Vall de la Murta: Creu del Cardenal (545 m.) y el Cavall Bernat (587 m.)

Domingo 5 de noviembre de 2017


La Serra de Corbera es una de las múltiples sierras costeras que tenemos en territorio valenciano. Ubicada en ella se encuentra la Vall de la Murta, un pequeño valle con una alta carga histórica y religiosa, pero también con un elevado interés excursionista y montañero, como quedará demostrado en esta ruta, en la que subiremos a las cimas de la Creu del Cardenal y el Cavall Bernat. Qué no os engañe la modesta altura de las cimas ascendidas, ni la corta longitud de la ruta (10 kms.), ni el asequible desnivel acumulado (unos 600 m.) ya que estamos ante una ruta que nos requerirá cierta exigencia física, ya que encontraremos empinados tramos de sendero, tanto en subida como en bajada, nada sencillos de andar, unas veces por el matorral que los cubre, otras por ser terreno lapiaz, y otras por una suma de las dos cosas, también nos obligará a trepar la canal que utilizaremos para acceder a la cima del Cavall Bernat. El esfuerzo se verá recompensado con unos parajes y vistas excelentes durante todo el recorrido.

La excursión se inicia en el amplio parking de la Murta, al que habremos llegado desde Alzira (València). Nada más entrar en el paraje, en la Casa de la Murta, nos tocara "fichar", tendremos que dar un nombre, el correspondiente DNI y el numero de personas que integramos el grupo. Al acabar la ruta deberemos notificar que abandonamos el paraje. 
Nada más dejar atrás la casa obviaremos el camino que se dirige al Monestir de la Murta (lo visitaremos al final) y tomaremos la opción del sendero botánico de l'Ombria, en el que andaremos rodeados de una amplia variedad de especies botánicas como pinos, romero, tomillo, murta (mirto), madroños, fresnos, encinas, palmito etc, y que se irá estrechando y enmarañando cada vez más. Así llegaremos al Pas del Pobre, antiguo paso de peregrinos y una gran ventana hacia tierras y sierras más meridionales e interiores. Este paso marcará también un punto de inflexión en la ruta, ya que pasaremos de ir por totalmente por la sombra a navegar a pleno sol.
Desde el Pas del Pobre continuaremos, por terreno lapiaz, el marcado rumbo E, ligeramente S, establecido desde el principio, en dirección al Pic de les Gralles, cuyo collado oriental ganaremos tras superar un fuerte repecho. Desde este punto obtendremos una fantástica perspectiva del Vall de la Murta, así como de las dos cimas a ascender. 
Desestimaremos subir al Pic de les Gralles y mantendremos rumbo, por un sendero cada vez más escondido entre la coscoja. Llegaremos a la base de l'Orella d'Ase occidental y viraremos a norte, en busca del collado que separa esta cima de la de la Creu del Cardenal, en el que obtendremos unas brutales perspectivas de los cortados que se desprenden al este de las cimas gemelas de l'Orella d'Ase y de la del Matxo Flac, así como unas nítidas vistas del litoral que atañe a la comarca de la Ribera Baixa, así como sus numerosos pueblos. Desde el collado giraremos a NO y crestearemos hasta la concurrida cima de la Creu del Cardenal, en la que nos será complicado encontrar un hueco en el que sentarnos a disfrutar de las bonitas vistas cimeras, prácticamente calcadas a las del collado previo.
Nos esperaba ahora la cima del Cavall Bernat, que se mostraba apetitosa desde la Creu del Cardenal. Desde esta última afrontaremos un fuerte descenso, que nos depositará en el Pas de Sant Sofí, obviaremos el PR que desciende a la Murta e intentaremos no liarnos con los múltiples senderillos que se aproximan a la canal de subida al Cavall Bernat. Una vez a pie de esta nos aguardará una exigente subida, primero físicamente, por lo tieso del terreno, y luego técnicamente, por la pequeña escalada que tendremos que realizar para ganar el colladete previo a la cima, desde el que ganaremos el vértice geodésico ya sin ningún tipo de problema. Pese a su modesta altura este Cavall Bernat nos brindará unas vistas de excepción hacia los cuatro puntos cardinales, y serán muchos los enclaves que podremos localizar desde allí. Desde Aitana a la mismísima Penyagolosa, pasando por el Pico del Ave y l'Albufera de València, imaginaos si caben sierras, llanos, comarcas y montañas dentro de ese radio visual.
Desde la cima empezaremos a seguir el PR que sube a esta desde la Murta. Durante el primer tramo iremos sobre el ancho lomo de la montaña, perdiendo altura de forma muy progresiva, para de repente empezar a perder metros de forma muy brusca, en el que quizás sea el tramo más soso de toda la excursión. Esta volverá a recuperar su esplendor al volver a alcanzar el fondo del valle, volverá la frondosa vegetación, y además, un pequeño acueducto que servía para llevar el agua desde la Font de Murta hasta el monasterio acompañará nuestros pasos. Una vez en el Monestir de la Murta indagaremos, gracias a los diferentes paneles informativos, en la historia del lugar, que es mucha y muy interesante. Empapados por la historia de la Murta regresaremos, por un amplio carril, hasta el punto de control, y de ahí al parking, donde poníamos punto y final a esta ruta.

Hemos tardado en venir a esta Serra de Corbera, pero visto lo visto, seguro que volveremos muy pronto.

Un saludo a tod@s.

Esta primera foto deja a las claras la exuberancia vegetal y arbórea de ese valle, especialmente en su parte baja.

De vez en cuando algún claro de bosque nos permitía ver los objetivos de hoy, en el lado opuesto del valle al que íbamos nosotros.

En este primer tramo, si lo deseamos, y vamos en la época adecuda, podremos ponernos como el quico de comer madroños.

En otro claro entre el ramaje de los fresnos pudimos ver por primera vez el Monestir de la Murta.

Más bien sus ruinas, que acercamos con el zoom. Lo visitaremos en la parte final de la ruta.

El amplio y cómodo sendero que empezamos siguiendo se fue emboscando y volviendo rebelde poco a poco.

Así ganamos el Pas de Pobre, antiguo paso de peregrinaje entre los monasterios de la Murta y el de Santa María de la Valldigna. En primer término el Pic de les Gralles, en el centro la Creu del Cardenal y a la izquierda el Cavall Bernat.

Tras el Pas del Pobre nos aguarda un duro repecho, se nos abren amplias panorámicas hacia comarcas interiores.

Ganamos un nuevo collado, rodeados de coscoja, se nos queda esta perspectiva de la Vall de la Murta.

Desde el collado seguimos subiendo, encontrando buenos miradores hacia las cimas que ascenderemos...

...la Creu del Cardenal...

...y el Cavall Bernat, y la marcada canal/diagonal por la que accederíamos a su cima.

Llegamos a la base de l'Orella d'Ase occidental, tras la que asoma la oriental. Vemos también el vecino valle la Casella.

Serra de les Agulles, y al fondo Penyalba y Mondúber.

Ganamos el collado que nos asoma a la vertiente oriental de la montaña, recibimos este brutal premio en forma de vistas. Vemos las dos Orelles d'Ase, y el puntiagudo Matxo Flac...

...al que le dedicamos una foto para el solo, al fondo el Pic de la Ratlla.

Impresionante. ¿Como no habíamos venido aún a este paraje, teniéndolo tan cerca de casa?.

Otra más de este arrebatador paisaje, que nos tenía cautivados. Una muestra más de que a las montañas no hay que medirlas por su altura sino por su belleza.

Iniciamos un fácil cresteo hacia la Creu del Cardenal, detrás el Cavall Bernat.

En este tramo se nos abrieron buenas vistas hacia el litoral, os las enseñaré en las fotos cimeras. Esta se la hice a l'Albufera y a la ciudad de València, luego en casa vi que también salía Penyagolosa.

Metros finales de subida, con la estética cuerda de la Serra de Corbera a nuestras espaldas.

Cima de la Creu del Cardenal, 545 metros.

Tendremos muy buenas visas desde la cima, vemos dos viejos conocidos, Benicadell y Montcabrer.

La Ribera Alta, con Alzira, Guadassuar i l'Alcúdia, al fondo destacan el Pico del Ave (der.) y el Pico Martés (izq.).

Vitas hacia el Cavall Bernat y la Ribera Baixa, con las poblaciones de Llaurí y Sueca.

De nuevo Orelles d'Ase, Matxo Flac y la Ratlla.

Más de la Ribera Baixa, con Cullera, en el centro, y sus playas.

Os enseñaré más vistas, pero será ya desde la cima del Cavall Bernat, a la cual nos dirigiremos ahora.

Bajaremos hasta el Pas de Sant Sofí, desde donde vemos así la Creu del Cardenal.

Llegamos a la base del Cavall Bernat, ahora habrá que buscar un camino que nos lleve hasta la canal, único punto por el que se puede meter mano a esta montaña desde esta vertiente.

Por increíble que parezca si que había camino, y llegamos a pie de canal, por la que ya está dispuesta a subir Laia.

A diferencia de lo que pudiera parecer desde lejos, tratándose de una torrentera, el terreno es bastante sólido.

Esos sí, desde lejos parecía empinada, y lo estaba.

Poco a poco, y disfrutando de este toque aventurero de la ruta, le iremos ganando metros a esta canal.

Llegando casi arriba ya será necesario hacer uso de las manos.

Y los últimos 5/6 metros nos exigirán ya una trepada en toda regla, muy sencilla, eso sí, y con muy buenos agarres.

Superada la trepada se llega a este colladete, alcanzar la cima será ya coser y cantar.

Antes nos asomaremos a ver estos bonitos precipicios calizos.

Desde ellos veremos a un grupo que iba detrás nuestro negociando la trepada final. Desde esta toma se aprecia mejor su verticalidad.

Los vemos con más detalle gracias al zoom.

El Cavall Bernat está coronado por un vértice geodésico.

Cima del Cavall Bernat, 587 metros.

Sin llegar a los 600 metros gozaremos de unas vistas de primer orden, Serra de Corbera hacia el SE.

Infinidad de montañas hacia el sur, algunas de las más emblemáticas que se pueden ver en esta imagen son el Mondúber, Benicadell, Aitana o el Moncabrer.

El horizonte es amplísimo en esta toma hacia la Ribera Alta y comarcas valencianas más interiores.

Y como, vistazas hacia el azul y cercano Mediterráneo.

Iniciamos la bajada hacia la Murta, seguiremos ahora este largo tramo de cuerda...

...en el que nos podremos asomar a balcones como este.

Por el ancho lomo de la sierra, siempre con extensas vistas.

Tras un tramo descendente sin mucha historia regresamos al fondo del valle, donde la ruta recobra el atractivo.

De nuevo rodeados de vegetación pasaremos por la Font de la Murta, descubierta por un zahorí en 1582.

Para poder llevar el agua de la fuente hasta el monasterio se construyó este pequeño acueducto, junto al que transcurre nuestro sendero.

Esta obra hidráulica, que va cogiendo altura poco a poco, ha sufrido diversas remodelaciones y restauraciones a lo largo de los años.

El acueducto se construyó definitivamente en piedra durante el periodo de 1771-1773.

Sin duda el tramo más bonito de este acueducto son estos arcos.

Encontramos las ruinas de la Ermita de Santa Marta, en los que se conservan estos frescos en una de sus paredes.

El enclave de la ermita es de lo más frondoso, y los madroños crecen grandes como el que vemos en la imagen.

El agua de la fuente se almacena en esta balsa, detrás el Monestir de la Murta.

Monestir de Nostra Senyora de la Murta, se empezó a construir en 1375, aunque hay indicios de que en el siglo VI ya había un convento servetano en el valle. Si queréis saber más sobre él, pinchad en este enlace.

Evidentemente y con buen criterio no se puede acceder al interior de las ruinas, las fotografiaremos desde fuera.

En los alrededores del monasterio y sobre el Barranc de la Murta, se encuentra el Pont de Felip II, de la misma época del monasterio y que debe su nombre a una visita del monarca español al lugar.

Realizada la parte cultural de la ruta regresaremos al punto de inicio.

La Vall de la Murta desde el parking, gran sabor de boca el que nos dejaba esta excursión.