hijo Nachete, nos ha salido un día frío y gris tirando a otoñal, tanto que durante muchos instantes de la ruta nos iba a acompañar una intermitente y ligera nevada, pero que no llegó a cuajar en ningún momento.
Empezamos bajando por un carril a buscar el encuentro con el Arroyo Almagrero, con el que estableceremos el primer contacto.
Abandonamos cualquier rastro de camino o sendero y también el Almagrero, a partir de ahora caminaremos entre quejigos junto al Barranco de la Fuente de la Zorra, que tributa sus aguas al Almagrero y que forma el valle que separa los montes del Púlpito y el Puntal de los Hayales, pasaremos a la otra orilla del barranco para empezar a encaramarnos a las laderas de el Puntal, por una trocha de sendero que localizó Toni en una de sus subidas al Púlpito, por él iremos ganando cota hasta toparnos con otro barranco, el del Pozo Maeso, subsidiario del de la Fuente de la Zorra, una subida por terreno agreste nos servirá para sortear el cambio de nivel del barranco y alcanzar la parte superior de su lecho, lo cruzaremos y por una faja cubierta de pinos ganaremos el mirador norte del Puntal de los Hayales, uno de esos miradores tan vertiginosos que acostumbra a mostrarnos Toni en su blog.
Nos esperaba ahora lo mejor de la ruta, ante nosotros teníamos una larga faja que recorre toda la vertiente occidental del Puntal de los Hayales, y Toni nos confirma que a partir de ahora continuaremos por ella, por las inclinadas laderas que la recorren, a primera vista parece imposible, pero pequeñas, a veces inapreciables, veredas formadas por el paso de los animales nos harán de improvisado sendero, el paisaje nos abruma, sobre todo el que queda a nuestra derecha, donde aparecen impresionantes puntales y unos paredones que se desploman hasta lo más profundo del lecho del Arroyo Almagrero, formando un no menos impresionante desfiladero.
Solo cuando termina la faja es cuando podemos bajar al cauce del Almagrero, el cual teníamos que seguir ahora aguas arriba para aproximarnos a nuestro próximo objetivo, la Cueva de las Grajas, pero al final declinamos ir a visitarla, puesto que nosotros teníamos que regresar esa misma tarde a Betxí y el paso por la faja nos había ralentizado bastante, así que dimos media vuelta, no sin antes hacer una parada para dar buena cuenta de las riquísimas empanadas que Maru había preparado para la ocasión.
Volvemos a la faja, más o menos a mitad de ella encontramos unos hitos, según Toni, colocados por los pastores, y que señalan un sendero que a primera vista no se ve, de esos que dices: "¿cómo puede ir un sendero por ahí?", este, de largo el más evidente del día, esta camuflado y tallado en la misma roca, como he dicho antes, todo un sendero ancestral y que de manera espectacular nos bajaría de nuevo al lecho del Almagrero.
Caminamos de nuevo entre quejigos, hemos declinado también ir a ver la Bodega, así que iremos en búsqueda del primer carril de la mañana, lo haremos campo a través, disfrutando del bosque, de una nevada que por momentos se intensificó, por zonas llanas sin arbolado, por alguna ciénaga y teniendo que atravesar dos veces el arroyo antes de volver a encontrar el carril que nos devolvería a los coches, el colofón a esta espectacular ruta lo pusieron unas cervecillas en un animado bar de Huélamo.
Un saludo a tod@s.
Tal y como os adelanté en la anterior entrada, tras haber subido al Cerro San Felipe el sábado, para la jornada del domingo el amigo Toni nos había reservado toda una "delicatessen" de ruta, un aventurero recorrido por bosques, arroyos y barrancos en torno al Puntal de los Hayales y que iba a transcurrir por veredillas animales, terreno poco pisado o casi virgen, senderos ancestrales y una espectacular faja, una ruta de las que marcan... la Serranía más salvaje en estado puro.
Como os comentaba hoy Toni nos tenia preparada una ruta cinco estrellas que iba a girar alrededor del Puntal de los Hayales o de los Poyales en la Sierra del Agua, la idea era adentrarnos en la barrancadas que separan las cimas del Púlpito y el Puntal de los Hayales y remontar esta última hasta llegar a un estupendo mirador en su cara norte, desde allí recorreríamos una larguísima e impresionante faja para bajar luego al cauce del Arroyo Almagrero y visitar la Cueva de las Grajas, luego subiríamos de nuevo a la faja para localizar un sendero tallado en la roca que nos bajaría de nuevo al arroyo, y si daba tiempo visitaríamos, antes de volver al punto de inicio, un paraje conocido como la Bodega, vayamos ahora con una explicación un poco más detallada de este recorrido y de lo que aconteció en la jornada:
Hoy nos acompañan Maru, y su hijo Nachete, nos ha salido un día frío y gris tirando a otoñal, tanto que durante muchos instantes de la ruta nos iba a acompañar una intermitente y ligera nevada, pero que no llegó a cuajar en ningún momento.
Empezamos bajando por un carril a buscar el encuentro con el Arroyo Almagrero, con el que estableceremos el primer contacto.
Abandonamos cualquier rastro de camino o sendero y también el Almagrero, a partir de ahora caminaremos entre quejigos junto al Barranco de la Fuente de la Zorra, que tributa sus aguas al Almagrero y que forma el valle que separa los montes del Púlpito y el Puntal de los Hayales, pasaremos a la otra orilla del barranco para empezar a encaramarnos a las laderas de el Puntal, por una trocha de sendero que localizó Toni en una de sus subidas al Púlpito, por él iremos ganando cota hasta toparnos con otro barranco, el del Pozo Maeso, subsidiario del de la Fuente de la Zorra, una subida por terreno agreste nos servirá para sortear el cambio de nivel del barranco y alcanzar la parte superior de su lecho, lo cruzaremos y por una faja cubierta de pinos ganaremos el mirador norte del Puntal de los Hayales, uno de esos miradores tan vertiginosos que acostumbra a mostrarnos Toni en su blog.
Nos esperaba ahora lo mejor de la ruta, ante nosotros teníamos una larga faja que recorre toda la vertiente occidental del Puntal de los Hayales, y Toni nos confirma que a partir de ahora continuaremos por ella, por las inclinadas laderas que la recorren, a primera vista parece imposible, pero pequeñas, a veces inapreciables, veredas formadas por el paso de los animales nos harán de improvisado sendero, el paisaje nos abruma, sobre todo el que queda a nuestra derecha, donde aparecen impresionantes puntales y unos paredones que se desploman hasta lo más profundo del lecho del Arroyo Almagrero, formando un no menos impresionante desfiladero.
Solo cuando termina la faja es cuando podemos bajar al cauce del Almagrero, el cual teníamos que seguir ahora aguas arriba para aproximarnos a nuestro próximo objetivo, la Cueva de las Grajas, pero al final declinamos ir a visitarla, puesto que nosotros teníamos que regresar esa misma tarde a Betxí y el paso por la faja nos había ralentizado bastante, así que dimos media vuelta, no sin antes hacer una parada para dar buena cuenta de las riquísimas empanadas que Maru había preparado para la ocasión.
Volvemos a la faja, más o menos a mitad de ella encontramos unos hitos, según Toni, colocados por los pastores, y que señalan un sendero que a primera vista no se ve, de esos que dices: "¿cómo puede ir un sendero por ahí?", este, de largo el más evidente del día, esta camuflado y tallado en la misma roca, como he dicho antes, todo un sendero ancestral y que de manera espectacular nos bajaría de nuevo al lecho del Almagrero.
Caminamos de nuevo entre quejigos, hemos declinado también ir a ver la Bodega, así que iremos en búsqueda del primer carril de la mañana, lo haremos campo a través, disfrutando del bosque, de una nevada que por momentos se intensificó, por zonas llanas sin arbolado, por alguna ciénaga y teniendo que atravesar dos veces el arroyo antes de volver a encontrar el carril que nos devolvería a los coches, el colofón a esta espectacular ruta lo pusieron unas cervecillas en un animado bar de Huélamo.
Un saludo a tod@s.
Arrancamos, en el horizonte aparecen el Puntal de los Hayales (izq.) y el Puntal del Portillo Pelado (der.) |
Arroyo Almagrero, uno de los principales protagonistas de la jornada y el afluente más importante, en estos sus primeros pasos, del Júcar |
Empezamos a caminar sin sendero, entre quejigos, con un claro toque otoñal, el día también contribuyó a ello |
Como si lo intuyera hago una foto hacia este desfiladero, Toni aún no nos había dicho que más tarde circularíamos por las fajas de la izquierda |
También capta mi atención el mirador a modo de proa del Puntal de los Hayales, donde subiríamos un poco más tarde |
Iremos durante un buen instante bordeando las aguas de este barranco, el de la Fuente de la Zorra |
Aguas vivarachas y puras... |
...tan puras que antes de cruzar al otro extremo no dudamos en amorrarnos a beber en una de las numerosas surgencias |
Una vez hidratados pasamos al otro lado del barranco |
Estas formaciones rocosas quedan al otro lado, en las laderas del Púlpito |
Empezamos a remontar por el sendero que descubrió Toni desde el Púlpito, a cuyas laderas pertenecen las rocas que tenemos frente nuestro |
Vaya!!, parece que alguien se dio un festín |
El sendero dibuja este bonito paso natural entre el roquedo |
Este es el Púlpito, no está nada mal esta montaña, y el barranco que queda bajo nuestros pies tampoco es manco |
Buen lugar este para una foto de grupo |
Barranco del Pozo de Maeso, después de época de lluvias se debe formar un bonito salto de agua aquí, nuestro camino pasa por la parte superior... |
...así que remontamos por estas agrestes laderas |
Cruzamos el barranco, el pino vuelve a cobrar protagonismo |
Aprovechando un claro en el pinar vemos el marcado Barranco de la Fuente de la Zorra, la montaña más alta en el centro de la imagen es la Mogorrita, techo de Cuenca |
El arbolado lo disimula, pero vamos por una faja, "la Faja de Toni" |
En esta captura se aprecia mejor que vamos sobre una repisa colgada, hace unos instantes caminábamos por lo más hondo de ese barranco |
Llegamos al mirador norte del Puntal de los Hayales, de esos que quitan el hipo al asomarse |
Así vemos desde allí el Puntal de los Hayales, vemos una larga faja que se extiende hacia el sur, Toni nos dice que iremos ahora por ella, lo mejor de la ruta viene a partir de ahora |
Nos ponemos en la faena, empiezan a emerger imponentes proas rocosas |
Paredones cimeros del Puntal de los Hayales, en la imagen vemos a uno de los que seguramente han sido responsables del festín que os comentaba antes |
Nachete toma la delantera, el exiguo sendero lo han formado los animales, y nos obliga a ir en fila de uno, y con precaución de no resbalar e irnos ladera abajo |
Por si el lugar no era lo suficientemente espectacular, ahí estamos nosotros dándole un poco más de colorido |
La faja es muy extensa, y un continuo caminar de sube y baja |
A veces eran varias las veredillas que encontrábamos, ideal para poder fotografiar al grupo desde un nivel superior |
Las cámaras echaban humo |
En la parte superior de la faja el paisaje resultaba igualmente brutal |
Como le dije a Toni en esos momentos, la Ordesa en miniatura particular de la Serranía |
¿Qué os parece este saliente rocoso? |
Yo creo que no he exagerado tanto y tanto en la comparación de antes... |
Os pongo esta foto en la que salen Toni, Maru, Nachete y Laia y calibréis la grandeza del lugar |
Mirando abajo veíamos el cañón que forma el Arroyo Almagrero, que ya quisieran para sí algunos ríos más grandes |
Una vez recorrida la faja bajamos hasta el cauce del Almagrero, para seguirlo aguas arriba en dirección a la Cueva de las Grajas... |
...al final, por cuestiones de tiempo, lo dejamos para otra ocasión, al llegar a estos roquedos hicimos una parada a comer y dimos la vuelta |
No vimos la cueva, pero al volver a subir a la faja el Almagrero nos regaló esta pequeña maravilla, y no, no me estoy refiriendo al del gorro |
Indudablemente esta cascada fue merecedora de una nueva foto de grupo, Laia prefirió seguir jugando con el agua |
Aquí la tenéis ahora correteando por la faja, con el profundo cañón bajo ella |
De nuevo por la faja, esta vez en sentido contrario, igualmente espectacular |
Localizamos los hitos que nos desvían al sendero por el ya van Toni y Maru |
Ahora si que caminábamos más pegados a los acantilados... |
...hasta que llegamos a este punto donde posa Eva, y en el que parecía que no se podía continuar... |
...pero si se podía, el sendero seguía, como excavado en la roca |
Y el tramo que nos esperaba ahora, camuflado en la caliza, realmente espectacular, merecedor de dedicarle unas cuantas fotos |
Aquí una toma amplia, para que podáis calibrar el tamaño de la pared |
Y con más zoom, para que podáis captar mejor la estrechez del paso |
Empequeñecidos ante lo que nos rodeaba |
El sendero nos dejaba al descubierto nuevas maravillas, ya fueran en forma de formaciones rocosas... |
...o bien rincones tan increíbles como este, ¿qué está mirando Eva?... |
...esto hacia abajo... |
...y esto hacia arriba |
Poco a poco el sendero se va volviendo más dócil, hasta llegar de nuevo al Almagrero, que nos vuelve a regalar otra cascada |
Volvemos a caminar por el bosque... |
...y en esos momentos, empieza a nevar con más intensidad, aunque duró poco |
Algunos claros se abren entre quejigos y pinos, donde más disfruta Laia |
Zona propensa esta para la formación de cenagales, por suerte solo tuvimos que atravesar uno pequeño |
Desde abajo vemos así el mirador donde nos habíamos asomado unas horas antes |
Turno ahora de sortear el arroyo, este lo solucionamos con un salto... |
...pero este precisó de la construcción de un puente, Eva y Maru toman el mando de las operaciones |
Gran trabajo de zapadoras, Maru cruzando el arroyo... |
...y el menda, al final todos con los pies secos |
Un nuevo vistazo, entre los copos de nieve, al mirador... |
...y el otoño, que vuelve a aparecer de repente |
Los adornos navideños han llegado, sin ellas quererlo, al hogar de unas arañas |
Y nos despedimos con esta imagen del Puntal de los Hayales, tomada desde el punto de inicio y final de la ruta, a continuación un pequeño vídeo con tres momentos de la ruta |
Hola Dani, no ens has penjat el track? perquè ixa ruta tan espectacular l'hem de fer precís.
ResponderEliminarHola Xavi.
EliminarEn el comentari de baix Toni explica millor el per què no hi ha track ni dades més concretes de la ruta, a part de que em vaig deixar el gps a Betxí....
Hola Dani.
ResponderEliminarSiempre me he dicho como quedaría esta ruta en fotos en internet. Tendré más de tres mil fotos de este paraje pero ya sabes que por ahora no quiero colgar ninguna ruta. El paraje esta en una finca que es privada, pero se puede pasar (no hay prohibición), pero siempre he temido que si la cuelgo aquí en Cuenca, se haría famosa rápidamente e iría gente con la consecuencia del continuo trasiego pasando por la finca privada, cosa que al dueño al final no le haría ni pizca de gracia. Además de hecho, aparte del sendero ancestral del los pastores, hay un trozo de senda (la Faja de Toni) que es invención mía. Me costó dos o tres visitas para explorar y ver si se podía pasar por ahí. Todo en aras de conseguir que la ruta fuera circular (o semicircular). Y el resultado a mí me parece Impresionante y Espectacular. Una señora rutaza. Tardamos unas 6 horas, y eso que no vimos ni la grandiosa cueva de las Grajas y ni la Bodega, cosa que hubiera hecho que nos fueramos a las 8/9 horas. Jejeje, como en las grandes rutas pirenaicas.
Consideralo un regalo para Eva y para ti, y la verdad que lo has plasmado con un rigor y maestría. Como se nota que eres un autentico experto en narrar, contar y fotografiar.
Además de todo esto y para poner la guinda, nos lo pasamos pipa todos, fue un dia estupendo y encima me visteis cabreado, jejeje, con lo del mastín Felipe ;-)
Un abrazo fuerte.
Hola Toni.
EliminarUn regalo?, un regalazo es los que fue!!!, como he dicho, una ruta de las que marcan, y eso que se nos quedaron en el alero la cueva y la Bodega, me alegro de que te haya gustado la crónica, la verdad es que me costó bastante inspirarme y enfocarla, primero por, y tal como me pediste, no dar muchos datos concretos, y luego por que temía de que no estuviese a la altura de lo que fue un recorrido espectacular, además estuve pensándome hasta última hora si incluir o no la "persecución amistosa y sigilosa" del amigo Felipe, al final lo pasé por alto, quizás lo rememore en futuros años, tipo abuelo "batallitas" jajaja.
Un abrazaco.
Hola Dani.
ResponderEliminarVaya pedazo de ruta...Esa faja,si en fotografía ya es una pasada,en directo ni te digo....Yo iba a preguntarte por el track de la misma,pero Toni ya a contestado y creo que es lógico que esa zona siga en plan salvaje...A mi me pasa algo similar con una ruta que tengo pendiente por Moixent y que promete ser espectacular,pero de la que no subiré el track....
Broche de oro a vuestro paso por la Serranía de Cuenca...
Un abrazo.
Hola Juane.
EliminarDespués de ver todo lo que nos muestra Toni semana a semana en su blog fuimos a Cuenca con las expectativas muy altas, pero en ningún momento esperábamos encontrarnos con parajes tan espectaculares como los que vimos en este autentico rutón.
Un abrazo.
Hola Dani
ResponderEliminarVaya faja guapa!!!! y vaya aguas cristalinas!!! la verdad que la Serranía de Cuenca da mucho de sí y aquí se demuestra una vez más.
Por lo que se dice en los comentarios entiendo perfectamente que no cuelgues el track, pero claro, si que nos gustaría jajajaja.
Un abrazo
Jose
TROTASENDES BENICALAP
Hola Jose.
EliminarLo del track difícil estará, pues me dejé el gps en casa, por eso de la ruta anterior al San Felipe tampoco hay.
La faja fue digamos el culmen a una ruta fantástica, y eso que se nos quedaron un par de cositas por visitar, por lo que la excusa para volver a la Serranía ya está montada jeje.
Un abrazo.
Hola Dani.
ResponderEliminarEspectacular recorrido, es lo que tiene ir acompañado de un experto conocedor de la zona. De veras que me ha dejado sorprendido, tanta belleza y espectacularidad. Esas aguas cristalinas, la faja de "Toni", que por momento parecía imposible continuar, el bosque de quejigos, con su manto de hojas, en fin que dan ganar de coger la furgo y marcharse ya para la serranía de Cuenca.
Pues nada, que si mal no recuerdo, dijiste tres semanas, así que nos queda una tercera y última entrega, ¡no tardes!. Un salduo
Hola Eduardo.
EliminarEs verdad, este tipo de rutas, si no la haces acompañado de alguien que se ha pateado la zona decenas de veces, mejor no la hagas, te podrías meter en un embolao y seguramente te perderías cosas como por ejemplo esa cascada, y seguramente ni se te pasaría por la cabeza recorrer esa faja, ni ya te digo encontrar el sendero ancestral, una suerte contar con un guía como Toni.
Esta semana me retrasé un poco al publicar (estabamos en Pirineos), pero la siguiente, el sábado, como está "mandao", ya verás como te gustará también.
Un saludo.
Jeje, te retrasastes, para retraso el que llevo yo, que voy con dos meses de retraso. Que cayadito te tenías lo del pirineo, ahora si que me has dejado con ganas de ver las siguientes entradas.
EliminarYo estuve el domingo en el Moncayo, subiendo por el cucharón, que estaba a petar de nieve, disfrute tanto, que igual me vuelvo a acercar el domingo para subir por los gendarmes. Un Saludo
Pues a ponerse al día jejeje, que queremos ver pronto esa crónica (o crónicas, si vuelves a subir el domingo) del Moncayo, unos amigos míos estuvieron hace un par de domingos, y si, me dijeron que estaba con mucha nieve aún, que es como más bonita está esta montaña.
EliminarYo le daré prioridad a la ascensión que hicimos en Pirineos y la publicaré tras la última de Cuenca, luego ya iré colgando todo lo que tengo "colgado" por ahí jeje.
Un slaudo.
¡Hola Dani! Rutaza en toda regla y contada con el rigor y el humor que te caracteriza y que tanto nos divierte. Desde luego es una ruta impresionante. Como dice Toni, de colgar el track se convertiría en una ruta muy transitada. Tiene todos los ingredientes para ello: barrancos, riachuelos, cortados, cañones, fajas y esa senda imposible en la pared que da vértigo. Desde luego, REGALAZO.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola Emilio.
EliminarNo podemos negar que nos sentimos unos privilegiados de que Toni nos mostrara estos rincones, que de no ser un buen conocedor de la zona como es él, seguramente nos hubiesen pasado desapercibidos a cualquier neófito de la Serranía como somos nosotros, entiendo perfectamente su deseo de que este lugar no se de a conocer masivamente, ya se sabe lo que conlleva ello, incluso le dije que no publicaría crónica si me lo pedía, no me hubiese importado, con el regalo de habernos mostrado estos parajes ya era suficiente.
Un abrazo.
Hola Dani no seré yo quien os lleve la contraria a todos, gran ruta si señor. Lástima que nos os diera tiempo a terminar de completar el recorrido. Maldito tiempo jejeje.
ResponderEliminarSaludos
Hola Jose.
EliminarYa si hubiésemos visto la cueva y la Bodega el recorrido hubiese sido ya "pa cagarse", pero lo que tu dices, el tiempo, que aprisa corre el maldito jejeje, pero a la Serranía volvemos fijo, hay un montón de lugares increíbles por allí.
Un saludo.