27 de febrero de 2025

Soum des Salettes (2976 m.)

 Sábado 23 de septiembre de 2023

Tras dos días de inestabilidad meteorológica se anunciaba un sábado de cielos despejados, lo que me permitiría rematar estas vacaciones pirenaicas con una nueva ascensión. En la lista habían candidatos como el Pic de Néouvielle o el Pic de Lustou, ambas cimas de 3000 metros, o el Soum des Salettes, a la que le faltan 24 metros para serlo. El motivo por el cual escogí, con gran acierto, esta última, está en una de las estanterías de mi biblioteca personal...



50 Montañas del Pirineo, Grandes cimas por debajo de los 3000 metros, de David Atela (Desnivel Ediciones) es una de las guías más consultadas de mi biblioteca. Gracias a este libro de bolsillo he descubierto y ascendido cimas como el Tuc deth Pòrt de Vielha, el Pic de Peguera, el Tuc de Maubèrme, el Pic de Tristaina o este Soum des Salettes.

La ansiada estabilidad meteorológica tardó en presentarse en Piau Engaly. Llovía cuando llegué allí a última hora de la tarde, se tiró toda la noche lloviendo y continuaba chispeando cuando sonó la alarma a las siete de la mañana. Ante tal panorama me permití la cortesía de estirar una hora más el estar calentito dentro del saco de dormir. Cuando ya por fin me animé a salir, después de desayunar, ya no llovía, pero seguía muy cubierto, así que sin demasiadas pretensiones eché a andar, con la pesimista idea rondando en mi cabeza de que en cualquier momento me tendría que dar la vuelta, pues lejos de hacer ademán de despejar pintaba más a que se pondría a llover de nuevo. Pero finalmente, y tras varios amagos, y justo cuando me disponía a afrontar la subida al Port de Campbieil, las nubes, al mismo tiempo que mi pesimismo, empezaron a disipar, y poco a poco se me fue presentando el fantástico paisaje que tenía alrededor y del que disfrutaría durante el resto de esta jornada de montaña en la zona sur de la reserva del Néouvielle, y no solo eso, sino que además la persistente lluvia de la noche había caído en forma de nieve en cotas altas, dejando unos centímetros de manto nivoso a partir de los 2700 metros, lo cual le añadió un poco de picante blanco a la parte final del ascenso, ya que tuve que estar atento al posible hielo que se hubiese podido formar, que no fue el caso. Arriba en la cima, estuve más alto que las nubes, un privilegio que en esos precisos momentos solo estaba al alcance de algunos de los gigantes del Pirineo, suena osado decirlo, pero por unos minutos me sentí como tal... La cima de este Soum des Salettes, al que también se le conoce como Pic des Aguilous, me dejaba un imborrable recuerdo, y puso la guinda perfecta a estas solitarias vacaciones pirenaicas, las cuales creo que aproveché muy bien...

Punto de inicio de esta ascensión, en la estación invernal de Piau Engaly. Paneles con información sobre el entorno, de los diferentes recorridos y la reglamentación del parque nacional.

Bajé al valle, Vallé du Badet. En circunstancias normales hubiese visto las murallas, de más de 1200 metros de los Pics d'Estaragne, pero las plomizas nubes me privaron de ello. Las vacas que habían por allí me miraban con cara de a donde va este tío...

Tomé inicialmente el ramal hacia la Hourquette de Chermentas. Valle de libro, por el que se desliza la Neste de Badet.

Filigranas acuáticas de la Neste de Badet.

Por momentos parecía que las nubes disipaban...

...pero de momento se quedaban en amagos, tan efímeros que apenas me daba tiempo de identificar las montañas que me rodeaban.

Llegué a este pequeño circo, en el que encontré...

...esta coqueta cabaña/refugio, la Cabane Lac de Badet, muy bien cuidada y equipada en su interior.

Y como habréis deducido por el nombre de la cabaña, a escasos 50 metros se encuentra el pequeño Lac de Badet...

...que puso la coqueta nota lacustre a la ascensión.

Visitado el lago abandoné la ruta a la Hourquette de Chermentas y tomé un tímido sendero que me debería de conectar con la ruta al Port de Campbieil.

En otro amago de despejar pude ver la citada Hourquette de Chermentas, desde la que se debe de obtener una espectacular panorámica del Cirque de Barroude. Habrá que volver para comprobarlo.

Además de para ver la Hourquette, este amago de despejar me sirvió para comprobar que la lluvia de la noche había sido nieve en cotas superiores.

Durante este tramo de transición, y en un nuevo amago de despejar, me pareció distinguir ¿el Port de Campbieil?...

...¡¡¡efectivamente!!!...

...y además parecía que esto ya no era un amago, sino que iba a empezar a despejar definitivamente.

Identificado visualmente el Port de Campbieil no me costó nada ubicar mi objetivo, el Soum des Salettes...

...el cual también se estaba quitando las nubes de encima...

...dejando estampas tan chulas como esta.

De vuelta al sendero hitado deseché un ramal a la Hourquette de Heas y seguí por el del Port de Campbieil.

Me esperaba la exigente subida a este collado. El sol se imponía al fin.

La subida al Port de Campbieil se hace por un pedregal, al contrario de lo que pueda aparentar, bastante estable. A la derecha quedan los escarpes y agujas del Lenquo de Capo.

Con casi media subida al collado finiquitada pude ver emerger de entre las nubes...

...el Pic de la Géla, también reseñado en el libro que comentaba al principio.

Tremendas pedreras las que se desprenden en la vertiente oriental del Soum des Salettes.

Cerca del Port de Campbieil reparé en esta planta. No es otra que el acónito común, Aconitum napellus, también conocida como matalobo, cuya ingestión puede ser letal. Os recomiendo la lectura de estos dos artículos (1 y 2) de la Revista Desnivel.

Alcancé a un grupo de veteranos montañeros franceses, y unos minutos después el Port de Campbieil, donde soplaba un gélido viento que requirió ponerme toda la ropa de abrigo que tenía disponible. Uno de los montañeros me hizo esta foto.

No fue muy larga la parada en el Port de Campbieil, y al mismo tiempo que los compis franceses me puse con la parte final de la ascensión...

...que pasaba por remontar la pala que salva los 380 metros de desnivel que existen entre collado y cima.

De momento solo fui encontrando pequeñas manchas de nieve, aunque más arriba se intuía algo más.

Pala norte del Soum des Salettes, hubo que trabajársela.

Eso si, el panorama que iba quedando a mis espaldas era excelso, con algunos de los gigantes del Néouvielle...

...como el Pic Long y Pic Badet...

...y el Pic de Lentilla, en cuya cima había estado unos días antes.

Agujas de Lenquo de Capo...

...con algunos de los veteranos montañeros franceses como figurantes.

Circo de la vertiente occidental del Soum des Salettes. Al fondo vi despuntar sobre las nubes...

...el macizo del Vignemale. Una visión de las que no se olvidan.

Alcancé la corona rocosa somital, en la que efectivamente, había más nieve, aunque por suerte no había hielo.

Alcanzando a la avanzadilla francesa...

...y colocándome en la tête de la course en solitario, ya me veía enfundado con el maillot de puntos rojos 😉.

Doble cima del vecino Pene Blanque...

...que en esos momentos hacían honor a su nombre. Al fondo las inseparables Punta Suelza y Punta Fulsa.

La roca y la nieve habían creado un bonito lienzo.

Y bajo la vigilancia de los 3000 del Néouvielle la inclinada pala llegaba a su fin...

...solo me quedaba rematar el ascenso con un sencilla trepada.

La cima del Soum des Salettes está conformada por una cresta llana de unos 50 metros.

Las nubes fueron chocando con ella creando un precioso espectáculo. No me importó para nada no tener vistas a larga distancia.

Esta cresta cimera me sirvió para constatar que había acumulada más nieve en la vertiente norte que en la sur.

El rato que estuve allí en soledad, disfrutando de todo esto, es de los que no se olvidan con facilidad.

Qué suerte tuve de haber subido a esta montaña con tales condiciones.

Paso a identificaros algunas de las cimas que emergieron de las nubes, ya os aviso que son todas gigantes pirenaicos. Empecemos por la zona del Néouvielle...

...Pic Long y Pic de Badet...

...Pic de Lentilla y Pic de Campbieil...

...y tras la Hourquette de Cap de Long o de Badet asoman Turon de Néouvielle, Trois Conseillers y Pic de Néouvielle.

Nos movemos en la dirección opuesta. Espectacular fotografía con el Vignemale y uno de los hitos cimeros. No en vano es la que he escogido para encabezar este relato.

Pic de Barbe de Bouc y Pic d'Ardiden, que no son 3000's por los pelos.

Grande Fache (Gran Facha), Picos de la Frondella y Balaïtous.

El punto culmen del espectáculo visual se estaba desarrollando en la zona de Ordesa, con Monte Perdido como actor principal.

Aquí las tenemos a las Treserols, o Tres Sorores, también con las cimas de Ordesa que asoman a Gavarnie.

Monte Perdido, Dedo de Monte Perdido, Cuello del Cilindro, Cilindro, Pico de Marboré... Palabras mayores.

¿Y que me decís de esto?, Marboré, Picos de la Cascada, Torre, Casco, Brecha de Roland, Bazillac, Dedo, Taillón, Gabieto... Auténtico orgasmo visual.

Al rato llegaron, y disfrutaron también del espectáculo, el grupo de franceses, que se vio reducido a tres.

Me vinieron de perlas para hacerme la foto de cima, y mira si eran majetes que les pedí una y me hicieron unas cuantas y en todas direcciones 😉.

Soum des Salettes...

...también conocido como Pic des Aguilous, 2976 metros.

Tras ventilarme un bocata tortilla en la cima regresé al Port de Campbieil.

¡¡¡Qué gran acierto había sido ascender este Soum des Salettes!!!

Esta simpática pareja de franceses decidieron al final no subir a la cima y esperaban a sus compañeros en el vivac del collado. Me paré hablar un rato con ellos. Recuerdo que la charla fue muy agradable y divertida.

También fue muy divertido hacer de bajada el pedregal del Port de Campbieil 🤪.

El Port de Campbieil, con una visibilidad distinta a la que tuve durante la subida.

Las nubes seguían jugueteando con la cima del Soum des Salettes. Si os fijáis bien podréis ver a mis compis de cima, de regreso al Port de Campbieil.

La Hourquette de Chermentas, sin nubes que me la ocultasen ahora. Asoman tras ella Punta Suelza y Punta Fulsa.

Port de Campbieil, Lenquo de Capo y Pic de Campbieil.

A medida que fui bajando y me iba girando para ver el Soum des Salettes vi que este...

...iba cobrando la forma de un gigantesco transatlántico, con su proa y su casco.

El Vallée du Badet de nuevo, con mucha mejor visibilidad que horas antes.

Emparrado y ensimismado con el paisaje me di cuenta que me había equivocado de sendero. Para recuperar el correcto tuve que recurrir al trochemoche, cosa que supuso problema en estas laderas herbosas.

Antes de enlazar con el sendero que me llevaría de regreso a Piau Engaly me senté a relajarme un rato junto a este salto de agua.

Soum des Salettes, eternamente varado en este privilegiado entorno.

Hourquette de Chermentas de nuevo.

Y ahora si, unas horas después, puede disfrutar de las murallas de los Pics d'Estaragne.

Os puedo asegurar que las fotos no hacen verdadera justicia de la verticalidad de estas montañas.

Del fondo del Vallée de Badet, hasta el Pic de Campbieil hay un desnivel vertical de casi 1300 metros.

Vemos, semi-tapado por una nube y con diferentes estratos rocosos, el Pic d'Estaragne, ascendido, junto a Campbieil y Lentilla, unos días antes.

Qué estampa tan bella. El topónimo Salettes estaría relacionado con la sal, en referencia al uso de esta para reunir a los rebaños de ovejas. Viendo estos anchos pastizales cobra sentido la cosa.

Brutal y sobrecogedor paisaje del Pirineo Francés. Qué privilegio el haber estado unas horas en él.

Al final se quedó una tarde muy agradable, incluso hacia calorcito. Normal que hubiesen más vacas que por la mañana.

Con ellas le dediqué una última mirada al desde aquí imponente Soum des Salettes.

El espectáculo visual del valle en formato panorámico.

Y tras siete intensas horas de montaña llegaba de nuevo al parking superior de Piau Engaly. Ni el asfalto logra empañar tan extraordinario paisaje...

...con el cual me deleité una última vez antes de montarme en la furgo y volver a Bielsa.

Con el Pic de Campbieil despido este reportaje, al cual pone la guinda el siguiente vídeo. Un resumen, a ritmo de la genial Tash Sultana, de lo que dio de si esta excelente semana de vacaciones en el Pirineo.




0 comentaris:

Publicar un comentario