Serra de Corbera: Barranc de l'Infern - Pas de la Mora - la Ratlla (625 m.), l'Ouet (528 m.) y la Cova de la Galera

 Domingo 11 de abril de 2021.

Nuestra tercera visita a la valenciana Serra de Corbera. En esta corta pero intensa ruta matinal volvimos a subir a la Ratlla, pero de forma más directa que la vez anterior; nos anotamos l'Ouet, que lo teníamos pendiente; y visitamos la Cova de la Galera, todo ello subiendo, y bajando, por los contrafuertes y barrancos que se desprenden hacia Favara. Es más, toda la ruta transcurrió dentro del término municipal de esta población de la Ribera Baixa.

En un principio tenía pensado iniciar la ruta desde las mismas calles de Favara, pero entre que se me pegaron las sábanas y llegué allí cerca de las diez, más los tormentones que habían anunciados para después de mediodía decidí tirar monte arriba con la furgo y acortar la ruta hasta donde me fuese posible. Al final, y mira por donde, eso hizo que el 100% de los poco más de siete kilómetros que tuvo la ruta fuesen íntegramente por senderos. También es reseñable que en esos siete kilómetros la ruta acumulase 700 metros de desnivel positivo.

Arrancamos en la parte más alta de una finca de naranjos, donde habían aparcados algunos vehículos y unos paneles informativos sobre diversas rutas y la Cova de la Galera, señal de que este es un sitio bastante frecuente en el que empezar rutas. Nada más bajar de la furgo aparece el primer sendero, que nos sube hasta el lecho del Barranc de la Sima, del que saldremos de inmediato para iniciar una boscosa travesía que nos servirá de nexo entre el mencionado Barranc de la Sima y el Barranc de l'Infern, por el que acometeremos gran parte de la subida a la Ratlla. La subida por el barranco, una vez saldremos de la zona más frondosa, es potente, y apenas regala una tregua, así que será cuestión de poner el modo diésel e ir disfrutando del entorno, la vegetación y las encajonadas vistas hacia Favara, las "marjals" de Cullera y su Muntanyeta de les Raboses.

La primera senda nos muestra una exuberante frondosidad... 

...pero nada comparado con la que encontraremos cuando llegaremos al Barranc de l'Infern. Aunque parezca mentira por ahí se interna un sendero...

...y rodeados de semejante vergel salvaremos los primeros metros de la remontada al barranco.

Un poco más arriba la vegetación mengua en frondosidad, lo cual nos permite ver todo el barranco a remontar, y el desnivel a salvar hasta el pico de la Ratlla, cuyos cingles cimeros aparecen al fondo.

Mirando atrás vemos mejor el encajonamiento del barranco, con Favara, los humedales y arrozales de la llanura y Cullera.

La subida es exigente en todo momento, pero quizás este sea su sector más duro. Espectaculares laderas abarrancadas.

La remontada al barranco es ardua, pero satisfactoria a nivel visual, tendremos vistas al propio barranco...

...y un poco más arriba hacia el sector más nor-occidental y espectacular de esta Serra de Corbera, con las cimas de l'Orella d'Ase S, la Creu del Cardenal y el Cavall Bernat.

El sendero abandona el cauce del barranco para seguir subiendo hacia el Pla de Simetes, aunque nosotros nos desviaremos antes para tomar un ramal de bastante reciente abertura que se dirige hacia el Pas de la Mora. La subida no pierde un ápice de dureza y enseguida nos asoma a las barrancadas y fajas de la vertiente de la Ratlla que mira a levante, incluso transitaremos por alguna de ellas. Así llegamos al Pas de la Mora, un corto y estrecho paso en repisa, y que visto de lejos parece que tiene mucha exposición, aunque luego cuando se está pasando por él es más ancho de lo que parece y no reviste dificultad alguna, aunque eso dependerá del vértigo y la aprensión al vacío de cada uno. Superado este interesante paso una última rampa nos dejará de forma directa en la cima de la Ratlla, también conocida como Mola de Favara, punto culminante de esta Serra de Corbera y techo de la comarca de la Ribera Baixa. Esta cima supone un excelente mirador hacia el Mediterráneo, montañas como el Montgó el Mondúver, o la propia continuidad de la Serra de Corbera hacia el norte, de escarpada belleza. Era el sitio ideal para almorzar y así lo hicimos.

Hemos abandonado la ruta normal al Pla de Simetes y nos encaminamos hacia el Pas de la Mora. Buenas vistas al Barranc de l'Infern.

La caliza desnuda empieza a predominar. Tras estos cingles volvemos a ver el dentado perfil de este sector más septentrional de la Serra de Corbera.

Brutales Matxo Flac y Orelles d'Ase. Más modesta resulta la cima de l'Ouet, en cuyo sendero de subida ya vemos un hormigueo de gente.

El Cavall Bernat también reclama un primer plano y se lo otorgamos.

Seguimos subiendo y nos asomamos a esta canal, nos subiremos a la elevación de la izquierda...

...desde ella vemos este cortado, y la faja por la que prosigue la subida.

Laia ya está dispuesta a subir por la susodicha faja.

Nos asomamos a las laderas y barrancos que caen hacia levante. También vemos el cordal, por el que hace 3 años y pico llegamos a la cima del la Ratlla, al fondo vemos...

...el picudo Mondúver.

Y llegamos al Pas de la Mora...

...hay buen ambiente, y así de buenas a primeras parece que pueda echar para atrás al que tenga aprensión al vacío, pero es más ancho de lo que parece.

Laia lo cruzó como un tiro, la tuve que llamar para que volviera y así tener una figurante en el paso 😉.

Foto desde el Pas de la Mora.

Una vez solventado el paso ya solo nos queda un último esfuerzo para alcanzar la cima de la Ratlla.

Poco antes de llegar arriba distinguimos el perfil, en el centro de la imagen, de la Serra Falconera, con el Molló de la Creu, o de Falconera, a la izquierda.

Casi estamos arriba. Vemos la parte final de la subida, y los espolones que miran al mar.

Cima de la Ratlla, o Mola de Favara, 625 metros.

A este vértice le falta el pirulo. En su lugar hay un hito y un buzón. Excelentes vistas hacia los arrozales de la Ribera Baixa y la turística Cullera.

El cordal que nos trajo aquí en 2018. Salimos de Tavernes de la Valldigna, subimos a l'Alt de les Creus, el Puntal de Massalari y el Puntal dels Germanells. Al fondo distinguimos el Montgó.

Estuvo bien recorrer ese cordal, pero visualmente nos gusta más la continuidad crestosa de la sierra hacia el NO. Impresionante.

Tras la Ratlla tocaba bajar al Pla de Simetes y subir a la cima de l'Ouet, pero viendo lo abarrotada que estaba su cima y el constante hormigueo de gente que subía y bajaba de ella me planteé el no hacer esta cima e ir directamente a la Cova de la Galera, pero para ello tenía que pasar igual por el Pla de Simetes, donde seguramente también me encontraría con bastante gente, así que al final decidí que si que subiríamos a l'Ouet, además, ¿a que venía ahora ese miedo de cruzarme con tanta gente?. Al carajo con el miedo!!. En el Pla de Simetes encontramos dos opciones para subir a l'Ouet, la que escora a la vertiente sur de la montaña y la que sube directamente por su espinazo. Subiremos por la primera y bajaremos por la segunda. Los cruces con gente, tanto en la subida como en la bajada, fueron constantes. Os juro, y no exagero, que desde que subí a Peñalara, en 2017, y al Pica d'Estats, el año siguiente, no me había encontrado con tanto gentío en una montaña. ¿Y de donde había salido toda esta gente, si donde empezamos a andar había solo un par de coches, y por el Barranc de l'Infern no me encontré con nadie?, no tardé mucho en resolver el misterio 😉, pues resulta que desde el paraje de la Casella, en la vertiente norte de la cima, es muchísimo más accesible subir. Para conseguir unos segundos de tranquilidad nos alejamos unos metros al norte de la cima.

Por cierto, el tramo comprendido entre l'Ouet y la Creu del Cardenal, y las cimas que hay entre medias es el que me falta por recorrer del cordal principal de la Serra de Corbera, pero ese ya es un terreno más escarpado, técnico y aéreo, que por supuesto no pienso hacer en solitario, así que se precisa compañer@ para realizarlo, los interesad@s ya sabéis donde localizarme 😏.

Tras almorzar ponemos rumbo hacia l'Ouet. Nos espera una buena bajada hasta el Pla de Simetes.

No perderemos de vista ese afilado perfil montañoso.

Nos asomamos al valle de la Casella. No nos pasa desapercibido el perfil de la Serra de les Agulles.

Una ruta, que aún tengo pendiente, técnica y afilada, con un paso muy aéreo y expuesto que se hace a horcajadas.

Aún tenemos que bajar un buen trecho para llegar al inicio de la subida a l'Ouet.

Alcanzamos un pequeño llano, donde vemos individualizada la cima de l'Ouet.

La mayor parte de la ruta transcurre por terreno lapiaz, así que agradecimos, sobre todo Laia y sus almohadillas, pisar tramos de sendero como este.

Pla de Simetes, con la imponente presencia de la Ratlla.

Nos ponemos con el ascenso a l'Ouet, lo haremos por esta senda que escora a la vertiente de la Casella.

Para llegar a cima deberemos salvar esa franja rocosa.

Una sencilla canal y unos escalones ayudan a solventar el escollo.

Cima de l'Ouet, también conocida como la Caseta del Guarda, 528 metros. Aunque no lo parezca tras el ovalado observatorio que hace tan característica a esta cima había un cantidad ingente de personas.

Desde el pequeño reducto de soledad que encontramos nos pudimos deleitar de nuevo, y en primera línea, de la impresionante cresta de la Serra de Corbera.

Muchas ganas de hacer la ruta que la recorre.

Mirada hacia la Casella...

...hacia donde también hay balcones guapos.

De nuevo en el Pla de Simetes nos encaminamos hacia la Cova de la Galera, a la cual no tardaremos mucho en llegar. El goteo constante de gente durante el camino ya nos avisaba que también la íbamos a encontrar concurrida, como así fue, y por desgracia allí volvimos a ser testigos del poco respeto de algunos humanos por la naturaleza, pues vimos bastantes desperdicios tirados por el suelo. De ahí a empezar a tallar nombres, o romper las estalactitas o estalagmitas de esta gran sala subterránea va solo un paso. Está claro que todos tenemos derecho a disfrutar de la naturaleza, pero también tenemos el derecho, más bien la obligación, de cuidarla y respetarla. Al final lo único que se conseguirá es que coloquen una valla y no podamos disfrutar nadie de enclaves naturales tan bonitos como esta cueva.

Nos bajamos de l'Ouet y ponemos rumbo a la Cova de la Galera. Nos despedimos de las dos cimas ascendidas, de la Ratlla...

...y del abarrotado Ouet.

Llegamos a la gran boca de entrada de la Cova de la Galera.

Nos llama la atención la vegetación que crece en la bóveda de entrada.

Desde arriba vemos que la cavidad tiene bastantes espeleotemas, tanto en el techo como en el suelo. Os dejo con las pocas fotos decentes que me salieron del interior de la cueva.

Apuntar que en la cavidad se encontraron evidencias de uso humano que se remontan a la Edad de Bronce.

Desde la cueva seguimos la continuidad del sendero que nos había traído hasta ella. A partir de entonces volvimos a ir más solos que la una. Este sendero inicia una fortísima bajada, siempre paralela al Barranc de la Sima. Con cuidado, pues el terreno era bastante técnico y con tramos de piedrecilla suelta, fuimos perdiendo cota, y el terreno inclinación, hasta que a la nos quisimos dar cuenta ya habíamos llegado de nuevo a la furgo, finalizando esta corta pero dura, a la vez que satisfactoria, ruta por esta Serra de Corbera que tanto nos gusta. La cosa se remató con un bocata y unos tercios en un bar de Favara, donde vimos evolucionar esas tormentas que al final si que se formaron y descargaron bastante agua en algunos puntos del territorio valenciano.

Tras la cueva toca bajar. Nos espera un fuerte descenso, hasta la parte superior de la finca de naranjos que vemos en la imagen.

Nos despedimos del bonito skyline de la Serra de Corbera.

Barranc de la Sima. Paralelo a él transcurre la senda por la que bajamos.

Y nos despedimos con el "hollywoodiense" letrero de Cullera, en la Muntanya de les Raboses.

Hasta la próxima!!!